El miércoles pasado, Margaret Chan fue electa para un segundo periodo al frente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), motivo por el cual el presidente Felipe Calderón le envió una felicitación.

Le expresó el compromiso de México de continuar con el apoyo a la organización con el fortalecimiento de la respuesta ante situaciones de emergencia, así como para atender el desafío que representan las enfermedades no transmisibles como diabetes, obesidad e hipertensión arterial.

En una misiva, Calderón manifestó a Chan que bajo su liderazgo la OMS continuará su consolidación como organismo de vanguardia para responder a los retos que enfrenta la salud pública internacional.

El segundo periodo de la funcionaria abarcará otros cinco años y se inicia el próximo primero de julio. En su discurso de aceptación ante los ministros de salud que participaron en la Asamblea Mundial de Salud, efectuada la semana que terminó, en Ginebra, reiteró su compromiso de mejorar la salud de los más vulnerables.

En mi opinión, la cobertura universal es el concepto más robusto que la salud pública puede ofrecer. Es un poderoso igualador y representa la mejor manera de consolidar los adelantos logrados en la década precedente.

Ángeles Cruz