Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Miércoles 12 de marzo de 2003
  Primera y Contraportada
  Editorial
  Opinión
  Correo Ilustrado
  Política
  Economía
  Cultura
  Espectáculos
  CineGuía
  Estados
  Capital
  Mundo
  Sociedad y Justicia
  Deportes
  Lunes en la Ciencia
  Suplementos
  Perfiles
  Fotografía
  Cartones
  Librería   
  La Jornada de Oriente
  La Jornada Morelos
  Correo Electrónico
  Búsquedas 
  >

Sociedad y Justicia

Congénitas, golpes durante el embarazo o uso inadecuado de fármacos, entre las causas

En espera de implante coclear, 20 mil personas sordas

ANGELES CRUZ

Al menos 20 mil personas sordas requieren un implante coclear, con el cual recuperarían el sentido del oído en su totalidad. Cada año se suman 200 nuevos enfermos, pero sólo unos cuantos tienen acceso a la cirugía que se practica en tres hospitales públicos del país, uno de ellos el Infantil de México Federico Gómez.

El director de este nosocomio, Romeo Rodríguez Suárez, admitió que el principal obstáculo es el costo del aparato, aproximadamente 25 mil dólares, porque el gobierno no puede financiarlo. Comentó que al inicio del programa de implante, hace seis años, el patronato del hospital aportó los recursos para adquirir cinco de estos artículos, y desde entonces se han realizado 30 cirugías más, pero las familias de los afectados han tenido que conseguir el dinero por medio de asociaciones y donativos.

Martha Rosete, jefa del Departamento de Audiología y Foniatría, explicó que cada mes reciben atención médica entre 150 y 160 pacientes con sordera total por afectación del oído interior (neurosensorial). A la fecha, los médicos han evaluado a 180 personas, de las cuales seleccionaron 80 para la colocación del implante coclear, y ya se realizaron 35. Hay 45 pacientes en busca de los recursos económicos necesarios para adquirir el aditamento.

La especialista detalló que del total de niños enfermos que acuden al Hospital Infantil de México con alguna alteración auditiva, 43 por ciento es del tipo neurosensorial, es decir, carecen por completo del sentido del oído y su única posibilidad de recuperación es el implante. Las cirugías y auxiliares auditivos convencionales no reportan ningún beneficio para los afectados, abundó.

Carlos de la Torre, jefe del servicio de Otorrinolaringología, mencionó que la sordera del oído interior puede ser de origen congénito o consecuencia de alguna agresión sufrida por la madre en el embarazo. En ocasiones, el mal también es secundario a padecimientos graves ocurridos en los primeros años de la vida, como la meningitis bacteriana o afecciones del riñón.

Resaltó que el uso inadecuado de algunos antibióticos es una causal más de la sordera profunda, principalmente aquellos medicamentos que comúnmente se administran para combatir cuadros de gastroenteritis o infecciones de las vías respiratorias. Rodríguez Suárez precisó que son fármacos "de consumo popular", muy buenos y efectivos, pero en ocasiones su prescripción no es la adecuada.

La especialista resaltó la importancia de que se incluya la vacuna contra hemophilus influenza tipo B en el esquema universal de inmunizaciones del país, porque en poco tiempo sería evidente la reducción de enfermos de meningitis y sus efectos secundarios.

El Hospital Infantil de México, que el próximo mes celebrará su 60 aniversario, dispone de la infraestructura física y humana para practicar la cirugía de implante. El director del nosocomio mencionó que los médicos han recibido entrenamiento en el extranjero, y buena parte de la tecnología ha sido adquirida gracias a los donativos de fundaciones como la Gonzalo Río Arronte, que el año pasado entregó 60 millones de pesos para comprar equipo médico. Las aportaciones del patronato que encabeza Rómulo O'Farril también son de particular importancia, y parte de esos recursos se han empleado para la capacitación de los médicos en diversas especialidades, comentó Rodríguez Suárez.

En relación con la sordera profunda, De la Torre señaló que cualquier persona, en algún momento de su vida, puede resultar afectada; respecto a los candidatos a recibir el implante, mencionó que éstos deben cumplir con algunos requisitos de salud, entre otros, tener equilibrio sicoemocional, inteligencia normal y expectativas de motivación, así como haber participado en un programa auditivo-verbal el año previo a la operación.

La cirugía para colocar el implante coclear tiene una duración de dos a tres horas, durante las cuales los expertos hacen una incisión detrás del oído afectado y por un orificio introducen el aparato que sustituirá las funciones del órgano conocido como caracol. De manera externa, el pacientes contará con un auxiliar para recibir las señales sonoras, que al llegar al implante se convierten en eléctricas, para luego trasladarlas al cerebro.

Luego de la operación quirúrgica, los enfermos son integrados a programas de rehabilitación auditiva y/o educación especial, además de que son sometidos a evaluaciones periódicas integrales.

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año