Usted está aquí: viernes 22 de septiembre de 2006 Política Critica el Senado de la República la aprobación de un muro en la frontera

Solicita al Ejecutivo que informe sobre la situación del debate migratorio con EU

Critica el Senado de la República la aprobación de un muro en la frontera

La medida no contribuye a la búsqueda de una solución conjunta, dice en punto de acuerdo

VICTOR BALLINAS Y ANDREA BECERRIL

El Senado de la República aprobó ayer un punto de acuerdo en el que expresa su preocupación por la inminente aprobación en el Senado estadunidense de la iniciativa HR-6061, misma que ya fue aceptada en la Cámara de Representantes, debido a que "no contribuye a la búsqueda de una solución que atienda de manera conjunta e integral el fenómeno migratorio". Esta postura será comunicada a sus homólogos del vecino país.

Además, el Senado exhortó al Ejecutivo federal a que presente un informe sobre el estado que guarda el debate migratorio con Estados Unidos y reiteró su compromiso con los principios y recomendaciones para la definición de una política migratoria del Estado mexicano, contenidos en la propuesta México frente al fenómeno migratorio, que es plural y fue suscrita por todos los partidos políticos, universidades, académicos, asociaciones civiles y organizaciones de migrantes.

Dicho punto de acuerdo fue presentado en tribuna por el senador priísta Carlos Jiménez Macías, quien subrayó que es fundamental evitar que los intereses electorales hoy presentes en aquel país se impongan y reduzcan la posibilidad de encontrar una solución razonable al fenómeno migratorio.

Jiménez Macías expuso que la iniciativa aprobada por la Cámara de Representantes significa la construcción de una barda doble de más de mil 100 kilómetros de longitud, que iría de Calexico, California, hasta Douglas, Arizona.

Recordó que esta no es la primera vez que se considera y se vota una iniciativa de estas características: ya en diciembre de 2005 la misma Cámara aprobó una legislación similar, que además de la edificación de una barda fronteriza, planteaba considerar a la migración indocumentada como un delito grave sujeto a ser castigado penalmente. Esa iniciativa, que provocó una amplia e intensa discusión en los dos países, no fue recogida en el Senado estadunidense, y en cambio se debatieron los mecanismos más adecuados para administrar la migración.

Hoy, advirtió el priísta, una vez más el Senado estadunidense se encuentra considerando la conveniencia de aprobar la iniciativa que ya fue aceptada por la colegisladora para enfatizar la seguridad y el control migratorio, pero esta iniciativa "ignora la naturaleza regional del fenómeno migratorio, es atentatorio a una relación que comparta la seguridad fronteriza con una visión moderna de la globalización".

En caso de ser aprobada dicha iniciativa, pondría en mayor estado de vulnerabilidad a los migrantes, y significaría un retroceso para las relaciones de cooperación entre México y Estados Unidos en materia migratoria. La construcción de ese muro puede ser rentable políticamente en un proceso electoral en el vecino país, pero en realidad no detendría la migración indocumentada.

Las bancadas de PRD y PAN pidieron sumarse a ese punto de acuerdo, y fue aprobado por todas las fuerzas políticas representadas en la Cámara de Senadores.

 
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