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Putin reduce la tensión con Ucrania

Senado ruso prepara respuesta a posibles sanciones de EU y UE
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El canciller ruso Serguei Lavrov (extremo izquierdo) conversó ayer con el jefe de la diplomacia estadunidense, John Kerry (derecha) para tratar de estabilizar la situación entre Rusia y Ucrania. En París se llevaron a cabo negociaciones diplomáticas para poner fin a esta crisis. La postura rusa es que Kiev tiene que negociar no con Moscú, como sugiere Kerry, sino con las autoridades de las regiones ucranias del sur y del este que no reconocen al nuevo gobierno ucranioFoto Reuters
Corresponsal
Periódico La Jornada
Jueves 6 de marzo de 2014, p. 33

Moscú, 5 de marzo.

Ante sus colegas de Bielorrusia y Kazajstán, países con los que Rusia forma la Unión Aduanera que promueve el Kremlin para el espacio postsoviético, el presidente Vladimir Putin hizo este miércoles un nuevo gesto para reducir la tensión con Ucrania, mientras el senado ruso prepara un documento de respuesta a las posibles sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea.

En la reunión con Aleksandr Lukashenko y Nursultan Nazarbayev, en su residencia de Novo Ogoriovo, en las afueras de Moscú, Putin no volvió a criticar al gobierno ucranio ni a mencionar la posibilidad de usar el ejército en el vecino país y, en cambio, destacó la importancia de Ucrania como socio económico clave de la Unión Aduanera, al cual nos unen estrechos lazos industriales y comerciales.

Por eso, continuó, la situación extraordinaria que hay en Ucrania nos preocupa mucho. La economía ucrania atraviesa una crisis muy seria y puede tener consecuencias negativas en los mercados de la Unión Aduanera.

El mandatario ruso propuso pensar qué medidas es necesario tomar para proteger a los productores y exportadores de Rusia, Bielorrusia y Kazajstán y –agregó– desde luego tenemos que hacer todo lo que esté a nuestro alcance para ayudar a nuestros socios (ucranios) a salir de la difícil situación en que se encuentran.

Al mismo tiempo, el Consejo de la Federación, como se denomina el senado en Rusia, está elaborando un documento para responder a las posibles sanciones occidentales, acorde con la línea marcada por el titular del Kremlin de que, si se producen éstas, el daño sea recíproco.

En este sentido, los senadores realizan consultas con los expertos en derecho para determinar hasta qué punto es constitucional permitir al gobierno ruso confiscar los bienes, activos y cuentas de las compañías de Estados Unidos y Europa Occidental que operan en Rusia.

Si los países de Occidente y la Unión Europea adoptan sanciones contra Rusia por la situación en Ucrania y las acciones de nuestro país dirigidas en defensa de ciudadanos ucranios, aprobaremos las medidas pertinentes, advirtió hoy Andrei Klishas, presidente del comité de legislación constitucional del Consejo de la Federación.

Klishas, quien considera que las sanciones deben ser recíprocas, reconoció no estar seguro de que esa drástica medida contra las compañías occidentales en Rusia no viole la Constitución, pero –subrayó– de lo que no tenemos ninguna duda es que se corresponde con los estándares europeos, y recordó que la confiscación fue una de las condiciones de la Unión Europea para empezar a brindar ayuda a Chipre.

Se confirma la impresión de que se está dando prioridad a los contactos que pudieran desembocar en negociaciones para un arreglo político de la situación en Ucrania. Por primera vez desde que comenzó el actual periodo de tensión entre Rusia y Estados Unidos y la Unión Europea, hoy se reunieron para hablar de Ucrania los cancilleres de Rusia, Serguei Lavrov, y de Estados Unidos, John Kerry, en la residencia del embajador ruso en París.

La posición rusa es que Kiev tiene que negociar no con Moscú, como sugirió Kerry, sino con las autoridades de las regiones ucranias del sur y del este que no reconocen al nuevo gobierno ucranio.

El apoyo militar y financiero que presta Rusia sobre todo en Crimea es fundamental, aunque hoy de nueva cuenta el ministro de Defensa ruso, Serguei Shoigu, desmintió que haya militares rusos en la península fuera de los cuarteles de la Flota del Mar Negro.

Parece claro que los militares de ambos bandos tienen orden precisa de no usar las armas, a juzgar por lo que sucedió hoy cuando unos soldados rusos quisieron desalojar un cuartel ucranio y se agarraron a puñetazos con los custodios que no los dejaron entrar.

Más difícil será mantener bajo control a los radicales de ambos campos, que pueden encender la mecha de un conflicto mayor en cualquier momento. El enviado especial de la ONU, Robert Serry, tuvo que suspender este miércoles su misión en Crimea, cuando un grupo de hombres armados, de las autodefensas crimeas, rodearon su coche y exigieron que regresara al aeropuerto.

El nuevo gobierno ucranio recibió hoy la promesa de la Unión Europea de concederle un crédito por 15 mil millones de dólares para los próximos dos años, mientras los diputados de la Rada registraron un proyecto de ley que, lejos de contribuir a resolver los problemas, echa más leña al fuego y provoca un mayor malestar de Rusia.

Se trata de enmiendas que, de aprobarse, pondrían fin a la neutralidad de Ucrania como país no perteneciente a ningún bloque militar y asentarían la intención de incorporarse al espacio euroatlántico de seguridad y, a la postre, ingresar a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Por cuanto no lo han aprobado aún, como tampoco las mencionadas medidas de respuesta que podría adoptar el senado ruso, no se sabe si los diputados ucranios realmente se disponen a hacerlo o sólo quieren contar con un elemento más de presión para, tarde o temprano, negociar con Rusia.