Se violan derechos humanos de los jóvenes al privarlos de su libertad: directora del Cotume
El DIF y el INM en Sonora envían al consejo tutelar a menores repatriados
Hermosillo, Son., 4 de octubre. El sistema estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) organizó en los municipios fronterizos de Sonora un programa para recluir en el Consejo Tutelar para Menores (Cotume) a los jóvenes reincidentes que son repatriados por las autoridades del Servicio de Inmigración de Estados Unidos.
No obstante que estos menores no han infringido la ley penal del estado, las autoridades del DIF y de la delegación del Instituto Nacional de Migración (INM) acordaron enviar a niños y niñas a las "celdas de corta estancia", porque a su juicio habrían incurrido "en una conducta antisocial", que ellos mismos decidieron calificar como una infracción grave.
Informes del INM indican que durante los primeros nueve meses del presente año, por la frontera sonorense con Arizona los agentes de la Patrulla Fronteriza deportaron a México a 6 mil menores no acompañados. Trascendió que muchos de ellos ya fueron recluidos en el Cotume en los municipios de Nogales y Agua Prieta.
Para Amelia Iruretagoyena, directora del Cotume, esta medida adoptada por el DIF constituye una clara violación a los derechos humanos de los menores, porque a pesar de que no han infringido ninguna disposición legal, son privados de su libertad.
"No podemos aceptar a los menores repatriados, porque la conducta antisocial no está tipificada como delito y no representa una violación a la Ley 74, que crea el Consejo Tutelar para Menores. Para que puedan ingresar al centro, estos jóvenes debieron haber incurrido en una violación a la ley penal, y en estos casos no ha ocurrido así", agregó.
A pregunta expresa, Iruretagoyena aseguró que desconocía estas disposiciones del DIF, pero sostuvo que dichas autoridades podrían incurrir en el delito de privación ilegal de la libertad por mantener en prisión a los menores repatriados, sin que estos hayan infringido las disposiciones establecidas en la ley local.
Explicó que al cruzar ilegalmente la frontera, estos menores cometieron una violación a las leyes de migración de Estados Unidos, pero las autoridades mexicanas no tienen por qué castigarlos por el hecho de haber ido en busca de mejores condiciones de vida, porque el delito fue cometido en otro país.
Sin embargo, José Antonio Bustillos Lagarda, subprocurador de defensa del menor y la familia de Agua Prieta, informó que los menores que ya han sido deportados más de una vez han empezado a ser recluidos en las "celdas de corta estancia" del Cotume.
Refirió que las autoridades del consejo en cada uno de los municipios fronterizos se hacen cargo de los menores repatriados, y dependiendo de los casos de reincidencia, se determina aplicar una sanción administrativa de hasta 72 horas cárcel o, en su caso, enviarlos al Cotume en la capital del estado.