"Reasignación" de $57 mil millones, prioridad para las organizaciones firmantes

Dejó insatisfacciones el acuerdo para el campo, reconoce Fox

Anuncia Canales que se negociarán pactos complementarios con Estados Unidos y Canadá

En su programa radiofónico semanal, el presidente Vicente Fox admitió que el Acuerdo Nacional para el Campo, firmado la semana que concluye, dejó insatisfacciones "sobre las que tendrá que trabajarse". Tuvimos que reconocer, apuntó, que las partes teníamos que ceder o sacrificar algo en aras de encontrar la coincidencia.

En tanto, el coordinador del Congreso Agrario Permanente, Rafael Galindo, señaló que la comisión de seguimiento del acuerdo que se instalará este martes será la responsable de que los compromisos se traduzcan en hechos.

Participaron en el programa los secretarios de Agricultura, Javier Usabiaga; de Economía, Fernando Canales, y de la Reforma Agraria, Florencio Salazar, además del rector de la Universidad Autónoma de Chapingo, Gerardo Gómez González, y el dirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Heladio Ramírez López.

Pese al esfuerzo, apenas dimos el "primer pasito", comentó Fox. "Creo que quienes nos escuchan y quienes están en el campo dirán, 'otra vez con la misma'. Para el gobierno y las organizaciones, esto representa un fuerte compromiso y no dejar que se escape la oportunidad, sino que todos los puntos acordados se concreten. Estamos conscientes de que las demandas de cada uno de los sectores que componen México requieren de respuestas efectivas, rápidas, de manera inmediata."

Dijo que el Banco Nacional de Crédito Rural ya está en proceso de liquidación para abrir paso a un nuevo sistema financiero que reducirá el personal y se "convertirá en el banco de los productores".

Usabiaga habló del "seguro popular" dedicado especialmente para las personas del agro, donde viven 25 millones de mexicanos. No seguiremos administrando el problema del campo como en el pasado; enfrentaremos la problemática, aseguró.

Galindo planteó que el martes la comisión de seguimiento trabajará en la elaboración de un calendario de actividades para cumplir el pacto. El incremento del precio del petróleo, previó, beneficiará al acuerdo, que no es la panacea ni una solución automática o milagrosa, pero sí un punto de partida. Queremos que esta firma no sea para un "acta de divorcio", sino que se concrete.

Salazar sostuvo que el acuerdo "no es un catálogo de buenas intenciones". Tampoco debemos abandonar la ruta del diálogo, pues ha dado muestras de que podemos superar nuestras contradicciones.

Canales informó que se instalará una "oficina de inteligencia comercial" para analizar las importaciones y oportunidades de exportaciones y vigilará que los productores no sean víctimas de prácticas desleales.

Negociaremos con Estados Unidos y Canadá acuerdos complementarios para establecer las bases sobre las cuales algunos de nuestros más importantes productos de consumo, como el maíz blanco y el frijol, serán protegidos.

Ramírez, a su vez, afirmó que la CNC no pretendió protagonizar ni actuar como comparsa. Se buscó la unidad del movimiento campesino.

Es hora de hechos y confiamos en la buena fe del gobierno, concluyó.

Urge una nueva programación del gasto en proyectos productivos, dice el líder de la UNTA

FABIOLA MARTINEZ

La prioridad de las organizaciones campesinas que firmaron el Acuerdo Nacional para el Campo es la "reasignación" de los 57 mil millones de pesos destinados a este sector.

Alvaro López Ríos, dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), dijo que los enviados a la Comisión de Organización y Acuerdos, la cual sesionará por primera vez este martes, tienen como principal objetivo abordar el tema del financiamiento para el desarrollo rural y delinear, en coordinación con el gobierno, la manera en que se aplicarían los recursos provenientes de los excedentes petroleros, en particular en favor de las zonas marginadas.

Es muy importante una nueva programación del gasto en proyectos productivos y de inversión pública para los productores que más lo necesitan, es decir, promover nuevos esquemas de alto impacto social, dijo.

El líder de la UNTA, una de las organizaciones con mayor presencia en el Congreso Agrario Permanente (CAP), precisó que la representación campesina pugnará desde la primera sesión de trabajo por que se incremente el monto de los recursos de ayuda a los productores con más carencias.

Por ejemplo, comentó, una propuesta es que aumente la asignación de ayuda al Procampo, es decir, en lugar de que un campesino reciba mil 5 pesos hasta por cinco hectáreas, esta cifra deberá aumentar a mil 200 pesos para beneficiar a este sector, 65 por ciento de los productores inscritos en este programa.

De igual forma enfocar la mirada hacia los campesinos que no cuentan con este beneficio, unos 800 mil en todo el país, y que requieren de nuevos modelos de atención.

En seguida, dijo López Ríos, nos interesa que los gobernadores cumplan con la asignación de recursos al desarrollo agropecuario, resultado de los excedentes petroleros. A todo ello dará seguimiento la Comisión de Organización y Acuerdos, aunque habrán de cambiar algunos representantes a partir del 22 de mayo, día en que se entregará la coordinación del CAP a Max Correa, líder de la Confederación Campesina Cardenista.

El Acuerdo Nacional para el Campo tiene como objetivo impulsar una reforma estructural de la política de fomento productivo y desarrollo económico, así como una nueva política social para el desarrollo rural sustentable. Para ello, el compromiso es que los acuerdos sean delineados de manera bilateral por organizaciones campesinas y gobiernos de los tres niveles.

Entre los acuerdos básicos destaca la evaluación de los impactos del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y otros acuerdos comerciales internacionales y "la consulta oficial con Estados Unidos y Canadá para revisar lo establecido en el TLCAN para maíz blanco y frijol", entre otros propósitos centrales.

Unidad, "clave del éxito en este proceso"

A unas horas de iniciar formalmente la negociación, las organizaciones firmantes, adheridas al CAP, El Barzón y El campo no aguanta más, el dirigente aseguró que en este sector se mantiene la unidad, "clave del éxito en este proceso y en futuros resolutivos".

Por ello manifestó su confianza en el gobierno federal: "La diferencia es que ahora no dejamos el cumplimiento a la buena voluntad del gobierno y sus funcionarios, sino a nuestra capacidad de movilización; eso nos da seguridad".

En tanto, el líder de la priísta Confederación Nacional Campesina (CNC), Heladio Ramírez López, dijo que el Acuerdo Nacional para el Campo deberá atender de manera prioritaria los asuntos de los más pobres del país, como los más de 4 millones de jornaleros agrícolas que sobreviven "en condiciones verdaderamente humillantes".

Es necesario que este sector, conformado por mayoría indígena que labora sin los mínimos servicios de salud y seguridad en el trabajo, sea atendido de manera urgente, se canalicen recursos y se legisle en favor de millones que "viven sojuzgados y esclavizados en pleno siglo xxi".

Más allá de los acuerdos en materia de inversión productiva, agregó Ramírez López, el desafío de esa negociación es atacar la pobreza campesina desde su raíz y defender los intereses de los productores ante las asimetrías y prácticas desleales en el comercio internacional.