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Apagones en Cabo San Lucas y Todos Santos; derrumbes en la carretera Transpeninsular

BCS: un muerto y 1,120 personas en albergues por la tormenta Juliette

El meteoro se aleja, pero seguirá provocando aguaceros

Desalojan a 100 por la crecida de un arroyo en Sinaloa

Se desborda la barra de Coyuca de Benítez; 250 familias damnificadas

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Corte en la carretera Transpeninsular Benito Juárez, en Baja California Sur, ocasionado por la tormenta IvoFoto Carlos Godínez León
Corresponsales
Periódico La Jornada
Viernes 30 de agosto de 2013, p. 27

Una persona muerta, 920 albergadas en el municipio de Los Cabos y 100 en La Paz, además de cortes de energía eléctrica en colonias de Cabo San Lucas y Todos Santos, cierre de cuatro puertos, deslaves y derrumbes en la carretera Transpeninsular Benito Juárez son las afectaciones que ha causado la tormenta tropical Juliette en Baja California Sur, reportó el Consejo Estatal de Protección Civil.

Carlos Enríquez, director de la Unidad Estatal de Protección Civil, informó que una persona pereció electrocutada en la colonia El Progreso de Cabo San Lucas, mientras el secretario general de Los Cabos, Jesús Druk González, precisó que 800 personas en Cabo San Lucas y 120 en San José del Cabo se refugiaron desde la tarde del miércoles en albergues.

La Secretaría de Comunicaciones y Transportes informó que los puertos de La Paz y Los Cabos, cerrados el miércoles a la navegación, reabrieron este jueves, pero permanecían sin actividad los de San José del Cabo, Los Barriles, Loreto y Puerto San Carlos. La tormenta no afectó las operaciones de los aeropuertos internacionales de San José del Cabo, La Paz y Loreto, ni del aeródromo de Cabo San Lucas.

Esthela Ponce Beltrán, presidenta municipal de La Paz, reportó que 100 personas acudieron a refugios en Todos Santos, 50 kilómetros al sur de la capital.

La Comisión Federal de Electricidad informó que los cortes provocados por la tormenta en Los Cabos fueron reparados horas después, pero en Todos Santos, donde resultaron afectados unos 3 mil 400 usuarios, continuaban los trabajos para restablecer el servicio.

Israel Camacho Gastélum, delegado de la Comisión Nacional del Agua, dijo que aunque Juliette se dirigía hacia el Océano Pacífico, sus bandas nubosas continuarían provocando lluvias en el sur de la península.

Juliette es la segunda tormenta tropical que afecta a Baja California Sur en menos de una semana. La otra fue Ivo, que causó daños en la infraestructura carretera y urbana de los municipios de Comondú y Loreto, los cuales fueron declarados zona de desastre por la Secretaría de Gobernación.

En Sinaloa, el paso de Juliette provocó lluvias fuertes y moderadas, sobre todo en la costa. En el municipio de Guasave un centenar de personas fueron desalojadas ante la crecida del arroyo Cuatro Vientos, que inundó alrededor de 20 viviendas. Las familias fueron llevadas a escuelas y al ayuntamiento.

En Guerrero, más de 250 familias y 19 cooperativas pesqueras resultaron afectadas por el desbordamiento de la barra de Coyuca de Benítez, en el municipio del mismo nombre, informó Constantino González Vargas, subsecretario de Protección Civil estatal.

Habitantes de comunidades ubicadas en el litoral de dicho municipio relataron que las lluvias desbordaron la laguna el martes por la mañana, hasta que la noche del miércoles la barra se abrió de manera natural.

Después de un recorrido, el alcalde Ramiro Ávila Morales señaló que se han identificado 400 damnificados, entre propietarios de casas habitación, locales comerciales y estanques para la cría de camarón, además de ganaderos y agricultores. Las comunidades más afectadas son San Nicolás de las Playas, Luces en el Mar, Los Mogotes, La Barra, El Embarcadero, Playa Azul y Zapote.

En el poblado El Embarcadero, el miércoles fue necesario usar canoas para transportarse. Este jueves, decenas de familias limpiaban sus viviendas entre lodo y arena mojada. En algunos lugares el agua alcanzó más de medio metro de altura.

Tenía años que el agua no subía así, casi un metro. La apertura de la barra fue tardía. Todos los cimientos de las casas están dañados, dijo un habitante.