Putin pide solución al problema del libre tránsito de habitantes de Kaliningrado a su país

La Unión Europea otorgará a Rusia el estatus de "economía de mercado", anticipa Aznar

Confía el Kremlin en que la decisión estimule las exportaciones rusas hacia Europa

JUAN PABLO DUCH CORRESPONSAL

Moscu, 29 de mayo. La novena reunión cumbre de Rusia y la Unión Europea (UE) concluyó este miércoles aquí sin que las partes pudieran encontrar una solución al diferendo de Kaliningrado y, a la vez, con la promesa de que la UE otorgará a Rusia el estatus de economía de mercado.

El anfitrión, el presidente Vladimir Putin, que apenas ayer celebró en Italia un nuevo entierro de la guerra fría junto con el presidente en turno de la UE, el presidente del gobierno español, José María Aznar, llegó a condicionar hoy la cooperación de su país con la UE a que se resuelva el problema del libre tránsito (sin necesidad de visa) de los habitantes de Kaliningrado hacia Rusia.

Hasta ahora, el destino del millón 300 mil rusos que viven en este enclave de la antigua Prusia Oriental, desde el punto de vista de Moscú, es quedar aislados del resto del país cuando se formalice, en 2004, el ingreso a la UE de Lituania y Polonia.

La severa legislación de la UE exige que los ciudadanos rusos presenten visa europea para cruzar el territorio de cualquier estado de la llamada zona de Schengen, posición que comparten los dos países candidatos a la adhesión, al tiempo que la mayoría de los habitantes de Kaliningrado, acostumbrados a viajar a Rusia sin requisito alguno, ni siquiera tienen pasaporte.

El gobierno de Rusia insiste en que se conceda a la región un tratamiento especial y promueve que se establezcan "corredores" ferroviarios o por carretera, planteamiento que la UE rechaza.

"Ahora que hemos enterrado la guerra fría es muy difícil de entender ese enfoque en relación con Kaliningrado", se quejó Putin al dar comienzo a su reunión con Aznar, quien estuvo acompañado del italiano Romano Prodi, presidente de la Comisión Europea, y otros altos funcionarios de la UE.

Para el mandatario ruso, "urge romper el circulo vicioso en que ninguna propuesta nuestra para garantizar el traslado de personas o mercancías entre Kaliningrado y Rusia encuentra eco en Bruselas (sede de la UE)".

Putin fue subiendo de tono y enfatizó: "Por el momento, se nos ofrecen soluciones que sólo significan una cosa: que se ignora el derecho de los rusos a reunirse con sus familiares que viven en otra parte del país".

Romano Prodi fue el encargado de reiterar que la UE no considera posible modificar para los habitantes de Kaliningrado regulaciones que se aplican en todo el territorio de los estados miembros, si bien acompañó la negativa con la frase de cortesía de que se trabaja "de modo intenso en favor de un posible libre tránsito de personas entre Kaliningrado y los países vecinos".

Qué quiso decir Prodi, se sabrá hasta la próxima reunión cumbre de Rusia y la UE, prevista para noviembre próximo, casualmente el mismo mes en que se hará oficial, en Praga, la admisión de nuevos miembros a la OTAN.

Por su parte, José María Aznar, en su calidad de presidente en turno de la UE, aseguró que "la Unión Europea está decidida a reconocer el carácter de economía de mercado" de Rusia, destacó "la orientación correcta" de las reformas impulsadas por el gobierno de Putin y expresó el deseo de que dichas transformaciones en la economía rusa permitan un "pronto ingreso" de este país en la Organización Mundial de Comercio (OMC).

De esta manera, Aznar matizó un tanto la sorprendente afirmación que hizo Prodi, justo al comenzar el encuentro con Putin: "Estoy encantado de anunciarle hoy que vamos a acordar el estatus de economía de mercado para Rusia".

Aunque Prodi no precisó cuándo, es sin duda un signo positivo. Al menos, el Kremlin confía en que se otorgue pronto dicho reconocimiento a la economía rusa, que se reserva habitualmente para los miembros de la OMC. Espera también que ello estimule las exportaciones rusas hacia Europa y, sobre todo, que ponga fin a las pérdidas significativas por procedimientos antidumping, a la fecha 14, abiertos por la UE contra Rusia.