Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Martes 19 de marzo de 2002
  Primera y Contraportada
  Editorial
  Opinión
  Correo Ilustrado
  Política
  Economía
  Cultura
  Espectáculos
  Estados
  Capital
  Mundo
  Sociedad y Justicia
  Deportes
  Lunes en la Ciencia
  Suplementos
  Perfiles
  Fotografía
  Cartones
  La Jornada de Oriente
  Correo Electrónico
  Busquedas
  

Economía

MEXICO, SA

Carlos Fernández-Vega

MAL COMIENZA UN cónclave internacional -como el inaugurado ayer en la Sultana del Norte- cuando, por un lado, el organizador del encuentro se disculpa anticipadamente por no encontrar "soluciones definitivas" a los problemas que aquejan a la humanidad y los supuestos beneficiarios del evento "restringen" sus históricos reclamos de asistencia financiera para el desarrollo, la reducción del débito externo y el combate a la pobreza; por el otro, el tacaño tío rico de la familia ofrece, de muy mala gana, míseros 5 mil millones de dólares -en el próximo trienio- para tales urgencias y amenaza con retirarse de la fiesta de los buenos deseos si alguien osa quitar una sola coma al documento conocido como Consenso de Monterrey.

EL REPRESENTANTE DEL tacaño Rico Mac Bush en la Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo, Alan P. Larson -que en sus tiempos libre despacha como subsecretario de Relaciones Económicas de Negocios y Agricultura de Estados Unidos-, mandó a paseo a la Organización de Naciones Unidas, empezando con Kofi Annan, y advirtió, con la diplomacia que caracteriza a los vecinos del norte, que su gobierno no fijará porcentaje alguno de su producto interno bruto para la asistencia oficial al desarrollo.

LA TIMIDA ONU ha solicitado a los países desarrollados que aporten 0.7 por ciento anual de su PIB para destinarlo al combate de la pobreza en el "mundo menos favorecido". Pero Estados Unidos dijo No y de ahí no se moverá, porque -afirma Larson- "no se trata de un concurso (si fuera de popularidad lo perdería de inmediato) en el que se busque el número mayor... Se trata de hacer esfuerzos mayores para lograr las metas finales de desarrollo, antes que prestablecer números de lo que debe ser la ayuda financiera".

 

ASI ES: 5 MIL millones de dólares, como máximo (entre 2003 y 2006), que básicamente se destinarían a los países africanos. Este monto -de concretarse- resultaría inferior al que anualmente desembolsan las 48 naciones más pobres del planeta por el pago del servicio de su deuda externa, y equivaldría a sólo 0.44 por ciento, cada año, del presupuesto que Rico Mac Bush destinará el próximo año a satisfacer las necesidades de su aparato industrial-militar.

ADEMAS, EL TACAÑO tío rico no desea sorpresas y, por ello, no se le puede llevar la contraria. No quiere modificaciones, en absoluto, en el documento conocido como Consenso de Monterrey. Como esta exigencia no se puede rechazar -como diría Don Corleone-, los viceministros de Economía y Finanzas de 189 delegaciones de diversos países del mundo participantes en la conferencia aceptaron ayer, sin modificaciones, dicho documento, mismo que remitirán, eso sí, a sus ministros para su dictamen y aprobación.

DE ACUERDO CON información de la cumbre, en la primera sesión plenaria de la conferencia se aprobó íntegramente el texto, el cual tuvo el consenso de los países miembros de la ONU, especialmente los pertenecientes a la "retaguardia" (Fox dixit). Por una mera casualidad, en ese primer encuentro -privado- "no hubo observaciones" al Consenso de Monterrey. La exigencia, pues, fue cabalmente atendida.

SIN EMBARGO, LA ONU, por medio de sus voceros, reconoció que el texto del multicitado consenso "no contiene todas las propuestas esperadas ni compromisos más firmes por parte de las naciones del mundo en favor del desarrollo, debido a que tuvo que ser modificado para evitar enfrentamientos entre los países... En un principio el texto contenía compromisos más firmes por parte de las naciones del mundo en favor del desarrollo... El documento -final- no es el soñado, pero es lo más que hemos podido construir con las 189 naciones -representadas en Monterrey- y no se modificará". Así que todo el mundo dobló las manos: el ''consentimiento" de los citados viceministros no fue tal y la decisión de la ONU de "suavizar" el contenido, tampoco. Por todas partes se ve el sello de Rico Mac Bush y sus operadores.

QUÉ DECIR DE LA actitud de algunas de las naciones que históricamente han reivindicado su derecho al desarrollo. Ante la mísera actitud de los amigous del mundo, los del "menos favorecido" también doblaron las manos:

"LOS PAISES POBRES -antes el Sur o el Tercer Mundo, términos pasados de moda en el nuevo léxico de los gobernantes globalizados- han restringido a tal grado sus demandas y reclamos ante las naciones ricas, que en la Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo ya no pedirán mayores flujos de asistencia para paliar su condición de miseria, porque de antemano saben que es una puerta cerrada... No tocarán el tema del desorbitado gasto militar de Estados Unidos -que el próximo año será 10 veces superior al total de ayuda neta oficial para los países en desarrollo que se canalizó en 2001- ni sugerirán que los acreedores reduzcan la impagable deuda externa de los más pobres... Si acaso, en este rubro del endeudamiento, cuando algunos de los llamados países en desarrollo, con un nivel insostenible de débito, lleguen a extremos, como Argentina -una condición que ahora se llama de inviabilidad financiera- podrían aplicarse ciertas medidas de alivio a cambio de renovados compromisos de buen comportamiento" (La Jornada, Blanche Petrich y Roberto González Amador).

EN UN ULTIMO esfuerzo por ser aunque sea escuchados en la cumbre de Monterrey, los países del Grupo de Río y del Mercosur presentarán sus posturas en la conferencia internacional a una sola voz, de acuerdo con la canciller chilena Soledad Alvear. El Grupo de Río es el principal mecanismo de concertación de América Latina, con 19 naciones del área como miembros plenos, mientras el Mercado Común del Sur (Mercosur) está integrado por Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, más Chile y Bolivia como asociados.

TODO LO ANTERIOR se registra en la suavizada y acotada Cumbre de Monterrey. Habrá que esperar la llegada y participación del amigou de todas las naciones, Rico Mac Bush, para saber qué nos depara el destino.

Las rebanadas del pastel:


LA BUENA NUEVA ES que durante el presente año México podrá exportar 137 mil 788 toneladas de azúcar a Estados Unidos, dentro del arancel-cuota establecido en el Tratado de Libre Comercio, informó la Secretaría de Economía. Qué bueno, porque ya sólo faltan alrededor de 350 mil toneladas del dulce para que, finalmente, Estados Unidos cumpla con los acuerdos del TLC... FELICIDADES A PEMEX por un aniversario más sin ser privatizado... šLazarito! levántate y ándale.

[email protected] / Fax: 55 45 12 53

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año