ASTILLERO
Julio Hernández López
La celebración ecuestre de Fox
Se disuelve la posibilidad de conseguir acuerdos pluripartidistas
El PRI se balcaniza, el PRD ahonda sus divisiones y el PAN posterga sus principios
EL PROXIMO 15, el Presidente de la República comenzará a celebrar la Independencia nacional a lomo de su caballo favorito, El Rey. Participará ese día emblemático en la tradicional cabalgata (la de este año será su edición 19) que saldrá de San Felipe Torres Mochas para terminar en Dolores Hidalgo, en un recorrido de 52 kilómetros que iniciará a las 8 de la mañana y terminará a las 5 de la tarde (no se sabe si el titular del Poder Ejecutivo federal completará el itinerario o sólo participará en algún tramo; lo que sí se adelanta es que se ha invitado a gobernadores panistas, como los de Aguascalientes, Jalisco, Querétaro y del anfitrión Guanajuato, así como el perredista de Michoacán). Por la noche, el mandatario nacional dará el Grito en la capital del país, en una ceremonia que por fortuna no sufrió el embate de los ánimos presuntamente ahorradores que cancelaron festejos similares en otras latitudes.
LA BUENA DISPOSICION ecuestre y festiva del Presidente de México habría de sugerir en otras circunstancias la buena salud de los asuntos públicos, a tal grado que su principal conductor pudiera pasarse horas montado en carruseles de ocasión. Por desgracia, pareciera que México necesitase en estos momentos más que paseos a caballo. Para empezar, se disuelve de manera acelerada la posibilidad de conseguir acuerdos políticos pluripartidistas en temas que son sustanciales para la buena marcha del gobierno foxista: el PRI se balcaniza sin que Roberto Madrazo pueda hacer otra cosa que declaraciones optimistas y maniobras menores para aparentar unidad en medio del polvorín interno, con lo cual disminuyen sensiblemente las posibilidades de aprobar sin grandes sobresaltos la reforma eléctrica con la que el presidente Fox necesita mostrar a los capitales externos que sus intereses estarían bien servidos en México; el PRD también ahonda sus divisiones, al grado que Andrés Manuel López Obrador ha cerrado las posibilidades de convergencia con el priísmo madracista al acusar al ex gobernador de Tabasco de ser un hampón político (lance de billar de varias bandas, una de cuyas bolas impactables sería Rosario Robles, quien acabaría siendo, al firmar acuerdos en Morelia con Madrazo, una especie de cómplice del cártel del Grijalva, según la visión pejelagarta); y el propio PAN, que ni siquiera pudo ayer aprobar su programa de acción política, dejando para después de los comicios de 2003 la definición de cómo convertir en hechos concretos las aspiraciones de sus nuevos principios de doctrina que así quedan como meros suspiros al aire.
MENOS ALEGRE SERIA jugar a los caballitos si se tomara en cuenta la reaparición de un fantasma que ha durado más de los 15 minutos que se le habían dado para que se esfumara para siempre. El zapatismo galopa de nuevo, justamente en el momento en que se ha cerrado el ciclo procesal judicial que le había llevado a un silencio absoluto: callados por decisión propia luego de las reformas constitucionales aprobadas por el Congreso federal en materia de asuntos indígenas, ahora vuelven a tener foro natural cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha declarado intocadas tales modificaciones. La resolución judicial toma, para variar, mal parado al gobierno foxista, que creyó candorosamente que un problema como el chiapaneco podría darse por inexistente mediante el recurso simple de relegarlo y desatenderlo. Desde que el presidente Fox volcó por todavía inexplicadas razones todo su activismo en la atención del zapatismo y su marcha histórica a la ciudad de México, jamás se ha vuelto a trazar y a desarrollar una estrategia medianamente inteligente para sacar tal problema del empantanamiento. En todo caso, el presidente Fox creyó suficiente declarar a Marcos su amigo y a declarar por doquier, sobre todo en el extranjero, que en Chiapas no había ningún problema. (De hecho, en las semanas recientes se vio en Los Pinos con buenos ojos, por no decir que se promovió, la inquietud por saber qué hacía Marcos, llegando al extremo de mencionarse la suposición de que había viajado al extranjero e incluso que había estado en tratamiento médico en una clínica de Monterrey en la que los órganos federales de inteligencia lo habrían detectado, sin que hubiera orden superior de actuar contra él.)
LA REAPARICION DEL ZAPATISMO chiapaneco en las cabalgatas foxistas habrá de reactivar la movilización de los segmentos sociales que ven con preocupación el entreguismo del gobierno federal y que no tienen confianza en los cauces de protesta que ofrecen tanto el perredismo como los nuevos héroes del nacionalismo, los priístas al estilo Bartlett o Manlio Fabio. Ese desempolvamiento de la izquierda social no tendrá contrapartes institucionales, pues la Cocopa es una entidad desgastada y sin credibilidad, y el comisionado para ese asunto, Luis H. Alvarez, tampoco ha hecho otra cosa en largos meses que cobrar su sueldo y hacer una que otra declaración desperdigada e inútil.
NO DEBERIA PARECER poca cosa esa reinstalación beligerante del zapatismo, sobre todo si se pasa revista a los múltiples flancos abiertos que tiene el gobierno foxista. Sin embargo, como se ve, las penas son menos cuando se apuran cabalgando con los amigos guanajuatenses y dando luego con toda alegría, en Chilangolandia, un Grito escamoteado por rencores y entreguismos disfrazados de economías presupuestarias a los mexicanos que viven en el extranjero.
ASTILLAS: TODO SEA POR el pragmatismo político: el gobierno de Cuba decidió poner a una escuela de La Habana el nombre de José Angel Conchello, en el marco de la próxima reunión interparlamentaria a la que los panistas tantos obstáculos han puesto... Hoy, el Presidente de la República dará a conocer en Los Pinos el "Proyecto Nacional de Seguridad Pública: Hechos y Realizaciones", en el que, šsorpresa!, habrá maravillosos datos que confirmarán lo muchísimo que se ha logrado en la lucha contra los delincuentes sin placa... Luis Espinosa Organista envía un correo desde la University of Colorado at Denver: "Ahí nomás para que no digan que son despilfarradores, el consulado mexicano en esta ciudad celebrará con modesta pachanga, la noche del 15 de septiembre, en el elegantísimo salón principal del Centro de las Artes de Denver, con capacidad para mil personas. Eso sí, las invitaciones enviadas especifican que uno debe asistir de business attire (de riguroso tacuche, pues)".
Fax: 55 45 04 73 [email protected]
