Ola de secuestros y asesinatos en Bagdad; continúan los bombardeos en Fallujah

Plagian en Irak a otro contratista de EU

KIM SENGUPTA THE INDEPENDENT

Bagdad, 3 de noviembre. Hombres armados se-cuestraron este miércoles a un segundo contratista estadunidense en 48 horas, en la casa donde vivía en Bagdad, en tanto tres cuerpos sin cabeza fueron hallados en una ruta de acceso a la Zona Verde, corazón del poder estadunidense en el país.

Asimismo, rebeldes difundieron el video de la decapitación de un oficial del ejército iraquí. Las decapitaciones, secuestros y ataques con bombas continúan sin freno.

Ni oficiales iraquíes ni estadunidenses pudieron confirmar las identidades de los tres hombres cuyos cuerpos fueron encontrados bajo un puente, fuertemente custodiado, que conduce a la Zona Verde.

Seis hombres, entre ellos un estadunidense, un nepalés y un filipino, fueron se-cuestrados el lunes en el exclusivo distrito de Mansur por un comando armado con rifles semiautomáticos y lanzagranadas de cohete, que irrumpió en las oficinas de una empresa saudiárabe.

En las primeras horas de la mañana de hoy, un estadunidense de ascendencia libanesa fue capturado en la misma zona. El cautivo, identificado como Radim Sadeq, trabajaba en una empresa de telefonía móvil y fue plagiado cuando fue a abrir la puerta de su casa al oír que tocaban, indicó esta noche un vocero del Ministerio del Interior.

Nuevos detalles han surgido del video más reciente donde aparece la trabajadora humanitaria Margaret Asan, recibido por el canal árabe de televisión Al Jazeera, pero éste sólo mostró un pequeño segmento, por juzgar que era demasiado grotesco.

En él se ve cómo Hassan, que encabezaba la sección iraquí de CARE International, se desmaya al leer una declaración. Según la televisora, sus captores han amenazado con entregarla a un grupo encabezado por el militante Abu Musab Zarqawi a menos que las tropas británicas se retiren del país en 48 horas. Los combatientes, que han adoptado el hombre de Al Qaeda en Irak, han llevado a cabo cierto número de decapitaciones.

El oficial iraquí cuyo asesinato se muestra en otro video es el mayor Hussein Shanoun, quien fue secuestrado por insurgentes hace 10 días en la ciudad norteña de Mosul.

Cuatro conductores de camión de origen jordano fueron capturados y dos asesinados a tiros cerca de la ciudad de Ramadi, en el oeste del país, donde fuerzas estadunidenses han emprendido una campaña intensiva contra militantes sunitas.

Los insurgentes continuaron también su campaña de ejecuciones de oficiales ira-quíes. Dos días después del asesinato del vicegobernador de Bagdad, en el primer día de registro de votantes para las elecciones de enero, Hussein Ali Fattal, uno de los más altos funcionarios del Ministerio del Petróleo, fue muerto a tiros camino a su trabajo.

Un día antes los insurgentes habían volado un oleoducto y un pozo petrolero en el norte de Irak, por lo cual se interrumpirán las exportaciones de crudo de la región por los próximos 10 días.

Un coche bomba impactó en un autobús que llevaba trabajadores al aeropuerto de Bagdad en un camino que se ha vuelto uno de los más peligrosos del país; nueve resultaron heridos. En un ataque similar, ocurrido hace dos semanas, dos trabajadores mu-rieron y su autobús fue incendiado.

Entre tanto, aviones de combate estadunidenses prosiguieron sus ataques a la ciudad rebelde de Fallujah; ahora las incursiones son también diurnas. Predomina la creencia de que, pasadas ya las elecciones en Estados Unidos, la tan aplazada ofensiva para capturar la ciudad comenzará pronto.

En discurso ante la Cámara de los Comunes, el primer ministro británico, Tony Blair, hizo un exhorto a los insurgentes de Fallujah a deponer las armas.

El ejército estadunidense indicó que las operaciones en el terreno han continuado sin pausa durante 12 horas, gran parte de ellas en el camino de Fallujah a Ramadi, por el cual muchos combatientes de la resistencia han traspasado el cerco estadunidense en torno a la primera ciudad.

Las fuerzas de ocupación informan haber sido objeto de frecuente fuego de morteros y ametralladoras de los insurgentes. También se ha dado un repunte del número de bombas sembradas al lado de los caminos por donde pasan las tropas estadunidenses.

En las primeras horas de ayer aviones de combate atacaron lo que describieron como "puesto de comando enemigo" en Fallujah, y también un depósito de armas.

De momento no se dieron reportes sobre el número de víctimas en la ciudad. Se cree que más de 80 por ciento de los 300 mil habitantes de Fallujah han huido.

Un profesor, Ahmed Ibrahim Sadeh, que llegó a Bagdad la mañana de este miércoles, relató: "Todas las tiendas están cerradas y todos los que podían irse ya lo hicieron. La resistencia parece tener montones de armas, y siguen llegando pese a los retenes estadunidenses. Se dice que las armas vienen del sur, de Arabia Saudita y Yemen. Los chiítas del sur las están dejando pasar".

Los estadunidenses -añadió- "no han impedido partir a la gente. Los mujaidines de la ciudad dicen que no esperan sobrevivir, pero quieren matar a tantos invasores como sea posible."