Santiago, 10 de septiembre.

Dos artefactos explosivos de fabricación casera estallaron en menos de 24 horas en la ciudad chilena de Viña del Mar, una de las cuales causó lesiones leves a una mujer. Expertos en explosivos de Carabineros, la policía militarizada, acudieron de inmediato al lugar de los hechos, con apoyo de agentes civiles de la Policía de Investigaciones.

La noche del martes una trabajadora de aseo resultó con trauma acústico y heridas leves luego de que una bomba de ruido estalló en las afueras de un supermercado en la ciudad costera, 120 kilómetros al oeste de Santiago. Esta tarde estalló el segundo artefacto en Viña del Mar, en las inmediaciones de otro supermercado, sin dejar heridos.

El lunes pasado fue perpetrado un atentado con explosivos en una estación del metro en Santiago que causó 14 lesionados y encendió las alarmas en el gobierno de la socialista Michelle Bachelet. La mandataria llamó hoy a la unidad y advirtió que el atentado en esta capital tiene por objetivo desestabilizar el sistema democrático nacional.

La fiscalía solicitó ayuda internacional para avanzar en la identificación de los autores del bombazo del lunes. El jefe de la fiscalía Metropolitana del Sur, Raúl Guzmán,dijo que una de las líneas de investigación se enfoca en los grupos anarquistas.

Más de un centenar de explosiones de artefactos artesanales han sucedido en los últimos cinco años en Chile.

El influyente senador oficialista Jaime Quintana acusó que es posible que agentes provocadores de la dictadura pinochetista, infiltrados en los escasamente estructurados grupos anarquistas, estén tras los intentos de implantar el terrorismo en el país.

En otro orden, una veintena de asociaciones de militares activos y en retiro reivindicaron el golpe del 11 de septiembre de 1973 contra el presidente Salvador Allende.