Usted está aquí: miércoles 27 de julio de 2005 Política Los priístas no van a llegar, advierte Sahagún

Nunca más gobiernos deshonestos, sostiene Fox

Los priístas no van a llegar, advierte Sahagún

En Tlaxcala, el Ejecutivo destaca logros de la democracia

ROSA ELVIRA VARGAS, JUAN LUIS CRUZ Y CARLOS AVENDAÑO ENVIADA Y CORRESPONSALES

Terrenate, Tlax., 26 de julio. En su arenga para ubicar la democracia mexicana a partir de su triunfo en 2000, el presidente Vicente Fox exclamó: "¡Nunca más gobiernos autoritarios, nunca más gobiernos deshonestos, nunca más gobiernos corruptos!" A su vez, Marta Sahagún, en su activismo para atender solicitudes y recibir besos y porras, no esquivó el buscapiés político cuando -siempre detrás de las vallas- una mujer la felicitó porque su esposo tuvo agallas para "derrocar" al anterior sistema y le pidió: "no permitamos que lleguen los demás otra vez..." Sahagún de Fox no titubeó y respondió: "No van a llegar, no van a llegar''.

En una gira por pueblos del sur de Tlaxcala, donde los habitantes dieron a la pareja Fox numerosas muestras de bienvenida, apenas similares a las peticiones de ayuda, Marta Sahagún se empeñó, a falta de asistentes personales, en tomar nota sobre los problemas de salud de muchos niños, sin negar una sonrisa a quienes la arropaban y le pedían no prestar oídos a "los envidiosos".

Metros adelante, el presidente Fox apenas pudo contener su contrariedad ante un cuestionamiento, el único que alcanzó a formularle Arturo Tecuatl, del periódico digital e-Tlaxcala.com: "Algunas personas sienten que no se llenaron las expectativas que usted ofreció".

El mandatario lo miró fijamente y, sin reprimir su molestia, sin levantar la voz, pero acentuando cada palabra, le respondió: "¿Cuáles personas?, ¿quién te dijo eso?, ¿de dónde lo sacas?... Yo tengo otra información''. Y se fue.

Activismo y complacencia

Paciente, al llegar al presídium Fox recompuso el gesto y se dispuso a esperar, mientras veía complacido las expresiones de la gente hacia Marta Sahagún.

Ella se detenía el tiempo que hiciera falta para instruir a Lupita de Ortiz, la esposa del gobernador, sobre cómo canalizar los casos de niños con labio leporino, parálisis cerebral, columna bífida, pues al final, como le resumió un hombre de la multitud, "le pedimos su ayuda para estos niños porque hay muchos niños así; queremos que todos sean atendidos. Hay muy pocos recursos".

La división del trabajo se cumplía una vez más. Mientras Sahagún se comprometía a enviar computadoras la semana próxima o a tramitar una ambulancia para Apizaco, Fox recuperaba la práctica de utilizar una grabadora de bolsillo para recordar la necesidad de dar prioridad al proyecto carretero Tlaxcala-Calpulalpan-Apizaco, y hacerlo de cuatro carriles, con un costo de 790 millones de pesos.

El nuevo gobierno panista del ex priísta Héctor Ortiz utilizó su todavía vigente bono de popularidad. Por eso, además de quienes buscan recibir atención a sus demandas -y hubo de todas, porque la pobreza es evidente-, no faltó la admiradora de Marta Sahagún que se presentó con un ejemplar de la revista española ¡Hola! de octubre de 2001, donde aparecen Fox y su esposa en la portada. Y mientras le pedía una firma en el ejemplar, le dijo a Marta Sahagún: "¡La admiro mucho, siga adelante! No haga caso de lo que le digan. Usted tiene mucha personalidad, nos gusta cómo se viste. Usted no haga caso; usted es muy inteligente y es la esposa ideal del Presidente''.

Ella respondió: "Yo trabajo fuerte por ustedes... ése es mi compromiso".

Entonces, la procedencia y filias de aquella mujer se hicieron más manifiestas: "Estamos con el licenciado Creel. Cuente con nosotras''.

La gira comenzó en Tlaxco, donde el Presidente conoció los avances del Convenio Congregación Mariana Trinitaria y entregó apoyos a productores agropecuarios, aunque dejó sin respuesta la solicitud del gobernador Ortiz, por 6.3 millones de pesos, para completar los 12.6 millones requeridos en la operación del seguro agrícola tlaxcalteca.

El discurso de Fox se centró nuevamente en la divisa de la democracia. Con ésta, aseguró, se acabaron las dos categorías de mexicanos que existían antes del Seguro Popular. Con la democracia, ahora se trabaja diferente y, aún más, ahora se puede educar de otra forma a los niños con esos "pizarrones maravillosos operados por una computadora".

Luego, ya aquí, el mandatario izó una bandera blanca por cobertura total de afiliación al Seguro Popular, y aseguró que en julio de 2000 los mexicanos se decidieron por la democracia y le apostaron a extenderla de las urnas a la política y luego a la democracia social.

Fox presumió: "En estos cuatro años de gobierno, sin aumentar impuestos, sin recargarnos en la ciudadanía, estamos logrando cosas extraordinarias''.

 
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