Chiapas, muestra del nulo diálogo con el Estado: Del Val

Convoca Menchú Tum a la unidad entre indígenas

ROSA ROJAS ENVIADA

Tepoztlan, Mor., 11 de octubre. Un llamado a los pueblos indios para hacer pactos entre ellos y luchar unidos por sus intereses comunes hizo aquí la premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú Tum, durante los trabajos de la reunión Después de la Década de los Pueblos Indígenas: recuentos y horizontes, convocada conjuntamente por la fundación que lleva su nombre y la UNAM.

En el acto, al que asisten delegados de 15 países de América, planteó que es necesario defender en la Organización de Naciones Unidas el proyecto de Declaración Universal de Derechos de los Pueblos Indígenas que países como Estados Unidos, Gran Bretaña e Irlanda del Norte quieren echar atrás, después de un proceso de negociaciones de 10 años. "Ni un paso atrás", subrayó.

En la sesión de trabajo los dirigentes indígenas acordaron crear un observatorio internacional de cumplimiento de los derechos de los pueblos originarios al que se invitaría a participar a intelectua- les comprometidos con las causas populares como el escritor José Saramago y el Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, y a organizaciones no gubernamentales como Amnistía Internacional.

Asimismo se acordó demandar que la Organización de Estados Americanos (OEA) declare un Decenio de los Pueblos Indios de las Américas y la creación de un Foro Permanente de los Pueblos Indios en el Sistema Interamericano.

También solicitarán a la Cumbre Iberoamericana -cuya próxima reunión se efectuará en Costa Rica- que evalúe el cumplimiento de los acuerdos de la Década que proclamó la ONU en 1994, así como los compromisos financieros que hicieron para la constitución del capital social del Fondo Indígena.

Se enfatizó la importancia de consolidar el Foro Permanente de Pueblos Indígenas de la ONU, el cual debe ser el encargado de impulsar la evaluación del cumplimiento de las metas del decenio en forma regional: la Zona Andina, México, Mesoamérica, Región Amazónica. El foro también debe realizar sesiones regionales, se señaló.

Alianza con universidades de AL

Igualmente se recomendó realizar alianzas con universidades públicas de América Latina, como la UNAM, para desarrollar indicadores cuantitativos y que se evalúe el cumplimiento de los objetivos y compromisos de la Década de los Pueblos Indígenas por parte de los estados.

Se ratificó el acuerdo de exigir a la ONU la declaración de un nuevo decenio de los pueblos indios, con el mandato de realizar una evaluación a la mitad del periodo y convocar a una conferencia mundial al final de la misma. Se señaló que todas las agencias de la ONU y los estados tienen que desarrollar metodologías de colaboración entre con los pueblos indios para asegurar la implantación de programas para el desarrollo económico y cultural de los pueblos.

Se apuntó la necesidad de superar la atomización de las organizaciones indias y crear una estructura orgánica a nivel internacional en función no sólo de los intereses de Naciones Unidas, sino de la problemática internacional que involucra a los pueblos indios, por ejemplo las movilizaciones que se han realizado contra el Area de Libre Comercio de las Américas y los tratados comerciales, la problemática de la propiedad intelectual, la biopiratería. Esto con base en un código de ética y fraternidad que permita buscar objetivos comunes.

También se indicó que es necesario contar con información desagregada que permita visualizar la situación de los indígenas en cada país en temas como pobreza, salud, educación, y ésta debe además especificarse por sexo y edad, tomando en cuenta la autoadscripción a un pueblo indígena, más que el dato de la lengua.

Se aseveró que es necesario que los intelectuales indígenas desarrollen propuestas desde la cosmovisión de sus pueblos sobre el modelo político y económico que se propone, ya que no basta definirse contra el neoliberalismo. Uno de los desafíos es contextualizar un estado multicultural.

José del Val, del programa universitario México Nación Multicultural, habló de la crisis de la ONU. Indicó que hay un proceso de debilitamiento de la interlocución con el Estado, lo que se demuestra con el caso de Chiapas, ya que el Ejército Zapatista de Liberación Nacional intentó dialogar con los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial y en los tres casos no fue posible, por lo que el zapatismo tuvo que entrar en un proceso de resistencia permanente. "La agenda del movimiento indígena es la reforma del Estado", afirmó.

Añadió que los pueblos indígenas deben incorporarse también al proceso de transformación de la ONU.