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Fueron emboscados por hombres armados con fusiles en la comunidad de El Capadero

Asesinan a regidor perredista y a 11 más cuando se dirigían a votar en Guerrero

Se trata de un crimen político, afirma dirigente local del PRD; hay más heridos graves, afirma

Corresponsales
Periódico La Jornada
Lunes 6 de julio de 2009, p. 22

Acapulco, Gro., 5 de julio. Sujetos armados con fusiles y escopetas mataron a 12 integrantes de dos familias –entre ellos el regidor perredista Macario Rivera Lozano y dos de sus hermanos– cuando se dirigían a votar y recorrían el camino entre la comunidad de El Capadero (donde residían) y la de Quirinducua, municipio de Coahuayutla, en la región guerrerense de la Costa Grande.

El saldo inicial de muertos fue de 10, pero después aumentó a 12 debido al fallecimiento de dos heridos graves, cuyo número se calcula entre dos y cinco.

El líder estatal del PRD, Misael Medrano Baza, indicó que entre las víctimas se cuentan al regidor Macario Rivera Lozano, sus hermanos Pedro y Carlos; así como Marcelo Rivera Martínez, su esposa Beatriz Romero, su suegra Abigaíl Romero, sus primos Valente, Pascual y Ricardo Rivera Romero; así como Remedios Romero y dos personas de las que se desconocen sus datos.

El dirigente perredista explicó que el ataque fue perpetrado alrededor de las 11:00 horas, cuando los pistoleros emboscaron a las víctimas, que viajaban en una camioneta. Según un despacho de la agencia Notimex, el secretario de Seguridad Pública y Protección Civil de Guerrero, general retirado Juan Heriberto Salinas Altés, indicó que el grupo atacante provenía de Michoacán y descartó que el hecho esté relacionado con la jornada electoral.

El funcionario y el director de la policía investigadora ministerial, Erit Montúfar Mendoza, indicaron que el número preliminar de muertos era de cuatro, cifra que resultaba difícil de confirmar dada la lejanía del sitio, a más de tres horas de la cabecera municipal de Coahuayutla (colindante con Zirándaro). Ambos afirmaron que elementos policiacos ya rastreaban las inmediaciones de la localidad en busca de los responsables.

Sin embargo, el dirigente perredista no dudó sobre el número de víctimas mortales e incluso adelantó que podía incrementarse debido a que aún hay heridos graves internados en un hospital de Churumusco, Michoacán.

El dirigente repudió el baño de sangre y lo relacionó con la elección federal, ya que las víctimas “iban a votar a la casilla 139 en favor de su candidato por el distrito 03, Armando Ríos Piter.

Los compañeros eran miembros de dos familias que militan en nuestro partido; es un crimen político, una masacre cometida con alevosía y ventaja, exclamó Medrano Baza vía telefónica. Por su parte, el dirigente estatal del PRI, Marco Antonio Leyva Mena, repudió el multihomicidio y sostuvo que cuatro de las víctimas militaban en su partido.