Habría muy poco para hacer frente a contingencia mayor

Recorte presupuestal podría provocar la descapitalización del Fondo de Desastres

ALONSO URRUTIA

Pese a la creciente demanda de recursos por parte de estados y municipios para atender emergencias y desastres, para este año la Cámara de Diputados sólo asignó 250 millones de pesos al Fondo Nacional de Desastres (Fonden), menos de 10 por ciento de lo solicitado por la Coordinación de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación. Es por ello que la alternativa para atender los siniestros este año será echar mano de las reservas, al borde de la extinción.

La coordinadora de Protección Civil, Carmen Segura Rangel, sostiene que según las proyecciones del área a su cargo, a partir de los recursos utilizados en los pasados años, los requerimientos mínimos eran de 3 mil 200 millones de pesos para mantener intocables las reservas. Sin embargo, por la asignación de la Cámara de Diputados "esto augura que tendremos que echar mano de alguna cantidad para poder cubrir la cantidad de eventos que se presentan recurrentemente en la temporada".

La asignación que hizo para este año la Cámara de Diputados es la más baja en los nueve años de existencia del Fonden. A diferencia de los 2 mil 613 millones de pesos con que se inició este fondo o los 4 mil 870 que se le asignaron en 2001, este año sólo fueron 250 millones de pesos, 100 menos que en el 2003 y menos de la mitad de los 578 millones de 2002.

El desplome de la asignación de los recursos no es congruente con el incremento sostenido de las demandas de apoyo federal de municipios y estados. A diferencia de los años recientes, donde se habían podido acumular reservas por 3 mil 500 millones de pesos, al arrancar 2004, de concretarse el promedio de gasto de los años recientes virtualmente se descapitalizaría el Fonden al término del año.

En total, para 2004 el Fonden contará con 3 mil 800 millones de pesos, 3 mil 550 millones de ellos provenientes de sus reservas -las últimas- y los 250 millones de pesos que le asignaron este año. "Estaríamos al límite del gasto que se tiene que erogar y nos quedaría muy poco para hacer frente a una contingencia mayor".

-¿No es un incongruencia del Congreso que a pesar de que hay un incremento en la demanda se asignen menos recursos?

-No calificaría la actitud del Congreso, pero en honor a la verdad sí esperaba que hubiera una mayor asignación al Fonden. Basta un análisis numérico y de criterios de cuánto ha sido el gasto en los desastres para ver los requerimientos. Esperábamos que por lo menos nos dieran el gasto promedio de los pasados años, para no tocar la reserva.

El criterio del Fonden, agrega, es mantener un "colchón" para hacer frente a posibles contigencias mayores. La coordinadora señala que en términos generales es difícil prever el comportamiento de la naturaleza, salvo en los casos de los fenómenos hidrometereológicos, donde podemos prever que ocurrirán, pero no los daños.

A pesar de las restricciones presupuestales, Segura Rangel sostiene que eso no deberá ser un factor en la capacidad de respuesta que se dé a estados y municipios que lo requieran. "El desastre es el que marca la necesidad y el porcentaje a que tenemos que llegar; no podemos inyectarle otros ingredientes o sugerir que vamos a controlar la asignación del gasto", indicó.

En otro orden, si bien Segura reconoce las críticas que han hecho algunos gobernantes en demanda de agilizar la asignación de recursos, también señala que se han reducido los tiempos entre el momento en que ocurre el desastre y la asignación total de fondos, aunque todavía es preciso revisar las reglas para abatir más los tiempos.

De acuerdo con las reglas actuales, a partir de la ocurrencia del siniestro pasan entre seis y siete días para que los comités técnicos decreten la declaratoria de desastre y otros 40 para que se canalice la totalidad de los recursos.

Sin embargo, explica Segura, existen mecanismos para que a partir de la declaratoria del desastre pueda asignarse hasta 40 por ciento de los recursos para sufragar los gastos totales que implique el siniestro. Eventualmente, cuando se concluya la evaluación, pueden asignarse mayores recursos si así se requiere o aplicar mecanismos para resarcir dinero a la Federación por no haberse utilizado.

Cabe señalar que el Fonden cubre la totalidad de gastos que se hayan registrado en infraestructura, sea en carreteras, escuelas o centros de salud, entre otros.