Los árbitros se rebelan porque la FMF quiere sortearlos para los juegos
 
¤ Dejaron en suspenso su participación en el torneo, tras reunirse con De la Torre

 MIGUEL ANGEL RAMIREZ

Los árbitros del futbol mexicano dejaron en suspenso anoche su participación en el siguiente torneo, ante la decisión de los dirigentes de sortearlos para los partidos.

Felipe Ramos Rizo dejó en claro que ellos no pueden ir contra lo que establece la FIFA, pues se exponen a un castigo, al igual que la Federación Mexicana de Futbol.

Encabezados por Ramos Rizo, los nazarenos se presentaron ayer en las nuevas oficinas de la FMF para aclarar la situación, una vez conocidas las intenciones de los dirigentes para el torneo de Verano 2002. Se hicieron acompañar por la circular número 763 de la FIFA, del pasado 23 de julio, porque el punto 6 no deja lugar a dudas:

"El nombramiento de silbantes es parte fundamental del desarrollo arbitral y debe ser la Comisión de Arbitros o sus representantes quienes desempeñen esta tarea.

"Los clubes no pueden injerir en los nombramientos de silbantes. Se les nombrará en partidos adecuados a su capacidad y experiencia, como parte de un proceso planificado. Si consideramos un desarrollo continuado no es admisible que el nombramiento de ellos se produzca mediante sorteos."

Pese a que se lo recordaron a Alberto de la Torre y a Miguel Pasquel, presidente y secretario general de la FMF, respectivamente ?ellos los recibieron?, no fue suficiente. Para el titular de la federación es necesario que la FIFA les diga "hasta dónde deveras prohíbe" el sorteo.

De la Torre trató de minimizar el problema. Pidió que no se manejara esto como una crisis en el arbitraje con directivos de la federación. Dijo que hablaron abiertamente y que el próximo día 10 habrá una reunión del consejo nacional y el comité directivo de primera división con la Comisión de Arbitraje para seguir aclarando las dudas.

Ayer por lo pronto nada resolvieron. De la Torre reconoció que deben acatar las disposiciones de la FIFA, "pero ninguna ley es retroactiva". Según él, la decisión de sortear a los árbitros la tomaron los dirigentes de la primera división en mayo de 2001 y la circular del organismo internacional es de dos meses después.

Ramos Rizo estuvo de acuerdo en que no era válido este argumento y al abandonar las instalaciones de la FMF confió que su colega, Armando Archundia, le recordó a De la Torre que "cuando hay una decisión en las reglas de juego y nos dicen a partir de hoy las cambian, es lo mismo. Pero es decisión de ellos".

Eso sí, puntualizó: "Nosotros no vamos a faltar a esa circular. Vamos a respetarla. Respetamos los acuerdos del Consejo porque somos institucionales, pero como árbitros internacionales no nos vamos a exponer a, primero ser castigados, y segundo a que la federación sea sancionada, porque también ellos pueden incurrir en una falta".

Agregó que en su caso no puede exponerse a quedar "fuera de un torneo" organizado por la FIFA.

El es firme candidato a representar a México en el Mundial de Japón-Corea del Sur 2002.

Además, señaló que Edgardo Codesal, presidente de la Comisión de Arbitraje, está en contra del sorteo y ellos lo van "a apoyar a muerte. Ahí si no vamos a fallarle".

Dijo que la comisión ya hizo sus designaciones para los partidos de la primera fecha del campeonato, que se inicia mañana, y lo hizo como de costumbre.

Confió que anoche hablarían con ellos para ver si no había ningún cambio y después se reunirían con los demás silbantes para decidir si dirigirían o no los encuentros.

Prometió dar a conocer hoy a los medios su acuerdo. "La decisión no será de Felipe Ramos Rizo sino de cerca de 30 árbitros."

De la Torre señaló que el acuerdo de los dirigentes era que la Comisión de Arbitraje designara a nueve silbantes para cada fecha, y ellos decidir a la plaza que irían.

Consideró que esto era para quitarle presión "hasta cierto punto" a la comisión y rechazó que pueda dar pie a algún veto de un club.

Esto no puede darse, aseguró, pero se le recordó que una vez lo hicieron los Tecos en una final contra Santos. "Yo supe que pasó algo así, pero no está en el reglamento que pueda vetar."