El técnico turco sería feliz si consigue un empate con Brasil
Bora espera tranquilo el juego China-Costa Rica
REUTERS Y DPA
Sogwipo, Corea del Sur, 29 de mayo. Para ser un
hombre cuyo equipo debuta en una Copa del Mundo, el director técnico
de la selección china de futbol, Bora Milutinovic, estaba
muy tranquilo este miércoles.
Después de todo ya estuvo en los cuatro mundiales
anteriores dirigiendo a México (1986), Costa Rica (1990), Estados
Unidos (1994) y Nigeria (1998).
Esta es su quinta justa consecutiva del orbe, aunque es
la primera vez que Bora clasifica a un equipo para el torneo, ya que en
las otras ocasiones tanto México como Estados Unidos participaban
como locales, mientras a Costa Rica y Nigeria los condujo cuando ya habían
asegurado sus participaciones.
Por eso también resulta una extraña ironía
que el primer rival de China en el grupo C será justamente Costa
Rica, que casualmente jugará su primer partido de una fase final
mundialista sin el popular Bora en su banquillo.
Aunque eso sí, en el campamento tico se dijo que
el equipo echará mano de su estrella Paulo César Wanchope
con la pretensión de asegurar una victoria ante China.
El partido, previsto para el 4 de junio, también
podría resultar crucial para las posibilidades de la escuadra asiática
en el torneo, ya que el conjunto centroamericano es el rival que en los
papeles luce menos complicado. Los otros equipos del grupo C son Brasil
y Turquía.
Mientras, el cuadro turco prepara su choque contra Brasil,
especialmente para contener a sus poderosos lanzadores de tiros libres,
según dijo el técnico Senol Gunes.
Aseguró a los periodistas que presentará
un equipo que "no cejará, luchará y peleará" contra
los brasileños, pero agregó que se sentiría feliz
si consiguiera empatar.