Gustavo Leal F. *

šMuy, muy cosmopolitas!

El 10 de noviembre pasado, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos "extendió" ocho meses el plazo para que exportadores y productores de alimentos, fuera y dentro de ese país, cumplan con los requisitos de registro de instalaciones y notificación previa de importación.

Como la Ley Contra el Bioterrorismo entró en vigor el 12 de diciembre, la FDA realizará también "campañas de capacitación" para no obstaculizar el comercio con México y Canadá, países con quienes comparte amplias fronteras. Cumplido el plazo, las instalaciones que no se ajusten a la ley se harán acreedoras a sanciones.

Los alimentos procesados, manufacturados, empacados o almacenados fuera de Estados Unidos, pero que lo tengan como destino -para consumo o rexportación-, que incumplan, no podrán entrar a territorio estadunidense. Están exentos pesticidas, carne de res, pollo y huevo, "siempre y cuando no constituyan ingredientes de platillos más elaborados".

ƑQué ha ocurrido en México? Cuando Alberto Ortega, de la Oficina de Políticas Públicas de la Presidencia, calificaba de "gigantesco reto" certificar a 5 mil exportadores pequeños y medianos, las secretarías de Economía, Salud y Agricultura comunicaban que México "establecerá" esquemas de inspección para alimentos que ingresen al país y "reforzará" la aplicación de avisos sanitarios de importación, a "similitud" de la FDA.

Para ello, la Secretaría de Salud (Ssa) "determinará" productos y materias primas que requerirán autorización sanitaria previa de importación, además de los incluidos en el artículo 286 de la Ley General de Salud (alimentos en general, bebidas no alcohólicas y alcohólicas, perfumería, belleza, aseo y tabaco). Además, se instalará un modelo de vigilancia in situ.

Aunque el llenado del formato del registro de instalaciones (en inglés) puede resultar un auténtico dolor de cabeza para los exportadores de perecederos. Para el presidente del Consejo Estatal Agropecuario de Nuevo León, Francisco Chapa, la FDA "no pide datos de venta, pero sí mucha precisión en la ubicación de la empresa y el tipo de productos que elabora".

Por su parte, el Senado de la República formó un grupo de trabajo que analizará -con integrantes del gabinetazo- el impacto de la nueva ley: "existe inquietud", declaró la senadora Laura Alicia Garza Galindo, respecto a que la disposición "sea utilizada como pretexto para impedir la entrada de productos mexicanos". Sin embargo, Juan Carlos Baker, director para el TLCAN de la Secretaría de Economía, descartó "afectaciones al comercio entre los dos países" y aseguró que se "dará seguimiento continuo".

Mientras tanto, diputados mexicanos (como el perredista Juan José García Ochoa) y estadunidenses (John Sweeney, de la Comisión de Comercio, así como Peter Sessium, del Comité de Reglas) promoverán una prórroga de seis meses para que 2 mil 500 micro y pequeñas empresas mexicanas puedan registrarse. Es que, señaló García Ochoa, los mecanismos de difusión de la Secretaría de Economía "han sido ineficientes y no han llegado hasta ese tipo de negocios".

Igualmente, al presidente del Consejo Nacional Agropecuario, Armando Paredes, le preocupan aquellos productores que inicien sus exportaciones cuando ya no puedan contar con la "flexibilidad de los estadunidenses". También los 20 mil afiliados a la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productos del Campo afirmaron que "ante la falta de asesoría del gobierno no han sabido cómo llevar a cabo el registro".

Para Bruce Zanin, de la Oficina Agrocomercial de la embajada estadunidense, al mediar diciembre se habían registrado 2 mil 950 empresas mexicanas, "de un total no definido que fluctúa entre 7 mil y 12 mil".

Otros exportadores consideran que, además de la Ley Contra el Bioterrorismo, reciben un nuevo impacto para cumplir, ahora, con la Norma Internacional para Medidas Fitosanitarias número 15. Esta ordena a los exportadores de países miembros de la Organización Norteamericana de Protección de las Plantas que traten químicamente cualquier embalaje de madera que transporte mercancía de exportación, con objeto de evitar la propagación internacional de plagas.

Pero el pasado 6 de noviembre en Berlín, y con "la representación" del gobierno mexicano, el secretario de Salud, Julio Frenk, participó en la cuarta reunión ministerial del Grupo de Seguridad Global de la Salud, para "continuar con la coordinación internacional de medidas en caso de un ataque bioterrorista".

Según la Ssa, este grupo que también integran šcon México! ministros de Salud de Canadá, Reino Unido, Italia, Alemania, Estados Unidos, Japón y Francia fue "formado después de los ataques terroristas del 11 de septiembre en Estados Unidos a iniciativa de ese país", para "brindar confianza a la población de que los países del mundo están atentos a estos riegos y se están preparando para enfrentarlos". Ciertamente: šmuy, muy cosmopolitas!

* UAM-Xochimilco