Avala la actuación de la Sedena en juicio a Quirós Hermosillo y Acosta Chaparro

PRI: debe revisarse la figura de testigos protegidos en el Ejército

El presidente del consejo técnico de Asuntos de Seguridad Nacional priísta, Javier Oliva Posadas, dijo que la figura de testigo protegido en las fuerzas armadas tiene que ser revisada. Expuso que el consejo tricolor avaló los procedimientos seguidos por la Secretaría de la Defensa Nacional para la "preservación de su disciplina y lealtad".

En una declaración en la sede nacional priísta, sostuvo que por uno o dos individuos no se puede catalogar a todas las fuerzas armadas. Es como calificar de defraudadores a los propietarios de bancospor los delitos de El Divino. No caben las generalizaciones, abundó.

Rechazó que los procesos a los generales Francisco Quirós Hermosillo y Arturo Acosta Chaparro se inscriban en una cuestión sexenal. Es un asunto que tiene que ver más bien con los tiempos que vive el país, pues hay una nueva forma de quehacer político.

Recordó que en el sexenio zedillista se produjeron seis tesis jurisprudenciales en la Corte relativas a las fuerzas armadas. Una facultó al jefe del Poder Ejecutivo, en su calidad de comandante supremo de las fuerzas armadas, a utilizar éstas cuando haya alguna circunstancia o desafío que ponga en riesgo la seguridad interior del país.

A los priístas, apuntó, nos preocupa que se den ataques cíclicos sobre las fuerzas armadas. A veces sí se sabe de dónde vienen y en otras no se pueden detectar, pero debe tenerse muy presente que las fuerzas armadas cumplen un papel trascendente en el quehacer político del país, en especial por el apoyo que ofrecen a la población.

Explicó que la figura de testigo protegido tiene que ser muy bien definida y reglamentada. Su actual definición está tomada del derecho estadunidense, pero sin la figura del gran jurado, compuesto por ciudadanos que consideran o se desechan las revelaciones de esos testimonios.

En México es una figura que no está bien reglamentada y valdría la pena examinarla para darle contenido y peso específico a lo que diga cada testigo, precisó.

Los priístas, resumió, reconocen las aportaciones de las fuerzas armadas en la historia del país, su compromiso con las tareas de apoyo a la población civil en situaciones de desastre, en la preservación de la seguridad y defensa nacionales y por su actividad contra el narcotráfico. Pero el PRI no reconoce más que los ámbitos jurídicos y se hace eco de que el combate al narco no sólo compete a las fuerzas armadas y de seguridad pública, sino también a la sociedad en su conjunto.