Debido a que los virus cambian constantemente y se puede incrementar el potencial de transmisión y daño a la salud, todos los días se analizan muestras de agentes causantes de dengue, tuberculosis, sida e, incluso, amenazas de bioterrorismo de tres o cuatro sobres al año, los cuales se reportan como sospechosos de contener antrax, aseguró Celia Alpuche, directora del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (Indre), de la Secretaría de Salud (Ssa).

Resaltó la importancia de contar con un laboratorio de bioseguridad nivel 3 (BSL 3), como el que empezará a funcionar en tres semanas en el Indre, en el que se podrá ampliar la capacidad de estudio del país y analizar 30 muestras cada día de males causados por virus o bacterias de alto riesgo para la salud de personas y animales.

Con la nueva infraestructura, se podrán realizar cultivos de virus y, eventualmente, obtener antígenos para la elaboración de vacunas.

En conferencia de prensa, la funcionaria explicó que la remodelación del área de 90 metros cuadrados que ocupa el laboratorio tuvo un costo de 12 millones de pesos, monto que incluye la compra del equipo. Lo que en adelante tendrá que contemplarse en el presupuesto que se asigne al Indre será un millón de pesos anuales para el mantenimiento de las instalaciones.

Aunque por las limitaciones del espacio físico, sólo podrán trabajar dos personas al mismo tiempo en el laboratorio, representa el paso previo a la renovación del Indre, cuyas nuevas instalaciones están en proceso de construcción. Contará con mil 200 metros cuadrados de extension, de los que 700 se destinarán a áreas de bioseguridad nivel 3 para el procesamiento de alrededor de tres mil muestras por día.

El costo de la inversión asciende a 800 millones de pesos, de los cuales ya se ejercieron 270 millones. En 2010 están disponibles otros 199 millones de pesos y, de acuerdo con el proyecto, para concluirlo en 2011 se requerirán 441 millones de pesos más.

Alpuche destacó la importancia de contar con instalaciones de este tipo ante el riesgo de que surjan nuevas amenazas a la salud, como la pandemia de influenza o las generadas por el bioterrorismo.

Dijo que aunque se trate de enfermedades conocidas en el país, endémicas algunas, como el dengue, es indispensable mantener constante vigilancia de laboratorio.

Se sabe, explicó, que los virus están en constantes mutaciones que podrían traducirse en enfermedades más agresivas o en el desarrollo de resistencia a los medicamentos. Por eso la importancia de vigilar de manera constante el comportamiento de padecimientos como tuberculosis, sida, tularemia, fiebre hemorrágica y brucelosis.

La directora del Indre mencionó que se incluirán análisis de muestras del virus de influenza aviar H5N1.

El laboratorio BSL 3 forma parte de las acciones previstas en el Plan Nacional de Bioseguridad; cuenta con la certificación de los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) de Atlanta y también responde a los compromisos adquiridos por México en 2003 en el Plan de América del Norte de Influenza Aviar y pandémica.