No se ha llevado a la práctica la "verdadera democracia"

Las Abejas expresan razones de su desconfianza hacia las elecciones

HERMANN BELLINGHAUSEN ENVIADO

Chenalho, Chis., 10 de julio. La organización de la sociedad civil Las Abejas hizo "evidente" hoy su postura ante las elecciones del pasado 6 de julio, mediante una declaración pública: "Días antes de los comicios acordamos que el voto es libre y democrático. Sin embargo, hubo consenso de no participar en la elección, por desacuerdo y desconfianza ante los poderes del gobierno de nuestra nación".

La organización indígena, que en otros momentos ha respaldado al PRD, indica que desde hace años participa en las elecciones federales y estatales "porque queremos que nuestra palabra sea tomada en cuenta (y exigimos), como toda la sociedad mexicana, que los presidentes, gobernadores, diputados federales y locales sean verdaderos representantes de los pueblos, que atiendan la necesidad de la sociedad, que pidan y respeten su voz".

Los indígenas, muchos de ellos aún desplazados y despojados por los paramilitares del PRI, se proclaman "parte de la sociedad mexicana". No obstante, lamentan que su participación sólo se tome en cuenta en tiempo de elecciones. "Los candidatos prometen realizar muchas cosas, pero después se olvidan del pueblo".

Ante el elevado abstencionismo registrado a nivel nacional, Las Abejas declaran: "Hemos visto que la democracia sólo se practica en tiempo de elecciones. Somos testigos de los trabajos que han hecho los tres poderes del gobierno de nuestro país. No han llevado a la práctica verdadera la democracia. Cuando aprobaron la 'ley indígena', en abril de 2001, los pueblos no fuimos consultados". Agregan que lo mismo ocurrió con "las modificaciones de leyes que han hecho".

Para la organización tzotzil, próxima a la diócesis católica de San Cristóbal, "el sistema de democracia en México está en crisis y no resulta favorable a la sociedad. Los legisladores no se preocupan de la necesidad del pueblo. Aprueban leyes a conveniencia de sus intereses partidarios".

Las Abejas de Chenalhó expresan juicios severos y no ocultan su desencanto: "Sabemos que los legisladores son representantes de los pueblos para que su voz y su palabra estén presentes en el Congreso, pero no lo han hecho así, sólo nos han traicionado. La democracia no avanza con los partidos políticos, que sólo dividen a la sociedad, a los pueblos y comunidades rurales y urbanas".

Y aventuran: "Debemos pensar en un nuevo sistema de gobierno del pueblo y para el pueblo, que atienda y se preocupe de las necesidades de la sociedad en general", de modo que sea efectiva "la práctica de la democracia participativa".

Las Abejas abrigan la idea de "un legislador elegido por el pueblo, independiente de los partidos, que trabaje por el desarrollo democrático, para la construcción de una sociedad en donde reinen las verdaderas paz, justicia, democracia y dignidad. Unamos nuestro pensamiento y nuestra voz para un futuro mejor y un México más humano y justo". concluye el comunicado que firman Lorenzo Pérez Arias, presidente de la organización, y Pedro Vázquez Ruiz, subsecretario.