Inconforma el relevo del titular de la reforma agraria

Aprueban diputados brasileños la reforma tributaria de Lula da Silva

AFP, REUTERS, DPA Y PL

Brasilia, 4 de septiembre. El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, logró por abrumadora mayoría la aprobación de la reforma tributaria en la Cámara de Diputados, que el mes pasado aprobó la enmienda al sistema de pensiones, pero el proyecto aún debe superar otros obstáculos.

En tanto, el tema de la reforma agraria sigue concentrando la atención, tras el relevo, la víspera, de Marcelo Resende, el funcionario encargado de aplicarla. Este día, 10 altos funcionarios del Instituto de Colonización y Reforma Agraria renunciaron en solidaridad con su ex jefe, quien tenía lazos con los trabajadores rurales del Movimiento de los Sin Tierras.

La salida de Resende provocó la reacción del presidente nacional de la Comisión Pastoral de la Tierra (de la Iglesia católica), el obispo en retiro Tomás Balduino, quien advirtió que este hecho puede aumentar más el clima de tensión en el campo, y además consideró que la política agraria del gobierno del izquierdista Lula ha sido peor que la aplicada por su antecesor, el socialdemócrata Fernando Henrique Cardoso.

Por su parte, la salida de Resende no satisfizo a la derecha. El diario conservador O Globo lamentó que no hayan dimitido, además de los 10 directivos, los superintendentes regionales del Instituto, mientras el Jornal do Brasil, defensor de los terratenientes, dijo que el nuevo titular, Rolff Hackbart, también es enemigo del latifundio.

A su vez, el nuevo funcionario anunció que el gobierno podría revisar la medida provisional que impide inspeccionar tierras invadidas para expropiarlas y distribuirlas. "Es una legislación que heredamos del gobierno anterior y que no contribuye en nada con la reforma agraria", señaló al tomar posesión de su cargo.

Mientras, Lula comentó estar "feliz, porque creo que el Congreso se portó con la grandeza que la sociedad brasileña esperaba", al aprobar la reforma tributaria durante la madrugada por 378 votos en favor y 53 en contra, al contar con la adhesión del centroderechista Partido del Movimiento Democrático Brasileño.

"Vamos a enseñar a este país a negociar, a alcanzar la madurez que necesita", subrayó. El gobierno enfrentó duras negociaciones con los gobernadores, muchos de los cuales temían verse perjudicados por la redistribución tributaria.

Tras muchas redacciones, en la versión de la reforma votada aparecieron partidas presupuestarias destinadas a los municipios.

Pero los diputados todavía deben discutir las enmiendas a la reforma tributaria, cuyo impuesto a las transacciones financieras es rechazado por la oposición derechista del Partido del Frente Liberal y los socialdemócratas, y luego volver a votar el texto, antes de pasarlo al Senado.

La reforma pretende simplificar un esquema que tiene gran cantidad de impuestos que se superponen, y busca reducir la carga fiscal para la industria y los exportadores, además de luchar contra la evasión.

Por otro lado, Lula se declaró convencido de que el Mercado Común del Sur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, con Chile, Bolivia y Perú como asociados externos), acogerá en breve a la mayoría de los países de Sudamérica. En ese sentido, en vísperas de su viaje a Colombia, dijo que la posibilidad de crecimiento de ese país "es aproximarse a Brasil y no quedarse pensando que es Estados Unidos el que va a ayudar".

Además, Lula dijo que aspira a alinear a Brasil con India, Sudáfrica, China y Rusia en un solo bloque para negociar ante la Organización Mundial de Comercio.