Es momento de defender la educación con valores: Rivera

Elogia la Iglesia a Pro Vida por evitar 34 mil 500 abortos

El cardenal participó en acto por el 25 aniversario del grupo

ALMA E. MUÑOZ

La Iglesia católica elogió ayer el trabajo de Pro Vida, en la ceremonia por el 25 aniversario de esta organización. El cardenal Norberto Rivera consideró que llegó el momento de defender los derechos por una educación con valores humanos y espirituales, además de "propiciar una nueva cultura de la vida, que se plasme en leyes justas que la protejan, custodien y promuevan en cualquier situación".

Al igual que diversos jerarcas católicos hicieron por medio de cartas -incluido el nuncio apostólico en México, Giussepe Bertello-, enalteció el trabajo que ha hecho la fundación para evitar la muerte de 34 mil 549 no nacidos. Por eso, consideró que es tiempo de "animar el trabajo de las instituciones que atienden al niño no nacido" y no claudicar frente a "contrariedades y persecuciones".

En la ceremonia por el 25 aniversario de Pro Vida, el arzobispo primado de México deslindó de "ideologías o consensos en nombre de la democracia", la defensa que sobre esta garantía hace la Iglesia. Precisó que a inicios del tercer milenio necesitamos "lograr el establecimiento pleno de los derechos del niño en el seno materno, a pesar de que vengan a este mundo marcados ya por limitaciones o enfermedades congénitas; aunque inicie como consecuencia de actos sumamente reprobables que nunca debieron quedar impunes".

Criticó a los gobernantes que intentan "implantar la peor de las dictaduras" al someter al escrutinio público los derechos inalienables de toda persona. "La verdad del valor sagrado de la vida no está en los datos fríos de una estadística ni en el resultado de un referéndum, que bien sabemos pueden ser manipulados por intereses ocultos", refrendó en su mensaje.

Manifestó que es tiempo de "propiciar una nueva cultura de la vida, que se plasme en leyes justas que la protejan, custodien y promuevan en cualquier circunstancia; animar el trabajo de tantas instituciones que atienden al niño no nacido, a menores y jóvenes en situación de riesgo; a madres solteras, ancianos y desprotegidos; a enfermos y personas especiales o con limitaciones, además de fortalecer la familia y defender el derecho de los padres a una educación con valores humanos y espirituales, donde la estima por la vida se arraigue en el corazón".

Como hicieron otros religiosos en las cartas que enviaron a los directivos de Pro Vida, pidió a la Virgen de Guadalupe "haga propicios todos los trabajos que el organismo llevará a cabo con renovado entusiasmo por una nueva y vigorosa cultura de la vida y nos dé fortaleza para nunca claudicar".

Más aun cuando "en nuestros días se respira una cultura de muerte, donde bajo criterios oscuros y faltos de toda verdad se intenta condicionar el valor de este derecho". Pidió que pese a contrariedades y persecuciones predominen el "gozo y la alegría por haber colaborado en favor de la vida misma, tan amenazada sobre todo en los más débiles, en aquellos inocentes que no pueden defenderse y cuyos gritos silenciosos muchos no quieren escuchar".

En consonancia con ese discurso, tanto el dirigente de Pro Vida, Jorge Serrano Limón, como José Barroso Chávez se comprometieron a continuar su lucha, pese a las críticas recibidas por su labor. Sentimos orgullo, coincidieron, por asumir posturas contrarias a la promoción incluso de anticonceptivos.

Los religiosos que enviaron misivas al comité nacional del organismo fueron el cardenal Ernesto Corripio Ahumada, arzobispo emérito de de México; el nuncio apostólico, Giussepe Bertello; los obispos de Matehuala, Rodrigo Aguilar Martínez; de Aguascalientes, Ramón Godínez Flores; de León, José G. Martín Rábago; de Cuautitlán, Manuel Samaniego; de Nuevo Laredo, Ricardo Watty; de Campeche, José Luis Amezcua Melgoza, y de Tlapa, Guerrero, Alejo Zavala.

Por otra parte, en entrevista, el cardenal Rivera Carrera instó al gobierno mexicano a mantener su postura de rechazo a la guerra contra Irak. La mayoría de la población, recordó, se opone totalmente al conflicto bélico y al terrorismo. Y esa es la actitud oficial que tanto se respeta "porque defiende ante todo la vida humana".