Sociedad y Justicia
Ver día anteriorDomingo 29 de julio de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Uno de los puntos principales será el combate al sobrepeso y la obesidad en esa población

Emprenden programa de promoción de la salud dirigido a los niños

Plantea visitar 250 puntos en el país y ofrecer servicios médicos de prevención a 50 mil menores

Foto
El sobrepeso es uno de los problemas que afectan de manera importante la salud de los mexicanosFoto María Luisa Severiano
 
Periódico La Jornada
Domingo 29 de julio de 2012, p. 33

El combate al sobrepeso y la obesidad que afectan a los mexicanos requiere del trabajo conjunto entre el gobierno y la iniciativa privada, señaló el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Pablo Kuri Morales, al poner en marcha el programa Recorrido por la Salud Kids, el cual es financiado por empresas de laboratorios clínicos y farmacéuticos.

En esta que es la segunda etapa del proyecto, se planea visitar 250 puntos del país y ofrecer servicios médicos de prevención a 50 mil niños. De manera lúdica se les proporciona información sobre el cuidado de su salud y se les realizan mediciones de presión arterial, glucosa, talla, peso y revisión dental. Los resultados se entregan a los padres de familia, explicó el funcionario.

La estrategia forma parte de las acciones que realiza el gobierno federal para disminuir el sobrepeso y la obesidad en el país, problema presente en 26 por ciento de los niños de cinco a 11 años de edad, con lo que México ocupa el segundo lugar mundial en el tema.

Kuri Morales explicó que como parte del Acuerdo Nacional de Salud Alimentaria, se iniciará la tercera fase con los lineamientos sobre las porciones que deben contener los alimentos industrializados.

En el caso de los refrescos, el funcionario dijo que su consumo no está recomendado, por la alta cantidad de azúcar que contienen. En su lugar, las personas –niños y adultos– deben optar por el agua simple, y si se trata de jugos, también se debe observar el tamaño de porción recomendada, a fin de no incurrir en excesos.

Información de la Secretaría de Salud (Ssa) indica sobre el tema que el consumo de azúcar en el país es de de casi 48 kilogramos por persona, lo que es más del doble del promedio mundial, mientras que el consumo de bebidas azucaradas representa 22.3 por ciento de la ingesta calórica de los adultos mexicanos; el resto, 77.7 por ciento, proviene del consumo de alimentos sólidos.

A esto se suma la escasa actividad física de las personas. Los datos más recientes indican que sólo 35 por ciento de los individuos de entre 10 y 19 años de edad hacen ejercicio. Más de la mitad de este sector de la población pasa 14 horas a la semana, o más, frente a la televisión, y una cuarta parte de ellos pasa hasta tres horas diarias. Entre los adolescentes y adultos jóvenes (de 12 a 29 años de edad) sólo 40 por ciento practica algún tipo de actividad física.

El Recorrido por la Salud Kids se inició ayer en el deportivo Mundet y durante los siguientes meses se trasladará a otras entidades de la República, donde las personas podrán participar de manera gratuita.

Realiza la UNAM estudios sobre fisiología de la obesidad

La obesidad no sólo provoca infartos cardiacos y enfermedades degenerativas como la diabetes, sino además desajusta el reloj biológico, responsable de procesos como la regulación del sueño y la vigilia, o acelera la función del metabolismo si se come de día, o alentarla si se hace de noche, señaló Manuel Miranda Anaya, investigador de la Unidad Multidisciplinaria de Docencia e Investigación del campus Juriquilla, Querétaro, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Por medio de experimentos con ratones de los volcanes (Neotomodon alstoni) –especie tendiente a desarrollar obesidad–, el científico estudia la forma en que esta condición altera la capacidad natural del reloj biológico o circadiano que rige buena parte de la vida cotidiana, informó la máxima casa de estudios.

Este animal es un modelo natural en el que la obesidad se desarrolla de manera diferencial, es decir, unos individuos sí y otros no, y afecta más a las hembras. Al darles alimento sin límite, los obesos modificaron la organización de la actividad circadiana a lo largo del día, lo que afectó su patrón de sueño, explicó Miranda.

Como resultado de sus análisis, realizados durante los últimos cuatro años, encontró que las hembras obesas aumentaron, en mayor cantidad que los machos, las concentraciones circulantes de insulina y leptina, dos hormonas participantes en la regulación del metabolismo.

El objetivo principal del estudio, dijo, es comprender cómo el reloj biológico y el conjunto de ritmos circadianos se desajustan en un estado como la obesidad, ya que dejar de dormir ordenadamente favorece conductas como comer de noche, fase en la que el metabolismo es lento.