El combate a la pobreza, imperativo ético y político, afirma el presidente electo

Calderón admite que la "acción rectora" del Estado es necesaria contra la miseria

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

El presidente electo, Felipe Calderón declaró que le indigna, lastima y duele la miseria en que viven 20 millones mexicanos, pero al mismo tiempo reconoció los "avances" del actual gobierno en la materia e incluso anunció que seguirá su misma "estrategia" de combate a la pobreza.

Frente a la actual titular de Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso), Ana Teresa Aranda, el panista elogió al gobierno actual, porque -dijo- logró cambiar de programas "meramente asistenciales" a otros orientados al aumento de capacidades y oportunidades de las personas.

Momentos antes, Aranda se enorgulleció de los "logros" de este gobierno, porque, según planteó, la política social "no fue fruto de las ocurrencias del mandatario en turno".

El presidente electo y la secretaria de Desarrollo Social, quien fuera aliada del panista desde que éste contendió para ser candidato presidencial, se reunieron ayer en privado como parte de los trabajos de transición.

Después de este encuentro, el michoacano salió por la puerta trasera -lo que no es usual-, quizás como precaución, porque a esa hora grupos de trabajadores se encontraban a tres cuadras realizando una protesta contra la privatización del petróleo y la electricidad frente a la Secretaría de Energía.

El de ayer fue un día de pocas visitas en las oficinas del michoacano: primero acudió el coordinador parlamentario de su partido, Héctor Larios; luego el subsecretario de Seguridad Pública federal, Miguel Angel Yunes, quien dijo que sólo concurrió a entregar un documento al coordinador Juan Camilo Mouriño y que no habló del tema Oaxaca.

Frente a las versiones que lo ubican como futuro titular de la dependencia, Yunes señaló que sólo fue a tratar "temas del presente, no del futuro".

La conversación entre Calderón y Aranda duró hora y media, y según el primero fue "muy provechosa", porque hicieron un repaso de los avances y de los obstáculos que habrá de enfrentar.

En su defensa del gobierno de Fox, el michoacano se declaró convencido de que según las cifras disponibles que abarcan hasta 2004 en los primeros años de la administración hubo "avances sustanciales" en reducción de la pobreza extrema en el país.

A pesar de ello, reconoció que la realidad es que en México "todavía muchísimos mexicanos, casi 20 millones", padecen condiciones de miseria que indignan, lastiman y ofenden a la sociedad entera. Esta cifra, aclaró, no considera otro tipo de pobreza que es catalogada por los especialistas.

En este intercambio de elogios con el foxismo, señaló que seguirá con el mismo "sentido y estrategia" de sus programas sociales, que consiste en ayudar a los más necesitados, no sólo por la vía del apoyo, sino ofreciéndoles oportunidades de empleo.

Luego retomó la bandera del ex candidato presidencial perredista Andrés Manuel López Obrador, al decir que el combate a la miseria es una de las tres prioridades de su gobierno y se encuentra entre los "principales y verdaderos enemigos de México".

Más allá de ideologías o de colores partidistas, ofreció que su administración dará respuesta a las demandas de equidad social.

Se quejó de que la atención al problema de la desigualdad en las condiciones de bienestar y distribución del ingreso de la población ha sido postergada muchísimas veces en función de otros objetivos.

Según Calderón, la lucha contra la pobreza y la marginación es un imperativo ético y político; un imperativo social que llevará su gobierno a lo largo de los seis años de la próxima administración.

Pero señaló que éste es un buen momento para analizar a fondo los programas públicos, con el propósito de dedicar fondos a los "verdaderamente exitosos", como Oportunidades, y revisar otros para evitar duplicidades.

Al explicar los principios que seguirá su política social, puntualizó que buscará vincular la política económica con la social para romper causas estructurales de miseria en el país.

La economía debe generar condiciones para repartir los recursos, pero señaló que eso no es suficiente y se requiere "la acción rectora y rectificadora del Estado" para corregir las terribles desigualdades que se viven en México.

Luego Aranda se regodeó de que el combate a la pobreza ha sido tarea fundamental de esta administración, no fruto de las ocurrencias del mandatario en turno y sí de un consenso conseguido en la Cámara de Diputados y en el Senado con la Ley General de Desarrollo Social.

Informó que le recomendó a Calderón tener una visión de "largo plazo", y precisó que para ello entregará una "carta de navegación" al gabinete entrante, con información de los obstáculos en los retos por venir.

La siguiente administración tiene que hacer un esfuerzo más grande para los programas de combate a la pobreza "vayan muy de la mano" con estrategias que mejoren el ingreso de las familias.

Vázquez Mota presentará primero la agenda legislativa

Hoy Calderón hará pública la agenda que impulsará en el Congreso de la Unión y que se enfocará en tres asuntos prioritarios: pobreza, combate a la inseguridad y empleo.

La presentación podría verse deslucida, porque Josefina Vázquez Mota se adelantará al discurso de Calderón y a las ocho de la mañana acudirá al Comité Ejecutivo Nacional del PAN a entregar y explicar el documento a los integrantes de la dirigencia del partido. El presidente electo hará lo propio al mediodía.

En el documento Temas legislativos para la agenda nacional, Calderón repite sus propuestas de campaña, como la disminución del número de legisladores y la reducción del financiamiento a los partidos políticos, y se apoya en los programas foxistas al plantear el establecimiento de un sistema único de salud al estilo del Seguro Popular.

Sólo los dirigentes del PRI y de los partidos Verde Ecologista de México, Alianza Socialdemócrata y Campesina y Nueva Alianza recibirán a Vázquez Mota, quien acudirá a lo largo del día a las distintas sedes partidarias para entregar el documento.

Hasta anoche, la ex secretaria de Desarrollo Social no tenía agendada ninguna cita con el Frente Amplio Popular (integrado por PRD, PT y Convergencia).