Telmex perdería un buen número de plazas, advierte Hernández Juárez

Pretende PAN beneficiar a extranjeros con las reformas a la ley de telecomunicaciones: STRM

El sindicato amenaza con realizar movilizaciones y afectar el servicio al público

FABIOLA MARTINEZ

La reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones que impulsa el Partido Acción Nacional (PAN) provocaría "la eliminación de un buen número de plazas" en Teléfonos de México, señaló Francisco Hernández Juárez, líder del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM).

"Los trabajadores estamos conscientes de que esa iniciativa le va a pegar a un buen número de plazas, pero obviamente ni yo ni mis compañeros nos vamos a quedar con los brazos cruzados, eso ténganlo por seguro. Recurriremos a movilizaciones en la calle y si es necesario realizaremos afectaciones al servicio a nivel nacional", advirtió el dirigente.

El STRM cuenta actualmente con una base de 42 mil trabajadores en activo, 7 mil jubilados, 3 mil empleados adscritos a la empresa Tecmarketing y 5 mil en el área de bienes raíces. En contraparte, Telmex ha perdido 60 por ciento del mercado de larga distancia, 20 por ciento de la telefonía local y compite actualmente con cerca de 200 empresas en diferentes rubros de las telecomunicaciones como Internet, comercio electrónico o base de datos.

Hernández Juárez dijo que el senador panista Javier Corral, promotor de la iniciativa que pretende acotar a Telmex por considerarla un monopolio, tiene como objetivo beneficiar a las empresas trasnacionales "con esa inclinación ideológica que tiene el legislador para que las empresas extranjeras dominen el mercado y para permitirle toda clase de ventajas a las empresas foráneas".

La iniciativa de reforma a la Ley de Telecomunicaciones se encuentra actualmente en un impasse y podría discutirse en el próximo periodo de sesiones del Congreso de la Unión. Respecto a la propuesta del PAN, el líder sindical dijo que esa iniciativa busca en la ley lo que no logró la competencia y mantiene una clara intención de debilitar la presencia de Telmex en el mercado.

El dirigente manifestó su apoyo a Telmex por encima de cualquier empresa multinacional y en este sentido destacó la calificación que recientemente les otorgó la revista Forbes como "la mejor telefónica del mundo".

"Entre la defensa de Roberto Hernández (propietario de Banamex-Avantel) y de Carlos Slim (presidente del Grupo Carso-Telmex), pues yo me voy por la estrategia que ha defendido Slim, porque es una empresa mexicana, mientras que Hernández sólo les ha entregado sus bancos a los extranjeros", expresó.

Rechazó que empresas como Avantel, Alestra o AT&T hayan realizado inversiones por 15 mil millones de dólares, mientras que Telmex -aseguró- ha invertido desde su privatización, en 1990, cerca de 14 mil millones de dólares. "La competencia ha invertido no más de 700 mil dólares y desde esa postura quiere usar la red telefónica con el aval de una ley".

De acuerdo con la versión del líder sindical, la iniciativa panista en materia de telecomunicaciones obligaría a Telmex a ceder 30 por ciento de su mercado y permitiría a sus competidores el uso de la red telefónica nacional sin pago extra, es decir, sólo al costo, como la alternativa para ofrecer tarifas competitivas.

La presión de las empresas foráneas

"Me parece que él (Corral) se deja impresionar mucho por la presencia de las empresas multinacionales y la presión del gobierno de Estados Unidos", país que acusó a Telmex ante la Organización Mundial de Comercio de ser un monopolio y exige una sanción para la telefónica mexicana.

Por lo tanto, agregó, la presión que ejerce Estados Unidos sobre el gobierno mexicano y en particular sobre el PAN tiene como objetivo lograr una regulación en beneficio de las empresas que patrocina (Avantel y Alestra), y crear un organismo multinacional que le permita a Estados Unidos la entrada al mercado de telecomunicaciones de Europa.

Hernández Juárez dijo que otro riesgo es ampliar la participación de empresas extranjeras más allá del 49 por ciento actual, porque un eventual debilitamiento de Telmex provocaría una reducción significativa de la plantilla de esta empresa e incluso, al cambiar de patrón, "volveríamos a empezar", señaló en referencia al proceso laboral tras la privatización de Telmex hace 12 años.

El STRM hizo un llamado a la Conferencia Parlamentaria, grupo de legisladores de ambas cámaras encargada de la reforma a la ley de telecomunicaciones, para que apliquen en su decisión una "visión de largo plazo y en defensa del interés nacional".

Argumentó que repartir el escaso mercado que hoy existe o permitir la expansión de las estrategias de las multinacionales "no corresponde a las prioridades del país. Obstruir un mercado que no está maduro y extranjerizarlo dañaría las opciones soberanas de México".