El país no se arrodilla, mira a los ojos a todas las naciones del mundo, subraya

Inadmisible, la intromisión de Garza en la política interna de México: Carlos Fuentes

El escritor califica de "casi criminal" la intención de Washington de arrastrarnos a apoyar su guerra

ARTURO JIMENEZ Y VICTOR RUIZ ARRAZOLA ENVIADO Y CORRESPONSAL

Oaxaca, Oax., 22 de febrero. Las advertencias del embajador de Estados Unidos en México, Tony Garza, acerca de que nuestro país podría pagar un alto costo político en las relaciones bilaterales por no apoyar la guerra contra Irak en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) es "un acto de intromisión" en los asuntos internos mexicanos que debe ser rechazada, aseveró aquí el escritor Carlos Fuentes.

Luego de casi dos horas de firmar ejemplares de su reciente novela La silla del Aguila (Alfaguara) en la librería del Centro Cultural Santo Domingo de esta ciudad, Fuentes accedió a comentar las declaraciones hechas por Garza ayer en la ciudad de Puebla. "Espero que México, el presidente Vicente Fox, la cancillería y la ciudadanía mexicana mantengamos todos una actitud de gran dignidad frente a las provocaciones del gobierno de George W. Bush", precisó.

El embajador Garza, continuó, debe entender que está tratando con una nación soberana. "México no se arrodilla, México mira a los ojos a todas las naciones del mundo, incluyendo a Estados Unidos. La relación bilateral es tan importante para ellos como para nosotros.

"La independencia de la política exterior de México es equiparable a la independencia de la política exterior de Estados Unidos. No se trata de que uno le mande a otro. Cada uno toma las decisiones que toma de acuerdo con sus intereses nacionales, como ellos lo hacen."

Estados Unidos, consideró, está empeñado en una aventura de consecuencias catastróficas. "Aunque derroten y derroquen a Saddam Hussein, lo que viene después es lo peor de todo. Y querernos embarcar a todos en esta especie de preapocalipsis que están organizando es un acto poco menos que criminal".

México debe mantener su posición de no intervención, dijo, y agregó que siempre se ha salido adelante gracias a mantener los principios. "Los principios importan, la dignidad importa. Y estamos en una situación en que se nos está provocando para renunciar a los principios y perder la dignidad, y eso no lo podemos admitir".

-Pareciera que las marchas masivas por la paz en el mundo no hacen mella en la decisión del presidente de EU de atacar Irak -le preguntó La Jornada.

-No, de ningún modo. El está decidido a la guerra y al desastre para tener el petróleo de Irak. Desgraciadamente para él, esas masas que marchan en todo el mundo votan. Y van a votar en España, en Francia, en Inglaterra, en Italia y, finalmente, en Estados Unidos.

"Que se vea el presidente Bush en el espejo de Vietnam, en lo que le pasó al presidente Johnson, porque en el momento en que empiecen a llegar los cadáveres de soldados estadunidenses ante lo que seguramente será una larga y cruenta guerra, en la que se pondrá en llamas todo el Medio Oriente, en ese momento la opinión pública estadunidense se le volverá en contra y no votará por él."

-ƑCuál es la disyuntiva para el mundo?

-Hacer una política de paz, es decir, hacer una política de negociación con Saddam Hussein, a quien ellos crearon y armaron. Deben sentarse a negociar como ha dicho Colin Powell que lo harán con los norcoreanos.

"Ellos sí han dicho: nosotros tenemos armas de destrucción masiva, armas nucleares y las vamos a emplear contra ustedes. ƑPor qué ahí no hay una actitud comparable a la que se está aplicando contra Hussein? Por el simple hecho de que Norcorea no tiene petróleo, eso es todo."

Fuentes recordó que existen las instituciones internacionales y la diplomacia para optar por la negociación. Pero esa insistencia en la guerra, agregó, es "un acto de prepotencia por parte de Estados Unidos. No es otra cosa, y no se puede admitir". Hay que crear un "contrapoder", dijo, que se le oponga a EU.

La ONU, precisó, no es un contrapoder suficiente. "En cierto modo es una institución que no está a la altura de los tiempos. Es una institución muy respetable, pero tiene que ser renovada para arreglar los nuevos problemas del mundo, que no son ya los de 1945, cuando fue creada".