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Más de un millar de trabajos participaron en el concurso De la vista nace el artista

Sorprendente reinterpretación de niños y adolescentes a obras de Zalce y Varo

Toparse con esto habría fascinado a mi padre, porque él sufrió mucho por su vocación, dice Beatriz Zalce a La Jornada

Prepara publicación de dos libretas de apuntes del muralista

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Dos de los 120 dibujos de niños y adolescentes que fueron seleccionados, cuya premiación se realizará hoy en Morelia
 
Periódico La Jornada
Sábado 16 de mayo de 2009, p. 5

A los dos o tres años de edad, Alfredo Zalce dibujaba la caricatura de Francisco I. Madero. Hoy niños de cuatro años ofrecen una nueva mirada a la obra del artista en el concurso De la vista nace el artista, cuya convocatoria se lanzó el año pasado para conmemorar el centenario del muralista. Junto a Zalce, la obra de otra de las grandes de la pintura, Remedios Varo.

En este sexto Concurso Virtual Nacional de Pintura Infantil se presentaron mil 36 trabajos divididos en tres categorías: niños de cuatro a siete años; de ocho a 12 y adolescentes de 13 a 16 años.

De los trabajos recibidos se seleccionaron unos 120 dibujos y sus autores serán premiados este sábado en una ceremonia que se realizará a las 12:30 horas en el Centro Cultural Clavijero, ubicado en el centro Morelia. Los nombres de los niños cuya obra fue seleccionada puede consultarse en la página electrónica www.artenautas.gob.mx

Pase de estafeta

Este tipo de concursos son excelentes para acercar los artistas a los niños, que son muy creativos. Para ellos es natural dibujar, algo espontáneo; están como esponjitas, y ponerles artistas para que los vean, estudien y hagan una reinterpretación de la obra es muy interesante. Te encuentras resultados maravillosos, dijo Beatriz Zalce –hija del artista michoacano fallecido en 2003–, quien fue jurado del concurso junto con el investigador Iñaki Herranz y el ilustrador Juan Gedovius.

No sé qué habría dado mi padre por ver lo que hicieron los niños, agregó Beatriz en entrevista con La Jornada. “Le habría fascinado toparse con esto porque cuando era niño sufrió mucho por su vocación. Me contaba que entre las primeras cosas que había dibujado estaba la caricatura de Francisco I. Madero.

“Mi padre nació en 1908 y dos años después Madero estaba en el candelero y mi papá dibujaba garabatos. Decía que Madero era muy fácil: ‘hacías un círculo y era la cara; dos puntos y eran los ojos, un garabatito y era el bigote, y ahí te va tu retrato de Madero’.

Un poquito más grande, cuando ya vivía en la ciudad de México, tenían una casa con un patio con piso de mosaicos blancos y negros, como de ajedrez; entonces se le ocurrió hacer dibujos en los mosaicos blancos. Cuando llegó su madre le puso una regañiza y después su padrastro le acomodó una tunda. Mi papá siempre decía que si a él un niño le hubiera hecho ese regalo habría sido feliz.

Lo que sorprende, añade Beatriz, es esta reinterpretación que hacen los niños sobre todo ahora que son hijos de la televisión, Internet y los videojuegos. Con este tipo de concursos “se les enseña a mirar y decir. Curiosamente los más chavitos eran los más creativos, los de cuatro años; en cambio los mayorcitos, los que están en la edad de la punzada, se vuelven copistas, algunos extraordinarios.

Ser copista es un oficio también dentro de las artes plásticas. Tiene su chiste, no es la fotocopia, es lo volví a hacer. Ahí necesitas un buen dibujante, un buen observador, tiene mucho mérito. Los más grandes se preocupan porque les quede bonito, pero eso les vale a los chiquitos porque hagan lo que hagan siempre los verán bonitos.

Las obras más frecuentes fueron Centinela, El Paricutín y Cabeza en amarillo, de Zalce; y La fuga y Tránsito en espiral, de Remedios Varo.

Con los trabajos presentados en la convocatoria te das cuenta de que hay un muy buen diálogo entre Zalce, Varo y los chavitos.

Además, agrega, que se haya hecho con motivo del centenario de don Alfredo significa pasar la estafeta a los niños, a las nuevas generaciones. Son artistas de cuatro años, pero no escribes artistas con letras chiquitas: la talla la da el talento: ojalá que la edad no les quite ese talento y la frescura.

Diarios gráficos

Y mientras los niños miran de nuevo la obra del muralista y Remedios Varo, Beatriz Zalce prepara para este año la publicación de dos de las libretas de apuntes de su padre. Son diarios gráficos en los que se ve cómo pasa de un tema a otro, cómo llega a un cuadro pero lo va trabajando y ves las diferentes etapas, se vuelve algo muy interesante. Tengo varios de esos cuadernos; este año salen dos y el año que entra otros dos. El chiste de estas libretas es poner a Zalce en contacto con la gente. Tienen un valor estético tanto para el neófito como para otro pintor, como para el que quiere comenzar a pintar y dibujar. Muchos me decían que cuando iban a casa de mi padre y veían las libretas apiladas en la cocina se morían de ganas de que se fuera al baño para poder ho-jearlas, se daban cuenta de que ahí había oro molido y su publicación es compartirlo. Finalmente eso es lo que hay que hacer con un artista como Zalce y con un padre como el mío.