La selección sub 15 de Argentina se coronó en la segunda edición de la Copa de Naciones, tras vencer 1-0 a su similar de Uruguay con gol de Tomás Conechny, en duelo desarrollado en el Estadio Azteca.

Luego de 31 minutos de un intenso duelo en el que ambos conjuntos disputaban el campeonato de dicho certamen, Conechny se impuso ante el arquero rival tras quitarse a un defensa uruguayo y lanzar el disparo que daría el triunfo a la albiceleste.

El plantel argentino logró dominar la presión y mantener el marcador a su favor hasta el final del encuentro, incluso en los últimos minutos cuando los charrúas comenzaron a atacar con mayor destreza en busca de remontar el resultado.

El timonel de Argentina, Miguel Lemme, dijo sentirse contento con el triunfo no sólo porque se coronaron en este certamen, sino también porque consiguieron el triunfo en el mismo lugar donde Diego Armando Maradona logró convertirse campeón en el Mundial de México 1986.

Quiero decirles que estoy muy contento, orgulloso de los chicos, porque trabajamos sólo un mes, y jugaron como si hubiéramos estado juntos un año. A nivel personal es un orgullo haber salido campeón acá en el Azteca, apuntó Lemme.

Previo a la final, Estados Unidos y Paraguay se enfrentaron por el tercer puesto en la misma cancha del recinto de Santa Úrsula, donde la escuadra de las barras y las estrellas se impuso en tanda de penales con marcador 10-9, luego de haber empatado 3-3 en tiempo regular.

Al término de la final, se reconoció al uruguayo Diego Rossi como el mejor jugador, delantero que en seis partidos anotó tres goles, mientras que el mejor arquero fue el argentino Franco Petroli, quien en cuatro de los seis duelos únicamente recibió un gol en tiempo regular.

El estadunidense Joe Gallardo fue el máximo anotador de la Copa tras concretar seis goles; cinco en la fase de grupos y uno en el partido de cuartos de final.

Cabe mencionar que la selección mexicana, que fue eliminada en la fase de grupos tras quedar en el tercer puesto del sector A, no se fue con las manos vacías, pues se llevó el reconocimiento por juego limpio.