La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) atrajo para su análisis un amparo promovido por el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana contra la sanción que impuso la extinta Comisión Federal de Competencia (CFC) –actualmente Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece)– a Petróleos Mexicanos, por presuntas prácticas monopólicas en el traslado de combustibles.

Este es el segundo caso que llega a la SCJN y que deberá resolver. Estos asuntos son considerados, señalaron funcionarios del Poder Judicial de la Federación, como trascendentes porque permitirán definir lo que debe entenderse como áreas estratégicas y los actos posteriores a la llamada venta de primera mano de gasolina y diesel.

En agosto de 2013, la CFC estableció que esa venta constituye práctica monopólica, multó a Pemex y Pemex Refinación con 653.2 millones de pesos y les ordenó suspender su realización.

La paraestatal y su filial defendieron el traslado de los combustibles por el sindicato, alegando que esta actividad forma parte de las actividades estratégicas reservadas al Estado, e interpusieron un amparo para combatir tanto la sanción como las facultades de la ahora Cofece.

La SCJN consideró que la resolución de este asunto permitirá definir lo que debe entenderse como áreas estratégicas, y los actos posteriores a la llamada venta de primera mano de gasolinas y diesel.

La sanción a Pemex y Pemex Refinación deriva de la denuncia que presentaron ante la CFC dos de sus fraquiciatarios, inconformes con el hecho de que Pemex condicionara la venta de gasolina y diesel a las estaciones de servicio del país.