Usted está aquí: lunes 4 de agosto de 2008 Espectáculos Si mi celebridad ayuda, puedo ser portavoz, dice Annie Lennox

■ La cantante escosesa visitó el Censida en Anenecuilco, uno de los dos que hay en Morelos

Si mi celebridad ayuda, puedo ser portavoz, dice Annie Lennox

■ Allí donde los gobiernos han fallado, las ONG entran, asegura la embajadora de Oxfam

■ “Parte de mi deber es despertar a las personas para que vean que, como individuos, tienen poder”

Tania Molina Ramírez (Enviada)

Ampliar la imagen Annie Lennox durante una plática con una paciente en el Censida Annie Lennox durante una plática con una paciente en el Censida Foto: Nick Fletcher

Anenecuilco, Mor., 3 de agosto. La cantante escocesa Annie Lennox, una de las fundamentales artistas y activistas en torno al tema del VIH/sida, se quedó impresionada muy favorablemente con lo que pudo atestiguar de las instalaciones de Censida.

“Esto es un fantástico modelo que necesita ser reproducido en todos los pueblos de América Latina y en general en todo el mundo”, dijo Lennox al visitar este domingo la unidad médica especializada Capacits, del Censida, en este pueblo.

Annie Lennox se ha vuelto una de las celebridades más comprometidas en la lucha por los derechos de los pacientes de VIH/sida. Tiene su propia campaña, SING, que, según contó a La Jornada, busca sobre todo atacar el estigma en torno al virus de inmunodeficiencia adquirida.

“Allí donde los gobiernos han fallado, las ONG entran, y luego tienes que llamar a la sociedad civil para que apoye a estas extraordinarias organizaciones. Parte de mi deber es despertar a la gente para que vea que cada quien, como individuo, tiene poder”, siguió.

En Morelos hay dos centros, uno en Cuernavaca y otro aquí, el cual da servicio sobre todo a la mancha urbana de Cuautla y sus alrededores. En total atiende a 142 personas, 91 hombres.

Mientras recorría las instalaciones, el cuarto de citología, el almacén donde guardan la medicina, la habitación para depositar el material contaminado, el consultorio médico, asentía con la cabeza, hacía el gesto de perfecto, con los dedos. Se sorprendió que hubiera, inclusive, consultorio dental.

Un sitio integral, que todos deberían tener

“Me gusta mucho que todo está en un mismo lugar. Es muy impresionante. Tráiganlo a África, esto es lo que queremos ver.”

Tomó a esta reportera del brazo, la miró a los ojos y dijo: “escucha, esto es importante que se sepa: todo pueblo debería tener esto, que cada aspecto sea considerado. Está integrado… ¡es magnífico!”

En entrevista, señaló que creía que “la única solución real sería una vacuna, pero por el momento buscamos diferentes maneras de acercarnos (al problema)”.

La artista se ve a sí misma como “un puente entre la comunidad de las ONG y los medios de comunicación. En la cultura occidental están muy interesados en la celebridad. Si mi ligera celebridad ayuda, hay valor en ello”.

Y siguió: “Estoy profundamente ofendida por la cultura en la que vivimos, con los medios de comunicación incluidos, porque veo que se enfocan en pendejadas, cuando tenemos a millones de personas sufriendo de pobreza endémica, enfermedad, víctimas inocentes afectadas por bombas que les tiran encima”.

Más adelante afirmó que “como mujer, como madre, creo en el sagrado derecho de tener acceso a servicios de salud, y a que el niño tenga acceso a tratamiento. ¿Por qué no estamos enfrascados en este diálogo? ¿Qué nos pasó que lo relegamos hasta las últimas planas? La verdad es que millones de mujeres son afectadas por esta enfermedad y el estigma del silencio que las fuerza a mantenerlo oculto es parte del problema.

“Estoy en un lugar de poder, tengo éxito, puedo ser usada como portavoz para mis hermanas del otro lado del mundo.”

Muy cuidadosa y atenta con su alrededor, lo primero que hizo fue pedirle a su traductora que le ofreciera una disculpa a una enferma de sida que iba a platicar con ella “por la intromisión” (en la sala de espera donde estaba la mujer, de pronto había cámaras, gente rodeándola).

El doctor Alfonso Alcalá, coordinador del programa VIH/sida en Morelos, le explicó que en octubre van a poner en marcha un nuevo método para la detección del VIH/sida, que usa la saliva. Ella se mostró muy impresionada.

Lennox es embajadora de Oxfam y, como tal, está en México para participar en la 17 Conferencia Internacional sobre el VIH/sida.

Facilitar acceso a tratamientos

La posición de Oxfam se centra en torno de lo siguiente: en 2005, el Grupo de los 8 (G8) se comprometió en “facilitar el acceso universal a los tratamientos de prevención, paliativos y cuidados del VIH y el sida para 2010”, pero con esa fecha “a la vuelta de la esquina, parece difícil que se pueda conseguir. Los países en desarrollo continúan con insuficiente financiamiento para los tratamientos del VIH y el sida; los sistemas sanitarios tampoco cuentan con suficientes fondos y sufren la falta de personal y la descoordinación; el acceso a medicamentos asequibles está nuevamente en jaque por los países ricos y la industria farmacéutica multinacional.

“El hecho de volver a comprometerse en conseguir un acceso universal a los tratamientos no se debe considerar un éxito de la Conferencia Internacional sobre el sida, ésta debe hacer una evaluación crítica de los éxitos y fracasos e instar a los líderes mundiales a que tomen cartas en el asunto urgentemente.”

La cantante estaba interesada, sobre todo, en platicar con las mujeres que atiende el centro. Se encerró con su equipo a hablar con una de ellas, que no quiso ser identificada porque “mi compañero me corre de la casa”. Y es que él no sabe que ella tiene VIH/sida. (“El señor ya no tiene deseos conmigo y desde que estoy enferma, hace cinco años, yo tampoco.”) Le dijo a La Jornada que ejercía “una vida galante” y que un hombre le ofreció que en vez de regresarle un dinero que ella le debía, que se acostara con él y la contagió. Manifestó sentirse muy contenta de poder contar su historia, porque no tiene con quién hablar. O sea, justo por lo que lucha Lennox: contra el silencio que causa el estigma. La mujer de 60 años pidió a sus congéneres no cometer el error de no protegerse.

Más tarde, la artista fue a visitar a otra mujer infectada.

Lennox estuvo en la unidad de salud, que abrió en octubre de 2006, con la doctora Maricarmen Jiménez, encargada del centro; el doctor Alfonso Alcalá; integrantes de Oxfam y de Salud Integral para la Mujer AC (Sipam), entre ellas Axela Romero, directora de esta última organización, fundamental y activa en Querétaro, Oaxaca, Guerrero, Tlaxcala, Disrito Federal, además de Morelos. También lleva a cabo encuentros estatales y participa en el comité de VIH/sida de Capacits.

Esta semana, Annie Lennox participará en la conferencia. También tiene programado estar en la marcha del martes y se reunirá con diputados en el Congreso de la Unión.

 
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