Una mala planeación ocasionaría un "enorme agujero" en el presupuesto

Alertan sobre inversiones de riesgo que realizará el gobierno en materia de ciencia

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

El director de Innovación Tecnológica del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Guillermo Aguirre, reconoció que el nuevo programa mediante el cual el gobierno invertirá en la creación de empresas de alto desarrollo científico y tecnológico puede provocar un "agujero enorme" al presupuesto en caso de que estos negocios no funcionen.

La semana pasada el director del Conacyt, Jaime Parada, anunció que en 2003 este organismo, en coordinación con la Secretaría de Economía y Nacional Financiera, prestarán recursos por un monto de 100 millones de pesos para la creación de 50 negocios de alto capital tecnológico en los próximos cuatro años.

Aguirre dijo, en entrevista, que el nuevo programa del Conacyt tendrá éxito si se hacen reglas claras y los préstamos se otorgan a proyectos que tengan viabilidad financiera y tecnológica, porque si no ocurre así "le podríamos abrir un agujero enorme al presupuesto".

Según el anuncio de Parada, a partir del próximo año el gobierno federal, junto con inversionistas privados, destinará capital de riesgo para la creación de negocios de alto nivel tecnológico con base en conocimientos que se generan en universidades y centros de investigación, tal como ocurre desde hace varias décadas en países como Estados Unidos, Canadá y Japón.

El Conacyt busca que al final del sexenio se inviertan 500 millones de pesos en 50 empresas de este tipo. El plan consiste en que el gobierno aporte no más de 15 o 30 por ciento del capital inicial, por lo que una empresa mediana recibiría en promedio entre 5 y 10 millones de pesos. Para asegurar su viabilidad se buscaría convertir a estas industrias en provedoras de grandes empresas.

Aguirre señaló que es necesario fundar este tipo de empresas, porque en México hay 2.8 millones de negocios y de ellos apenas 300 invierten de manera regular en desarrollo científico y tecnológico, y la mayoría son compañías grandes o multinacionales.

El propósito, explicó, es transformar a las empresas mexicanas y conseguir que dejen de producir mercancías baratas, y en vez de ello se dediquen a la generación de productos de alto valor agregado que permitan mejorar los salarios de los trabajadores e incorporar en estos establecimiento a mexicanos con talento.

Señaló que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público ya aprobó la creación de una empresa con estas características, la cual recibirá apoyo de inversionistas privados y del gobierno federal.

La meta es que antes de finalizar el año haya en total cinco negocios en ramas como la biotecnología, materiales e informática que hagan "detonar" la industria mexicana.

Al preguntarle la forma en que los participantes se repartirán las pérdidas y las ganancias, dijo que el programa todavía no está concluido, pero dijo que se buscará proteger a toda costa el presupuesto gubernamental.

Refirió que el gobierno federal evaluará cada empresa para verificar que aplique correctamente los recursos y medirá el avance de los proyectos de innovación tecnológica, para que al finalizar el sexenio haya 50 empresas funcionando y otras 50 iniciándose.