Están presos desde 2003

Pide comisionada de la ONU libertad para 80 cubanos

AFP

Ginebra, 17 de febrero. En su informe a la próxima Comisión de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que se reunirá en Ginebra a partir del 15 de marzo, la representante del Alto Comisariado de Naciones Unidas para Derechos Humanos, Christine Chanet, pidió la liberación de 80 cubanos detenidos "arbitrariamente" en 2003.

"Fue una ola de represión sin precedente" durante la cual se dictaron penas de seis a 28 años de cárcel. Se trató en general de personas arrestadas por ejercer el periodismo o la escritura, integrar asociaciones, partidos políticos y sindicatos de oposición, para los cuales Christine Chanet solicitó al presidente cubano Fidel Castro en junio del año pasado que los indultara. Una "demanda que sigue sin respuesta", dice el informe.

Añade el documento que las condiciones de detención de estas personas son "particularmente alarmantes", pues son "transferidos de un lugar a otro, alejados de sus familias y cumplen sus condenas hacinados".

Al mismo tiempo, la ONU recordó los fusilamientos de tres acusados de secuestrar un barco el 2 de abril de 2003, cuya ejecución se llevó a cabo nueve días después, lo que significó el abandono de la moratoria contra la pena de muerte vigente en Cuba desde 2000, una de las iniciativas de la ONU contra la pena capital.

Por otra parte, Christine Chanet observa que actualmente hay una "extrema tensión entre Estados Unidos y Cuba", lo cual se agrega "a los efectos persistentes y desastrosos del embargo, concretamente contra las personas más vulnerables, niños, mujeres y ancianos", creando un clima "poco propicio para el desarrollo de las libertades de expresión y de reunión".

La representante de Naciones Unidas exhorta a las autoridades cubanas a adherirse al Pacto de Derechos Civiles y Políticos de la ONU, que garantiza los derechos individuales y las libertades fundamentales, a reinstaurar la moratoria contra la pena de muerte, a aceptar la visita de las ONG y a permitir la libre circulación de personas para que entren y salgan de Cuba sin trabas.