CIUDAD PERDIDA
Miguel Angel Velázquez
De franquicias y petróleo
HACE NO mucho tiempo, en el restaurante de un hotel de avenida Revolución, el maestro James Petras conducía una charla vespertina y ensombrecido por sus propios pensamientos dijo: "No se trata de simples especulaciones o teorías. En la década reciente la economía mexicana se ha visto casi completamente conquistada: desde los bancos hasta la comida rápida, las inmobiliarias, los centros comerciales y la televisión, y la invasión cultural se manifiesta en lugares donde el español es el segundo idioma".
ASI MIRO PETRAS a México en aquella visita y de esto creo que muchas personas ya se han dado cuenta, pero el camino no parece ser lanzar piedras contra las empresas que ostentan marcas estadunidenses, si a los 15 minutos se pretende apagar la sed que produce el esfuerzo, con una coca bien fría.
TAMPOCO SE TRATA de calmar el hambre que producen las caminatas y las pintas sobre la fachada de los negocios, que son o parecen gringos, con tremendas bolsas de papas fritas. La cosa es más simple: con el no a la guerra y el no al neoliberalismo se tendría que decir no al consumo de productos de procedencia inglesa, estaduunidense o española. Eso sí les dolería.
MAÑANA HABRA MARCHA o marchas y los mexicanos habitantes de la ciudad, la más agraviada por la invasión económica y cultural, deberán multiplicar sus razones para salir a las calles, porque la sociedad parece indefensa ante la voracidad de las empresas de la "coalición" y el entreguismo como política del Estado mexicano.
LA INVASION ES seria. Aunque no existen -por razones de algún tipo de estrategia, tal vez para evitar impuestos-, por ejemplo, números confiables de las franquicias españolas, estadunidenses e inglesas, la Asociación Mexicana de Franquicias dice que de los 20 mil puntos de venta de esos negocios en el país, en la ciudad de México se concentra 65 por ciento.
PARA ALGUNAS EMPRESAS dedicadas a la medición de los negocios, las franquicias estadunidenses en la ciudad llegan a 46 y van desde las minidonas hasta escuelas de muy costosas colegiaturas.
NO CABE DUDA que hay grupos minoritarios de mexicanos que se han visto favorecidos por el mercado común impuesto al mundo desde el consenso de Washington. Son los menos y seguramente no irán a las calles, pero facturan, según algunas empresas de consultoría, hasta 7 mil millones de dólares anuales.
PERO SI LO que necesita son algunos datos más para alimentar sus razones y salir a la calle, déjeme platicarle la teoría del por qué de la invasión: sí, es el petróleo, sólo que hay que ponerlo en cifras.
HOY ESTADOS UNIDOS controla el petróleo de Kuwait, que en la lista de reservas probadas de crudo tiene el cuarto lugar en el mundo, con 94 mil millones de barriles; ahora parece haber logrado ya el sometimiento de Irak, que, como se sabe, es el segundo país con mayor número de reservas probadas: 112 mil 500 millones de barriles.
AL RITMO DE producción actual, Estados Unidos tiene reservas para 10 años, pero Irak cuenta con petróleo para 131. Si se juntan las reservas de Kuwait e Irak, que bien podríamos decir que ya están en manos de los estadunidenses, las reservas subirán a más de 200 mil millones de barriles y sería tan poderoso como Arabia Saudita, pero además podría controlar o destruir a la OPEP y bajar los precios del crudo hasta hacer tronar a algunas economías dependientes, como la de México.
ƑTODAVIA HAY QUIEN quiera venderles Pemex?
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