■ La estrategia sólo servirá para paliar la difícil situación si se aplica ya, señala la IP

El plan anticrisis de Calderón es insuficiente, advierten especialistas

■ Calculan analistas que el crecimiento económico será apenas de 0.5 por ciento durante 2009

Miriam Posada y Erika Duarte

El programa anticrisis anunciado por el presidente Felipe Calderón Hinojosa es “insuficiente, demagógico y un refrito de otras estrategias ya anunciadas”, por lo que no ayudará a mitigar los efectos de la recesión de la economía de las familias mexicanas, señalaron especialistas, quienes urgieron al gobierno federal a aplicar como primera medida de emergencia una reducción de 300 mil millones de pesos en el gasto, y advirtieron sobre el riesgo de quiebra del sistema financiero mexicano.

Por separado, los líderes de los organismos afiliados al Consejo Coordinador Empresarial (CCE) consideraron positivo el mensaje presidencial ante el ambiente de incertidumbre que priva, pero señalaron que no contiene novedades, ya que se trata de programas anunciados desde la primavera pasada.

El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Ricardo González Sada, tomó con reservas las medidas contracíclicas, “porque son proyectos que ya se conocían y que se han tardado en poner en marcha”. Señaló que es preocupante que el gobierno tenga planes de postergar la realización de obras de infraestructura y advirtió que el país requiere “poner en marcha la maquinaria de inversión en el mercado interno”.

Luego de la reunión semanal del CCE en el Club de Industriales, el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Ismael Plascencia, dijo que el plan del Ejecutivo ayudará a mitigar la crisis sólo si se aplica de inmediato, y puso en duda que en 2009 se alcance la meta de crecimiento de 1.8 prevista por la Secretaría de Hacienda.

Mientras, el presidente del CCE, Armando Paredes, y el del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios (CMHN), Claudio X. González, señalaron que las medidas de desregulación anunciadas son fundamentales para hacer más competitivas a las empresas mexicanas e impulsar los proyectos de infraestructura.

Por su lado, Mario di Costanzo, asesor del equipo de Andrés Manuel López Obrador, manifestó que el anuncio de Calderón Hinojosa “es absolutamente insuficiente”, ya que no especificó de dónde van a salir los recursos para financiar los proyectos de infraestructura y ni por asomo planteó una reducción del gasto.

Criticó que de los 53 mil millones de pesos que se anunciaron para infraestructura, por lo menos 10 mil millones correspondan a recursos anunciados en 2007 para el desarrollo de carreteras, y que se mantenga un subejercicio de por lo menos 30 mil millones de pesos en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), el sector salud y educación. “Lo que buscan es tomar los recursos del subejercicio y trasladarlos al año próximo”, apuntó.

Asimismo, indicó que la subasta de reservas es una estrategia equivocada para sostener el tipo de cambio: “Son recursos que se deberían estar dedicando al desarrollo de infraestructura. Se requiere una bolsa de entre 200 mil y 300 mil millones de pesos para atender el campo, el sector energía y la inversión en infraestructura educativa. Se necesita una reforma fiscal que dé solidez a las finanzas públicas, combatir los monopolios y reducir el gasto superfluo”.

En coincidencia, el economista Rogelio Ramírez de la O subrayó que si hubiera disposición para hacer un verdadero esfuerzo, el gobierno debería reducir su gasto al menos en 300 mil millones de pesos, y consideró que el anuncio de Felipe Calderón “es una copia, por lo menos conceptual, de lo que ayer por la mañana sugirió Andrés Manuel López Obrador, pero sin reconocer la necesidad de la austeridad en el gasto público cuando le están pidiendo a la gente que cuide su economía y el uso de tarjetas de crédito sin que ellos den un tijeretazo”.

Consideró que el anuncio presidencial es infortunado, porque no se hizo a tiempo para conectarse con la población y tampoco llegara a la “supermicroeconomía”; se trata, añadió, de un programa “detrás de la curva respecto de la dirección que tienen los acontecimientos”.

Ambos analistas coincidieron en que al finalizar 2008 habrá una importante tasa de desempleo debido a que el país no crecerá lo suficiente. Di Costanzo estimó que en 2009 el crecimiento económico será de apenas 0.5 por ciento, mientras el desempleo crecerá por lo menos 5.5 puntos.

Anticipó que no habrá suficientes recursos para apoyar a las pequeñas y medianas empresas, y aseguró que Calderón mintió al afirmar que los bancos en México siguen financiando: “lo tienen prohibido”.

El especialista advirtió que existe un riesgo real de que el sistema financiero en México quiebre debido a que en realidad se trata de bancos extranjeros que durante el segundo trimestre del año reportaron pérdidas de operación y aumentaron sus carteras vencidas.