Se “supedita” al nivel económico el ingreso a las universidades
Villahermosa, Tab., 9 de septiembre. La Secretaría de Educación Pública (SEP) reconoció que no se han podido contrarrestar las brechas en el acceso a educación superior en el país, que se supedita al nivel socioeconómico de los estudiantes, pues mientras cinco de cada 100 jóvenes de familias de ingresos bajos accede a la universidad, en las clases altas la cifra es de 60 por cada 100, aseguró el subsecretario de Educación Superior, Rodolfo Tuirán.
En conferencia de prensa dio a conocer los resultados de la 13 reunión plenaria del Consejo Nacional de Autoridades Educativas (Conaedu), entre los que destaca que 24 entidades solicitarán a la Cámara de Diputados un aumento de al menos mil millones de pesos para saldar salarios y gastos de operación en el nivel básico y formación normal operados por el Fondo de Aportaciones para la Educación Básica y Normal.
En ese contexto, el funcionario consideró que la desigualdad en el acceso a la educación superior es un problema multifactorial que no sólo tiene que ver con la oferta, sino con las características familiares y de grupos para el apoyo a los estudiantes, y porque en muchos sectores se dificulta hasta el acceso físico a ese nivel, por lo que resaltó la necesidad de “fortalecer su ingreso y permanencia”.
Aceptó –como resaltó ayer la OCDE en su informe sobre educación– que México es uno de los países que menos destina a ese rubro. “Lo que necesitamos no es invertir más, sino utilizar mejor los recursos, lo que supone hacer un esfuerzo no sólo para ampliar la cobertura, sino para mejorar la calidad y la pertinencia en la educación”.