.
Primera y Contraportada
Editorial
Opinión
El Correo Ilustrado
Política
Economía
Mundo
Estados
Capital
Sociedad y Justicia
Cultura
Espectáculos
Deportes
CineGuía
Lunes en la Ciencia
Suplementos
Perfiles
Fotografía
Cartones
La Jornada en tu PALM
La Jornada sin Fronteras
La Jornada de Oriente
La Jornada Morelos
Librería
Correo electrónico
Búsquedas
C A P I T A L
..

México D.F. Domingo 4 de enero de 2004

Angeles González Gamio

De la Acordada al puesto de mando

Como respuesta a la violencia que padecían la ciudad de México y sus alrededores, fue fundado en 1715 el Tribunal de la Acordada, mediante una cédula real. Ambulante en sus inicios, se le construyó al poco tiempo un lúgubre establecimiento en la más tarde llamada avenida Juárez, mismo que se rehizo a finales del siglo en un estilo barroco muy sobrio, pero de gran elegancia; las litografías del siglo XIX lo muestran con altos muros recubiertos de tezontle rojizo, balcones de hierro forjado, enmarcados de cantera y nobles portones de madera claveteada.

Fueron innumerables los abusos que cometieron los jueces del infausto tribunal, ya que aprehendían a los delincuentes, les hacían un juicio sumario y de inmediato los ejecutaban, colgando sus cabezas en el lugar del crimen, aunque fuese un robo simple. Para controlarlo se estableció una junta revisora que ayudó a que no se cometieran tantas injusticias.

Los hampones más severamente castigados eran los ladrones sacrílegos, los salteadores de caminos, los incendiarios y los "forzadores de mujeres". La pena mayor era la muerte, que podía ser mediante la horca, la "mascada" de hierro o la hoguera. Los que cometían delitos menores eran enviados a servir a los presidios de La Habana, Veracruz y Puerto Rico; si el crimen consistía en portar armas prohibidas, antes se les daba azotes por las calles; si eran mujeres, se les exponía a la "vergüenza pública", y muchos eran enviados a los obrajes. En este tribunal se usaban cadenas, grillos, esposas, azotes y algunas veces el tormento; los alimentos apenas permitían la subsistencia: en la mañana un poco de atole con pan bazo, al mediodía frijoles mal sazonados y en la tarde lo mismo con otro pan bazo.

Aquí se dio la famosa revolución de la Acordada, la noche del 30 de noviembre de 1828, que llevó al poder al general Guerrero tras el saqueo del mercado del Parián, que causó escándalo mundial, pues allí se encontraban los comerciantes más importantes de América, y tuvo entre sus efectos la expulsión de los españoles, que se llevaron consigo sus capitales, dejando al país sumido en una crisis económica, política y social. Actualmente vivimos una época igualmente violenta, pero afortunadamente los métodos para combatirla han cambiado.

En mayo del año que acaba de concluir se inauguró el puesto de mando del Centro Histórico, en la calle Del 57 esquina con República de Cuba, en el primer piso de un edificio que dio en comodato la Fundación del Centro Histórico, que creó Carlos Slim. Al frente quedó un experimentado militar, el coronel y licenciado Humberto Camacho, quien ha tomado su encomienda con gran entrega y pasión, lo que da esperanzas de que realmente se abata la violencia que azola el rumbo.

Con su jefe, Marcelo Ebrard, diseñaron un ambicioso proyecto, que comenzó por formar policías con otra mentalidad. Hasta la fecha han salido cinco unidades del Instituto Técnico de Formación Policial. La labor de estos mil 600 jóvenes, pulcros en sus uniformes grises, que cubren tres turnos, está apoyada por un impresionante equipo con tecnología de punta: 100 cámaras para monitorear la seguridad se encuentran colocadas estratégicamente en las zonas más conflictivas. Es impresionante verlas funcionar; son capaces de rotar 360 grados, tienen un alcance de 200 metros y un acercamiento de medio metro, con lo que se pueden ver hasta las patas de gallo del malhechor. Para movilizarse, los policías cuentan con 150 vehículos que incluyen motos, patrullas y camionetas. El equipo incluye 15 centinelas, que son unos postes con teléfono y cámara, para auxiliar en casos de emergencia a heridos de bala, infartados, etcétera.

Un aspecto importante es el acercamiento con los vecinos; todos los miércoles dan pláticas en Uruguay 50, para dar a conocer lo que se está haciendo y recoger opiniones. Cada 15 días se reúnen con los líderes de los ambulantes. El puesto de mando cuenta con un centro de atención ciudadana, en el que atentas jovencitas brindan información turística, legal, cultural, vecinal y de transportación. Puede comunicarse al 060 o al 55-18-12-12.

En la misma calle de Cuba, en el número 76, se encuentra uno de los mejores restaurantes del Centro Histórico, en todos los sentidos: El Gallos Centenario, alojado en una bella casona decimonónica, está impresionantemente decorado. La comida mexicana es muy buena; sin exagerar, su mole negro es probablemente el mejor de la ciudad; de entrada, unas indias vestidas (flor de calabaza rellena de queso) o unos taquitos šde fideo! Aunque no lo crea, son buenísimos. El servicio es amable y eficiente.

[email protected]

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año
La Jornada
en tu palm
La Jornada
Coordinación de Sistemas
Av. Cuauhtémoc 1236
Col. Santa Cruz Atoyac
delegación Benito Juárez
México D.F. C.P. 03310
Teléfonos (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00
Email
La Jornada
Coordinación de Publicidad
Av. Cuauhtémoc 1236 Col. Santa Cruz Atoyac
México D.F. C.P. 03310

Informes y Ventas:
Teléfonos (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00
Extensiones 4329 y 4110
Email