Al finalizar 2004 el estado habrá recibido unos 500 millones de dólares por remesas

La migración de Chiapas hacia EU se agudizó con Fox y Salazar: expertos

Escasean proyectos sociales y estímulos agrícolas para la entidad; arrecia el desempleo

JUAN BALBOA

Ciudadanos de Chiapas se han incorporado en unos cuantos años de manera masiva al flujo migratorio a Estados Unidos; se estima que, desde hace cuatro años, uno de cada seis campesinos se desplaza al país vecino. Ninguna región de la entidad sureña es ajena a ese fenómeno, ni la llamada zona de conflicto, donde se encuentran las principales comunidades del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

Ante la falta de proyectos sociales y de estímulos para la producción agrícola tradicional, así como el creciente desempleo y el abandono de los programas contra la pobreza por los gobiernos estatal y federal, unos 30 mil chiapanecos -principalmente jóvenes- emigran cada año a Estados Unidos, donde a finales de 2004 se habrán establecido cerca de 300 mil, la gran mayoría (más de 65 por ciento) campesinos e indígenas.

Investigadores del Colegio de la Frontera Sur y del Centro de Estudios Superiores de México y Centroamérica de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach) no tienen duda de que la migración de chiapanecos a Estados Unidos se agudizó con los gobiernos de Vicente Fox y Pablo Salazar.

Hay cifras que lo demuestran, añaden: en los años 90 ocurren los primeros desplazamientos medianos a ese país, pero en 2000 se aceleran y vuelven masivos.

"Los campesinos e indígenas chiapanecos están cambiando con rapidez la cosecha del maíz, principal producto de consumo familiar, por la cosecha del dólar en Estados Unidos, al grado de que, en muy poco tiempo, Chiapas está ganando en captación de remesas a estados tradicional e históricamente expulsores de migrantes, como Zacatecas", destaca el investigador Daniel Villafuerte, del mencionado centro de estudios de la Unicach.

En 1995, añade, Chiapas ocupaba el lugar 27 entre las entidades que reciben remesas, en 2001 pasó al sitio 15, en 2003 al 12 y este año saltó al 11. "Esto quiere decir que la migración, principalmente de campesinos e indígenas, se ha acelerado", señala .

"Existe un problema estructural y la migración es una respuesta a esta crisis de expectativas de la población joven, que está creciendo de manera muy rápida. Ese problema tiene que ver con el modelo económico de Chiapas, que ya hizo crisis en 1994, pero continúa basado fundamentalmente en la producción agrícola tradicional, es decir, café, plátano y mango, principalmente.

"La migración se ha incrementado en los cuatro años anteriores -durante el gobierno de Pablo Salazar- porque existe un grave problema relacionado con el viejo modelo agrícola que continúa en Chiapas y ya no es posible sostener; el campo no aguanta, y es ahí donde vive la mayor parte de la población chiapaneca."

La desaparición de instituciones en el agro, como la Conasupo, ha configurado un panorama muy desfavorable para los campesinos y, si agregamos que no hay inversión productiva, la crisis se profundiza y la migración es la única solución para los chiapanecos, abunda.

Hasta hace poco, afirma el investigador, la migración de los campesinos chiapanecos era hacia otras entidades, entre ellas Quintana Roo, Yucatán y Tabasco; ahora su objetivo son ciudades del norte del país y territorio estadunidense.

A su vez, Jorge Cruz Burguete, investigador del Colegio de la Frontera Sur, estima que, de cada 10 familias de los municipios fronterizos de Chiapas, "ocho tienen alguna experiencia migratoria, y de cada seis campesinos de la entidad, uno está emigrando a Estados Unidos".

En 2003 Chiapas recibió de los migrantes en el país vecino 260 millones de dólares, es decir, casi 22 millones al mes, y en 2004 habrá un alza importante.

Se estima que en el segundo semestre las remesas sumarán 227 millones de dólares, casi la cantidad que el estado recibió en todo 2003, y se considera que al final del año Chiapas habrá recibido unos 500 millones de dólares, cifra récord para la entidad.

Esos 500 millones equivalen a toda la cosecha de maíz -principal generador de valor en el estado-, además de la producción de frijol, plátano y mango. "Eso es lo que están mandando los chiapanecos de Estados Unidos", destaca Villafuerte.

Ninguna región chiapaneca es ajena a la migración, afirma, aunque aclara que las zonas más expulsoras son la Sierra Madre, la Costa, la fronteriza, los Altos, la Norte y la Fraylesca; incluso del área de influencia del EZLN se desplazan al país vecino.

Acepta que aún no existe certeza sobre la distribución de las remesas. "Pensábamos que buena parte del dinero que llega iba para los gastos de la familia, vestido, alimentación, etcétera, y deudas que los campesinos contraen para financiar el viaje". Esto último, añade el investigador de la Unicach, "hay que decirlo muy claramente: los campesinos que emigran tienen que hacerse de un capital inicial para sufragar los gastos; venden algún bien de la familia o se endeudan".

Existe una relación muy directa entre lo que se generaba en el campo hace 10 o 15 años y la actual ola migratoria, dice. Ahora vemos ahora gran cantidad de agencias de viajes que hacen el recorrido directo desde municipios de la zona zapatista (por ejemplo, Las Margaritas) a Tijuana, por 900 a mil pesos, las cuales se ha extendido a casi todas las regiones.

Cruz Burguete señala que en las comunidades se observa un cambio en los estilos de vida, pues en muchas se han incorporado nuevos patrones alimenticios y se ha modificado la vestimenta; asimismo, los jóvenes empiezan a decidir sobre la vida interna de la comunidad, haciendo a un lado la participación de los consejos de ancianos. También se incrementan el alcoholismo y la prostitución.

Subraya que los ejes que impulsan la migración son los conflictos por la tierra, el desmantelamiento del apoyo al campo, el desempleo, la pobreza y la ruptura intracomunitaria por aspectos político-religiosos, a todo lo cual se suma otra causa: la militarización.

"No hay empleo, no hay apoyos al campo, es muy bajo el precio que reciben por los productos agropecuarios, no pueden competir; el desempleo, la pobreza y la militarización inducen fuertemente a la migración definitiva o temporal, lo que provoca ruptura intrafamiliar y quiebres o recomposiciones comunitarias por el tema de la organización en la comunidad indígena y rural chiapaneca."

La migración propició el nacimiento de cientos de agencias de viajes en Chiapas. El investigador del Colegio de la Frontera Sur contabilizó sólo en el municipio de Frontera Comalapa más de 136, con autobuses que salen una vez por semana a Tijuana (el miércoles para llegar el sábado).

En 20 municipios chiapanecos existen unas 380 agencias de viajes improvisadas, las cuales atienden regiones como Costa, Sierra, Soconusco y Altos, y venden boletos para desplazarse a los estados mexicanos del norte, con la promesa de conseguir a sus clientes trabajo en firmas transnacionales, como Hitachi, Panasonic, Infra, JVC, Pionner y Sony, o pasar de modo directo al migrante a territorio estadunidense.

Bobadilla Tours, Turistur, Viajes Mendoza, Alva, Piñón Juárez, Turistur, Cassandra, Miriam, Hernández Confort, Martínez y Rápidos son los nombres comerciales de algunas de las 380 agencias creadas en los tres años recientes. Estas se encargan de trasladar a la mayoría de los 30 mil chiapanecos que cada año viajan al vecino país en busca de mejores condiciones de vida.

La nueva migración de chiapanecos hacia Estados Unidos se ha convertido en un grave problema para los gobiernos estatales y municipales, así como para las propias autoridades ejidales, que ven cómo disminuye su población; incluso, en algunas comunidades se realizan contabilidades semanales.