Sin acuerdo, la propuesta para que declare de "extrema sequía" el ciclo 1997-2002

Tibio exhorto de la Permanente a Fox para que informe sobre el diferendo con EU por agua

A. BECERRIL, R. GARDUÑO Y E. MENDEZ

Pese a la magnitud del diferendo entre México y Estados Unidos por la distribución de agua del río Bravo, la Comisión Permanente del Congreso de la Unión sólo determinó exhortar al gobierno foxista a informar al Poder Legislativo sobre "la posición y las medidas que habrá de tomar" ante las exigencias del vecino del norte en la materia.

En tanto, el secretario de Gobernación, Santiago Creel, informó que este jueves se reunirá una comisión intersecretarial para revisar el presunto adeudo de agua a Estados Unidos. Cuestionado sobre el proyecto de la comisión para resolver el problema, respondió: "aun cuando no hay una definición de manera concreta, vamos a tratar de hacerlo lo más pronto que sea posible".

Puntos de vista divergentes entre legisladores del PAN, que incluso llegaron a la confrontación, impidieron que se tomaran en cuenta los señalamientos del senador priísta por Tamaulipas, Oscar Luebbert, en el sentido de que el punto de acuerdo propuesto pasaba por alto temas fundamentales, entre ellos exigir al Ejecutivo federal aclarar que no hay adeudo de agua en este momento con Estados Unidos.

El presidente en funciones del órgano legislativo, el senador panista César Jáuregui, ya había aceptado que el punto de acuerdo regresara a comisiones para enriquecerlo como proponía Luebbert y demandar a Fox precisiones importantes, entre éstas exhortarlo a declarar de "extrema sequía" el ciclo comprendido entre 1997 y 2002.

Incluso la senadora del PAN por Tamaulipas, Lydia Madero, estuvo de acuerdo con la propuesta de Luebbert, pero el argumento en contra de su compañero de partido Ricardo García Cervantes, respecto de que no procedía regresar un dictamen ya aprobado, echó por tierra la opción de acudir a una moción suspensiva para salvar el trámite, como lo planteó Jáuregui, quien molesto ya ni siquiera aceptó que ahí mismo se modificara el punto de acuerdo.

Luebbert precisó desde un principio que no estaba en desacuerdo con el contenido del dictamen en el sentido de que el Ejecutivo informara al Legislativo "la posición y las medidas que tomará el gobierno de México ante los requerimientos de Estados Unidos, que exige el cumplimiento de las entregas de agua estipuladas en el tratado internacional" en la materia.

Dijo que este planteamiento requería adiciones importantes, entre ellas rescatar la postura del Senado del pasado 30 de abril, cuando se expresó el desacuerdo con el acta 307, por la que el gobierno federal comprometió la entrega a Estados Unidos de volúmenes de agua no establecidos en el tratado.

En tribuna advirtió que la postura de la Comisión Permanente requería del go-bierno reconocer que no hay adeudo de agua con Estados Unidos, como consta en la información oficial en poder del Senado, donde se señala que está cubierto el déficit del líquido registrado en 1997, y que fue cubierto el 26 de mayo de 2001.

"Sin embargo, hay declaraciones de algunos funcionarios federales que dejan en entredicho esta información", dijo, y afirmó que "algunas voces del gobierno han confundido a la opinión pública" al pretender que se reconozca desde ahora un déficit de agua de un ciclo que concluirá el 26 de septiembre próximo, pero que quiere reconocer de manera anticipada.

"Creemos que esta información ha generado un gran desconcierto y alienta las expectativas de los granjeros texanos de que México ha incumplido y debe agua". Es fundamental, recalcó, que Fox haga público y oficial en México y en Estados Unidos que no hay ningún adeudo de agua, que no es posible anticipar deudas sobre un ciclo que aún no concluye y que tiene un plazo adicional de cinco años para liquidarse.

Además, añadió, se requería un exhorto del Congreso al presidente Vicente Fox para declarar la "extrema sequía" en la cuenca del río Bravo en el ciclo 1997-2002, ya que de acuerdo con el tratado internacional México tendría un plazo adicional de cinco años para cubrir el déficit. Ello es fundamental, subrayó, porque el secretario de Agricultura, Javier Usabiaga, declaró que no ha habido sequía.

Pidió luego que el punto de acuerdo regresara a comisiones, para enriquecerlo con todos esos planteamientos. La panista Lydia Madero estuvo de acuerdo. Precisó que México ha liquidado los adeudos del ciclo 25, correspondiente a los años 1992 a 1997 y por ello no debe agua a Estados Unidos en este momento.

Dijo que el nivel de las presas nacionales en la cuenca del río Bravo está a 15.7 por ciento de su capacidad real y el volumen de las presas internacionales actualmente alcanza 9.7 por ciento. No resulta pertinente por ello, recalcó, entregar el agua disponible a Estados Unidos y afectar a las entidades fronterizas, "medida que ni el gobierno ha propuesto ni el Congreso de la Unión estaría dispuesto a aceptar".

Parecía no haber problema y Jáuregui estaba a punto de regresar a comisiones el dictamen, cuando el diputado García Cervantes se opuso. Argumentó que, en todo caso, lo que habría procedido sería una moción suspensiva, pero que debió presentarse al inicio de la sesión y por la asamblea.

Al ver la actitud del panista, reforzada por su compañero Alejandro Zapata Perogordo, Luebbert retiró su propuesta y planteó enriquecer el punto de acuerdo, discutiendo en la sesión los cambios. Molesto, Jáuregui se negó a ello. "No hay ninguna enmienda por escrito", respondió a una pregunta expresa de Zapata, y ahí acabó el debate.

Mientras, el apoderado legal del distrito de riego 025 de Tamaulipas, René Enríquez Valenzuela, informó que este jueves presentarán una denuncia penal ante la PGR en contra de los secretarios de Medio Ambiente y de Relaciones Exteriores, Víctor Lichtinger y Jorge Castañeda, respectivamente, así como del director de la Comisión Nacional del Agua, Cristóbal Jaime Jáquez.

La denuncia contra los funcionarios será "por entregar agua a Estados Unidos en forma ilegal; despojar del líquido a 14 mil 500 agricultores del estado para cubrir un déficit que se generó por la negligencia e irresponsabilidad de las autoridades, que para cubrirlo argumentan una sequía extraordinaria, lo cual es totalmente falso".

Por otra parte, la dirigencia del PRI exhortó al presidente Vicente Fox y a su gabinete a terminar con la "comedia de equivocaciones" que han escenificado con las versiones encontradas respecto de si es real o no la deuda de agua de México con Estados Unidos.

El senador Ulises Ruiz Ortiz, presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos del Senado; el diputado Samuel Aguilar; el vocero del CEN, Carlos Jiménez Macías, y el secretario de Gestión Social del tricolor, Omar Bazán, defendieron la postura priísta respecto de que sólo hasta septiembre, cuando vence el ciclo 26, podrá determinarse si hay o no un adeudo.