Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Viernes 11 de abril de 2003
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Política

Luis Javier Garrido

El genocidio

el dilema al que el mundo se enfrenta tras la invasión a Irak es decidir si se va a someter a Estados Unidos, como está haciendo la mayoría de los gobiernos occidentales en contra de la voluntad de sus pueblos, México entre ellos, o si se va respetar el orden jurídico internacional.

1. La invasión de Estados Unidos a Irak está cambiando el curso de la historia, pues ha sentado el precedente de que los gobernantes del país que aparece como la principal potencia mundial pueden invadir a un Estado independiente, sin causa justificada y sin esconder sus propósitos económicos y militares, en contra de la legislación internacional y de una decisión expresa del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, y cometer todo tipo de crímenes de lesa humanidad hasta perpetrar un verdadero genocidio, sin que exista una fuerza moral y política capaz de detenerlos: ni dentro ni fuera de Estados Unidos.

2. El mundo no tiene ahora más alternativa que la misma que en 1938 ante la Alemania nazi: aceptar que someterse a las decisiones ilegales y criminales del grupo que se ha apoderado del poder en Washington es claudicar de una vocación de libertad y de justicia y abrir la vía tácitamente para que el siglo xxi sea el de la cancelación de los derechos de los pueblos en nombre de las ambiciones de las trasnacionales. Y en ese sentido no puede sino obrar en consecuencia, exigiendo que se respete el orden jurídico internacional: que los invasores salgan inmediatamente de Irak, que George W. Bush y la mafia criminal, que ha tomado las decisiones con él, sean presentados ante la Corte Penal Internacional para ser juzgados como presuntos genocidas y criminales de guerra, y que Estados Unidos y sus cómplices paguen los daños que han hecho al pueblo iraquí, aunque suponga la quiebra de sus economías.

3. Las movilizaciones populares que todos los días se suceden en el mundo entero lo han entendido y lo exigen, pero los gobiernos de la mayor parte de los países, sometidos a la Casa Blanca, con la que comparten los mismos intereses económicos, siguen actuando como cómplices, y es el caso del gobierno de México.

4. Vicente Fox, quien cree que engañó al mundo sobre su supuesto decoro en materia internacional, sigue mostrando que es un individuo indigno de ocupar el cargo que ostenta, tanto como sus predecesores priístas, pues a) no nada más sigue escondido y callado sobre el genocidio, cuando es su obligación exigir el retiro de las tropas invasoras y respeto a la legalidad internacional, y b) maniobra en todos los foros para que no se vaya a condenar a Washington, y que llegó al extremo de c) mandar a su canciller Ernesto Derbez a decir en Madrid que el mundo ha sido injusto con Estados Unidos, que lo único que hace es defender la libertad, y d) ahora se pretende adornar como supuesto estadista proponiendo reformas al Consejo de Seguridad, que en su servilismo hacia Bush quiere que sólo sirva para "tareas humanitarias", repitiendo como lorito, en un programa especial de radio, las tonterías del ex canciller Castañeda, cuando lo que se requiere es detener el genocidio.

5. ƑNo entenderá Vicente Fox que su autoridad moral a nivel nacional e internacional es nula y que urge hacer valer el orden jurídico internacional para tratar de detener el genocidio del pueblo iraquí, y no tratar de inventar otro al agrado de la camarilla de Bush? ƑNo entenderán los miembros de "la clase política" mexicana que el momento no es para adornarse con un discurso sobre "la paz", vacío de contenido para tranquilizar sus conciencias, sino detener al agresor?

6. "El fin" del régimen iraquí, decretado por Washington luego de los últimos bombardeos brutales sobre Bagdad que obligaron al repliegue de las fuerzas oficiales y al silencio de los voceros del gobierno, no significa la terminación de la lucha armada en Irak contra los invasores porque, como la Casa Blanca bien lo sabe, no declaró la guerra a un régimen político ni a Saddam Hussein (por más que se esfuerce en repetirlo la propaganda de Washington), sino al pueblo de Irak, con claros propósitos económicos y geopolíticos, y en un sentido más amplio a todos los pueblos árabes, para subordinarlos a los intereses de la globalización neoliberal.

7. Las expresiones de alivio que manifestaron los intereses dominantes en el mundo entero por el supuesto fin de la guerra de invasión tras ver la destrucción que hizo el ejército estadunidense del monumento a Hussein en Bagdad, como aconteció con muchos empresarios mexicanos, se ha trocado en enorme preocupación porque en unas horas ha resultado claro que se está muy lejos de que termine el conflicto, que ha desnudado como pocos las políticas criminales de Washington, y que su saldo es aterrador: a) el control de Irak y de Asia central por empresas estadunidenses es aún una expectativa que a cada momento parece complicarse, como acontece con las reivindicaciones kurdas sobre el petróleo del norte iraquí; b) la invasión, contraria a la legalidad internacional, lejos de terminar con el peligro del "terrorismo", que no existía con el régimen de Irak, ha alentado las formas de lucha armada en el mundo al reconocer que Estados Unidos no respeta la legalidad internacional y que nadie lo detiene ni sanciona; y lo que aún falta: c) la verdad sobre el genocidio cometido por el gobierno de Bush, ocultada por los medios que cumplen el papel que les asignó el Pentágono, va a aflorar muy pronto y a llevar al mundo a una crisis de dimensiones impredecibles al conocerse la magnitud de los crímenes cometidos por las fuerzas invasoras, y ello d) con el orden internacional hecho pedazos.

8. El temor del gran capital es muy claro: la invasión a Irak, en nombre de sus intereses, pero mal encubierta por la propaganda de Washington sobre una supuesta lucha contra el terrorismo y por la libertad, logrará impulsar las luchas de resistencia mundial en contra del capitalismo globalizador y de Estados Unidos. De ahí que Washington impusiera mayor control sobre los medios a fin de acentuar la desinformación de la sociedad. ƑQuién sabe cuántos niños, mujeres y hombres ha asesinado Estados Unidos en Irak?

9. El mundo no ignora que los disparos contra periodistas en el hotel Palestina y el bombardeo de las oficinas de Al Jazzera el 8 de abril fueron una advertencia de Washington de que no desea testigos incómodos en lo que viene, y que la única verdad es la que dicta el Pentágono todos los días a los periodistas "encamados" o "empotrados" con las fuerzas armadas estadunidenses, y las emisiones del programa Hacia la libertad, mediante el que Bush pretende mostrar que lo que busca es la libertad de Irak.

10. El dilema es también para los pueblos: Ƒcómo obligar a sus gobiernos a respetar el orden legal internacional? ƑNo es acaso el momento para una mayor radicalización de la sociedad?

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