Fernández de Cevallos ofrece a maestros "respuesta inmediata" del gobierno

Interviene el Senado para que negocien CNTE y autoridades

Los profesores bloquearon los accesos en Xicoténcatl; destrozaron vidrios y dos videocámaras

CLAUDIA HERRERA BELTRAN, ANDREA BECERRIL Y ROBERTO GARDUÑO

El Senado de la República se comprometió a tender un puente de diálogo para que a más tardar hoy se fijen fechas con el propósito de establecer mesas de negociación entre la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y la Secretaría de Educación Pública (SEP), el SNTE, el ISSSTE y también se reanuden las pláticas con la Secretaría de Gobernación.

Otra vez, como sucedió el año pasado, Diego Fernández de Cevallos desatoró el conflicto con una imposición. Hizo prevalecer su propuesta para que una comisión de senadores abra las puertas del gobierno y dé seguimiento a las pláticas. De hecho, ofreció "respuesta inmediata".

Al acuerdo le antecedió el bloqueo a los accesos del Senado, donde un grupo de docentes corrió a empujones a los granaderos que resguardaban el edificio. Después golpeó la puerta de hierro, rompió sus cristales y destruyó las dos videocámaras que grababan la agresión.

La movilización de los mentores fue "hormiga". Salieron en grupos desde su campamento base de la Plaza de la Constitución, y poco antes de las 11 de la mañana rodearon las dos puertas de la casona de Xicoténcatl, donde un grupo de granaderos, en su mayoría mujeres, intentó hacer una valla para impedir el avance de los maestros.

Pero éstos, que llevaban los ánimos alterados después de 15 días de movilizaciones en la ciudad de México, se lanzaron contra el portón principal con palos, puños y pies. Al mismo tiempo gritaban a los policías: "šVáyanse a la chingada!"

El enojo persistía y a empellones orillaron por los muros a los agentes policiacos, los llevaron hasta la plaza Manuel Tolsá, donde iniciaron la retirada. Todavía siete granaderos rezagados se escabulleron con dificultad en medio de las rechiflas y mentadas.

Una vez que se libraron de la vigilancia policiaca, los mentores se apoderaron de los accesos del Senado y el secretario general de la sección 22 de Oaxaca, Alejandro Leal, ofreció una conferencia de prensa para exigir la abrogación del Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica e incremento al presupuesto educativo, y se declaró contra las reformas laboral y del sistema de pensiones.

Leal, profesor de educación indígena, se quejó de "la cerrazón" del gobierno foxista porque incumplió su promesa de instalar una mesa de negociación el martes pasado en Palacio Nacional, argumentando que los profesores deben regresar a sus estados con el propósito de resolver en sus lugares de origen los problemas específicos que los afectan.

Calificó de farsa el anuncio del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) de que impulsa una "huelga trabajando", que consiste en que los profesores porten listones en protesta por el incremento de 5.75 por ciento directo al salario, y advirtió que esta estrategia es una "respuesta desesperada" del sector institucional para tratar de encubrir la inconformidad del magisterio.

Apenas culminó la rueda de prensa, un grupo minoritario de maestros que se encontraba frente a la puerta principal de Xicoténcatl comenzó de nuevo a golpearla y los cristales se resquebrajaron. Dos mentores treparon el portón hasta colgarse de las dos videocámaras que los grababan y éstas se desplomaron.

A esa hora la Comisión Permanente del Congreso de la Unión sesionaba. Casi la mitad de los legisladores que la integran no ingresaron al recinto a causa del bloqueo. Al enterarse, Fernández de Cevallos salió para establecer contacto con los maestros.

El año pasado, el conflicto magisterial comenzó a tener un desenlace parecido cuando, al agotarse las instancias de negociación, los maestros recurrieron al Senado, donde el panista los atendió, después hizo una llamada al subsecretario de Gobernación, Ramón Martín Huerta, y casi le ordenó: "Ramón, estoy aquí con los maestros y les ofrecí que los vas a recibir. Por favor, atiéndelos".

Ayer, tras diversos esfuerzos y un ir y venir de asistentes por los pasillos del recinto, el presidente del Senado logró establecer contacto con Alejandro Leal y le dijo: "Maestro, antes que nada hablemos y respetémonos. Por favor, haga una valla frente a la puerta para que puedan entrar tres representantes de ustedes".

Pero lo que no sabía el legislador panista era que los vidrios de la puerta estaban rotos, y al bajar de su oficina a la entrada del Senado se indignó al ver los destrozos. "šEso no es lo hablado! šEso no es! Hablamos y ya están madreando la puerta", expresó.

Acompañado del priísta Emilio Gamboa y del perredista Demetrio Sodi, Fernández de Cevallos daba órdenes: "šCiérrenle, y no hay que abrir hasta que hagan una valla!" En cuanto los maestros lo vieron le comenzaron a gritar: "šEsos son, esos son, los que roban a la nación!"

Los dirigentes de la CNTE se organizaron rápidamente e ingresaron Roberto Reyes, de la sección 18 de Michoacán; Víctor Echeverría, de la 14 de Guerrero, y Alejandro Leal, de la 22 de Oaxaca.

Diego Fernández cambió el tono duro por el de la broma al dirigirse a los reporteros que ingresaron, con su autorización, al salón de la reunión: "Apúrense, rápido, porque no tenemos su tiempo".

De esa forma se inició la reunión, que duró casi dos horas. El senador explicó cómo se llegó hasta ahí. "Después de una negociación nada fácil, pero en virtud de que el maestro Leal nos dio su palabra, el presidente del Senado aceptó que entrara una comisión de tres maestros bajo el juramento de que no habrá ninguna agresión contra el Senado. Los recibimos con respeto, vamos a escuchar sus planteamientos y el Senado hará todo lo que pueda de acuerdo con la ley".

Roberto Reyes acusó al gobierno federal de estar haciendo creer que los integrantes de la CNTE se encuentran en la ciudad de México en demanda de un aumento salarial, "pero nuestra lucha es por la defensa de la educación gratuita, porque ésta no se hace con discursos, y lo que hacemos tiene que ver con el abandono premeditado de la enseñanza pública por el Ejecutivo federal".

El maestro Víctor Echeverría lanzó una voz de alarma porque en los últimos seis años la inversión física para las instalaciones educativas ha caído 89 por ciento. "Hay una diferencia brutal en atención de infraestructura; luchamos para que no se recorte el gasto público y se restituyan los mil 800 millones de pesos del recorte a educación".

Los representantes del magisterio disidente también solicitaron que el Senado revise la situación en la que se encuentra el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE). "Por eso planteamos una reunión con el director del instituto y que el Senado cabildee y negocie para que Fox se siente a hablar con la CNTE sobre educación".

Leal reclamó que el gobierno federal les cerró las puertas y por eso expusieron al Senado que ya es justo que vuelva los ojos al pueblo. "No esperemos al estallido social, a que rompan puertas, vayan al asunto de fondo, que es el de la pobreza. Queremos que se restablezcan las mesas de negociación con Gobernación y SEP, y que los problemas educativos se incluyan en la agenda legislativa. Queremos compromisos y que esta mesa sea constructiva, no platicadora".

Fernández de Cevallos replicó a las afirmaciones de Leal. Le dijo que los graves problemas que planteaba no se pueden resolver con actos de violencia, por lo que propuso a los maestros integrar una comisión de diálogo "que será benéfica para la educación pública si ustedes hacen su tarea y nosotros la nuestra".

El senador perredista Demetrio Sodi planteó, por el contrario, que el problema educativo se considere en la negociación del presupuesto. "Por eso debemos establecer un programa con meta al 15 de diciembre que contenga el incremento de recursos y garantice, mediante el etiquetamiento, que ya no se den recortes a los recursos para la educación. La semana próxima, cuando venga el secretario de Hacienda (Francisco Gil), le preguntaremos por qué el gobierno federal ha decidido recortar el presupuesto educativo".

En su turno, el priísta Emilio Gamboa dijo coincidir con Sodi porque tras la reunión de ayer no se van a resolver los problemas, pero, dijo, habría que sacar compromisos que desemboquen en las peticiones del magisterio. "Nos da gusto escuchar, y sabiendo que sus salarios son muy bajos, que no vienen a solicitar aumentos de sus percepciones".

Leal recordó que el año pasado se reunieron con el subsecretario de Gobernación, Ramón Martín Huerta, quien les pidió comprensión porque la administración de Vicente Fox apenas comenzaba, y la CNTE así lo entendió. "Pero ahora que hemos vuelto nos dicen que no hay nada de nuestra solicitud para esclarecer los homicidios de 100 maestros".

Diego Fernández respondió a Demetrio Sodi y le dijo que no estaba de acuerdo en esperar a los tiempos legislativos para resolver los problemas de los maestros. "Me inclino por que el Senado proponga el diálogo con las autoridades", expuso.

El senador del PRD sugirió a los tres representantes de la CNTE que vean en los legisladores a sus aliados y no a simples gestores de una cita con el Ejecutivo.

Otra vez Fernández de Cevallos contestó a Sodi: "Siempre he hablado con la verdad y, šhombre!, podemos esperar que tras esta reunión haya una respuesta favorable. Cuando nosotros hablamos de que será una respuesta inmediata, es inmediata. Yo sólo insisto en que por el bien de su movimiento, los infiltrados que ustedes dicen que hay, se vayan, y así antes de 24 horas habrá comunicación directa con ustedes, será una respuesta inmediata para que se inicien las negociaciones con el gobierno federal. Si se da un mínimo de confianza las cosas van a marchar".

Los argumentos del panista convencieron a Leal, Echeverría y Reyes, quienes accedieron de inmediato a anotar sus números telefónicos en una tarjeta para que Diego Fernández se comunicara con ellos durante las siguientes 24 horas e informarles de la evolución del proceso. Todos contentos, los mentores abandonaron el salón del encuentro.

Los maestros salieron a informar a sus compañeros de los acuerdos alcanzados y confirmaron que hoy realizarán una marcha a Los Pinos. En tanto, Diego Fernández continuó con su labor de negociador y se reunió con tres trabajadores del sindicato de la petroquímica Agroindustrias del Balsas, que desde el 14 de noviembre pasado se encuentra en huelga.

Cuando los maestros retiraban el cerco a la casona de Xicoténcatl, el panista Fernández de Cevallos salió por la puerta grande, triunfador, pues reditó un capítulo más de la probable solución al conflicto magisterial.