Leonardo Páez

Ahorcados con supropio mecate

DICE EL LUGAR común que cada pueblo tiene el gobierno que se merece y, a reserva de que nuestra incipiente democracia demuestre lo contrario, habría que agregar que todo pueblo tiene los espectáculos en general y la fiesta brava en particular que se merece o, más precisamente, que es capaz de exigir.

POR ELLO RESULTAN más bien grotescas las recientes fintas del promotor de la Plaza México respecto a si continúa o no al frente de la misma al declarar: "No tengo nada de ganas ni ilusión, ya veremos, igual me asocio con alguien (sic)... estoy decepcionado, esto me deprime (resic)... resulta que para todo soy el malo de la película (recontrtasic). Hago el esfuerzo para que todo salga bien (sicazo) y se topa uno con muchos problemas. Si estuviera ganando un dineral tal vez lo aceptaría, pero perdiendo (sicucha), no tiene caso".

ALGUIEN QUE NO ha hecho sino su regalada gana a lo largo de nueve años como fallido promotor de la fiesta de toros, ¿ya perdió la ilusión por jugar a promover un espectáculo hoy más dependiente de España que nunca gracias a sus erráticas promociones?, ¿ya no le quedan socios que inviertan sin rigor de resultados?, ¿el derecho de apartado no le deja bastante?, ¿otros le crean problemas o es su actitud de empresario sordo y ciego?, ¿en tantos años de ensayo y error taurinos no ha aprendido a ganar un dineral?, ¿todo ese tiempo ?108 meses? se la ha pasado arriesgando su dinero? Ole con el cinismo.

POR SU QUEJUMBROSA parte, el ahora indultador Jorge Gutiérrez, al referirse a la demagógica oferta del promotor de cederle las ganancias de una corrida que organizara el torero en la México, manifestó: "No soy empresario... Si él hubiera tenido interés, me habría contratado hace tiempo, en una fecha más importante, pero no quiere a la fiesta ni a los que participamos en ella, ahora se quiere hacer la víctima de la fiesta... El señor se pelea con el que se le pone enfrente y ya estoy harto de amenazas e insultos". Pues se tardó en hartarse.

OTRO QUE PREFIERE la queja extemporánea a las actitudes definidas y oportunas es Mauricio Portillo, representante de la Asociación de Matadores, quien adoptando un enésimo desplante fallido ante el insensible empresario, expresó, luego de que el promotor decepcionado le negara la plazota para organizar la corrida de la Oreja de Oro, que "cada quien se rasque con sus uñas"... Para mañana ceder a otra presión.

AGIL Y CELOSO LE respondió entonces Juan Arturo Torres Landa, especie de Fidel Velázquez de los taurinos, ya que es presidente tanto de la asociación de empresarios como de la asociación de agrupaciones taurinas quien, acostumbrado a mandar, advirtió: "Nosotros también tenemos uñas y no toleramos amenazas, pues pudiéramos cerrar las plazas del país (sicazo que llegó hasta la CTM). Lo que se tiene que hacer es pensar en el público y hacer mejor las cosas".

EN TAN ESTRIDENTE coro de hermosos ineptos y colonizados juleros, la única nota afinada es que en el México taurino los ricos han resultado igual de brutos que los jodidos.