Número 119 | Jueves 1 de junio de 2006
Director fundador: CARLOS PAYAN VELVER
Directora general: CARMEN LIRA SAADE
Director: Alejandro Brito Lemus

Profilaxis
post exposición al VIH

El personal de salud que trabaja con pacientes positivos al VIH debe
observar medidas de seguridad que eviten el contacto con sangre y otros fluidos con presencia del virus. En caso de accidentes, existen métodos de prevención post exposición que pueden evitar una infección.


Sobre las medidas profilácticas a seguir después de haber sido pinchado con una aguja o un objeto punzocortante de paciente con la infección por VIH/sida, entrevistamos al doctor Eddie León Juárez, especialista del Hospital de Infectología del Centro Médico Nacional La Raza del Instituto Mexicano del Seguro Social.

¿ En qué consiste una exposición al VIH?
Es definida médicamente como una lesión percutánea (o sea que atraviesa la piel) por un objeto punzocortante. Una aguja, por ejemplo.

¿ Eso constituye un riesgo de trabajo?
Sí, efectivamente, ya que ocurre durante el desempeño de las labores. Los accidentes ocurren principalmente con el uso de jeringas para obtener muestras sanguíneas y es en el momento del reencapuchamiento de las mismas cuando el accidente ocurre. Le siguen la exposición con sangre de mucosas, cortadas y contaminación de heridas.

La situación de reencapuchamiento debería ser considerada de bajo riesgo, ya que se puede evitar entrenando al personal o evitando tener que reencapuchar las agujas, las cuales tendrían entonces que ser desechadas en un contenedor rígido y después eliminarlo como si se tratara de material biológico infeccioso.

La exposición puede ser de 3 formas:

• Lesión percutánea a través de una picadura o lesión con un objeto punzocortante.
• Exposición a sangre con piel no intacta (lesionada), estando en contacto con mucosas (ojos, nariz, boca).
• Exposición a sangre con piel intacta (sin lesión), con contacto prolongado en área amplia de líquidos corporales como semen o secreciones vaginales de paciente con VIH.

¿ Cuáles son las personas más expuestas
a contagiarse por contacto accidental?

Los más expuestos son los trabajadores de la salud –como enfermeras, médicos, estudiantes de medicina y laboratoristas, entre otros-, cuya actividad implica contacto frecuente con personas afectadas por el VIH/sida, con sangre u otros líquidos corporales contaminados.
Es necesario analizar en forma integral el medio donde se supone que aconteció el riesgo, para evaluar la probabilidad de que el trabajador se haya infectado, pues existen otros factores importantes a considerar, entre estos el número de pacientes infectados que atiende, el número de lesiones percutáneas que ha tenido y la posibilidad de contraer el virus en el primer contacto con la sangre de una persona recién infectada.

¿ Existen otras infecciones, que como
el VIH, pueden trasmitirse en esa forma?

Sí, debe señalarse que hay otras infecciones que se trasmiten igual que el VIH, tales como la hepatitis viral B y C. De hecho, éstas son de seis a treinta veces más fáciles de adquirir por punciones y a través de las mucosas.
¿ Quién tiene más riesgo de infectarse?
Si se trata de heridas profundas con objetos punzocortantes, el riesgo es elevado. En cambio quien tiene su piel sin lesión alguna y entra en contacto con sangre o fluidos tiene un riesgo bajo.

¿ Qué debe hacer la persona que
considera haber sufrido un accidente
o riesgo ocupacional?

Si ocurrió un pinchazo en la piel, hay que presionar la lesión suavemente y lavarla con jabón y agua. Si se ha salpicado la piel o las mucosas con algún líquido corporal hay que enjuagar con agua el área inmediatamente.
Hay que registrar nombre, dirección y número telefónico del paciente, así como del médico o del establecimiento que atendieron al accidentado.
Si se trata de pacientes no confirmados como de VIH, pero existe la posibilidad de que esté infectado, se deberá informar al médico que atiende al pinchado.
Si el accidente aconteció en el trabajo, hay que notificarlo al jefe inmediato y al servicio de Epidemiología. No hay que perder tiempo en los detalles de cómo y porqué ocurrió la exposición al virus. Habrá tiempo para esto más tarde.

¿ Cuándo se debe empezar a recibir
atención médica y tratamiento?

Es necesario acudir al médico para una evaluación en el curso de las primeras seis horas después del accidente y notificarlo al servicio de Medicina Preventiva del Hospital ya que el virus tarda de 24 a 48 horas en llegar a los vasos linfáticos, en los cuales tiene lugar la replicación del virus. Después el médico decidirá, si es necesario algún tratamiento.

Cuando se prescriben medicamentos contra el VIH, deben tomarse cuanto antes y durante el tiempo que se indique, que generalmente será de cuatro semanas. Es necesario que se realicen paralelamente pruebas de detección del VIH y de hepatitis B y C para determinar el estado de la persona y repetirlas a los tres y seis meses.

Para poder brindar una mejor atención es necesario saber si el afectado tuvo antes accidentes similares y, si es mujer, saber si está embarazada o lactando a su bebé. También es importante conocer datos sobre su actividad sexual y tratamientos previos o actuales. Así se tendrá más integrado el caso y se podrá prescribir un tratamiento más adecuado.

Para información adicional se puede consultar la Norma Oficial Mexicana para la Prevención y el Control del Virus de Inmunodeficiencia Humana y la Guía de Manejo Antirretroviral de las Personas que Viven con el VIH/sida vigentes en nuestro país.