Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Viernes 22 de noviembre de 2002
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Cultura
Concierto-homenaje en el CNA por su labor docente de tres décadas

La cultura musical de México ''es de drenaje'': María Antonieta Lozano

Quizá se deba a la mentalidad tecnócrata que antepone las cifras a las cuestiones del alma, deplora la intérprete Formó a algunos de los compositores nacionales más relevantes

ANGEL VARGAS

La cultura musical de México ''es de drenaje", en términos de oferta, consumo y enseñanza, sostiene la intérprete y docente María Antonieta Lozano, para quien no resulta extraordinaria tal situación, asume, si se considera el gran desdén que la clase gobernante ha mostrado hacia la cultura en general, a pesar de que es uno de los grandes patrimonios y pilares para la integración del país.

''No hay mucho interés por parte de las autoridades en resolver esta problemática -considera-. Quizá eso se deba a la mentalidad tecnócrata que antepone las cifras a las cuestiones del alma. La cultura es una de las grandes infraestructuras del país y está totalmente descuidada.''

Reivindicar al músico

También maestra normalista, María Antonieta Lozano se ha caracterizado por su tenacidad para reivindicar la figura social del músico y del maestro de la especialidad, así como para que se replanteen los modelos de enseñanza tradicionales de la disciplina para evitar el alto grado de deserción y estimular la profesionalización del alumnado.

Como fundadora y directora del Centro de Investigación y Estudios de la Música, AC (CIEM), se ha distinguido por formar a algunos de los más importantes compositores nacionales de lustros recientes, entre ellos Gabriela Ortiz, Víctor Rasgado, Marcela Rodríguez y Gerardo Tamez, y muchos de sus ex alumnos más jóvenes destacan ya en Europa, Estados Unidos y Asia.

Esa labor, los 30 años de ejercer la docencia, le será reconocida hoy con un concierto-homenaje en el auditorio Blas Galindo del Centro Nacional de las Artes (CNA) a las 20:30 horas.

-¿Qué representa para usted este homenaje?

-Es un reconocimiento al mundo olvidado de la docencia. Cuando comencé este trabajo tan gratificante pensé en la necesidad de hacer una campaña por la reivindicación del músico, porque en México tadavía es una profesión bastante despreciada y combatida por los padres de familia, que la consideran una pérdida de tiempo. Y después, cuando comenzaron a brillar algunos de mis ex alumnos, reparé en la imperiosa necesidad de hacer una reivindicación del maestro de música. Su situación es peor que la del músico, porque se considera que quien ejerce la docencia lo hace porque no pudo hacer trayectoria importante, sea como compositor o intérprete, y sólo le quedó dedicarse a dar clases. Eso es algo terrible porque, en parte, es cierto.

''La docencia musical en México ha tenido deficiencias enormes desde siempre. Lázaro Cárdenas trató de resolverlas al final de su gestión en la Presidencia con un decreto en el que se establece que nadie puede ejercer como maestro de música sin antes haber terminado su formación profesional y si carece de carrera pedagógica. Fue algo infructuoso. La falta de regulación en la enseñanza de la música es un problema muy grave, cualquier persona que ha estudiado un año o dos de conservatorio pone un letrero en la puerta de su casa y comienza dizque a dar clases.''

Condominios de academias

-¿Cuáles son los problemas más frecuentes con los que se encuentra un profesor de música a nivel profesional?

-La mayor parte de los muchachos que llegan al CIEM son rechazados de las escuelas tradicionales por cuestiones sobre todo de edad. A los 16, 17 o 19 años ya no los reciben en ningún lado. Normalmente han tomado clases particulares y entonces llegan con problemas técnicos e incluso diversas lesiones físicas: en la tercera cervical si son pianistas, de codo calcificado si son guitarristas, con nódulos en la garganta en caso de los cantantes. Su formación teórica, cuando la tienen, es de mala calidad; arrastran consigo un montón de ideas aberrantes respecto del medio musical y tienen el oído echado a perder, porque nunca han recibido algún tipo de educación. Un símil sería el de un muchacho que entrara a estudiar pintura en La Esmeralda sin saber los colores.

-¿Cómo percibe la enseñanza musical en México?

-Algunas escuelas, como el Conservatorio Nacional y la Escuela Superior, tienen grandes maestros, pero son una especie de condominios de academias. Cada maestro tiene su método, idea y objetivo. La escuela no es el edificio; es un concepto. Además, no hay compromiso de los maestros con la vida profesional de sus alumnos. Afortunadamente existen excepciones.

''Los modelos de enseñanza que tenemos, al centrar sus ojos en Europa y Estados Unidos, no son del todo adecuados para nuestra idiosincrasia. Gran parte de la deserción de estudiantes se debe a la larga duración de las carreras en las escuelas de corte tradicional, cuyos programas alcanzan hasta nueve años.''

-¿Cuáles son sus pendientes?

-Mi gran pendiente es ayudar a formar una conciencia sobre la importancia de la enseñanza musical para el desarrollo integral de la persona. También que se aproveche el vasto acervo musical del país, que se deje de escuchar el drenaje de la música y se comience a valorar la buena música que existe dentro del folclor, lo comercial y lo académico. Es necesario que esa buena música salga de donde está guardada. Se le trata como si fuera un virus que puede contaminar a la gente de identidad nacional; sin duda ése es un factor de preocupación para quienes nos gobiernan.

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