Familiares de los heridos de Nochixtlán, Oaxaca, que son atendidos en el albergue Casa Xitla señalaron que el cuidado médico recibido de la Secretaría de Salud (Ssa) está muy lejos del primer nivel prometido por el gobierno federal.

A cuatro días de su estancia en la Ciudad de México solamente se ha instalado un consultorio médico móvil y hasta la tarde de este miércoles se esperaba la llegada de una unidad odontológica.

Familiares e integrantes de la coordinación de la Caravana de Heridos de Nochixtlán, lamentaron el poco tacto e interés gubernamental por atender de mejor manera a las personas que fueron heridas durante el desalojo policiaco del pasado 19 de junio, en el contexto de una movilización del magisterio disidente.

Algunos de ellos, quienes pidieron el anonimato por una fuerte llamada de atención de las autoridades para no dar declaraciones a la prensa, cuestionaron la atención médica y refutaron al secretario de Salud, José Narro Robles, quien dijo que a los heridos se les brindaría atención de primer nivel.

Malos tratos

En este sentido, Santiago Ambrosio Hernández, uno de los coordinadores de la Caravana de Nochixtlán, aseguró que lo que las autoridades federales llaman consultorios no son más que las unidades médicas que llegan a las zonas rurales y serranas durante las campañas de salud.

Incluso, señaló que “el mismo personal médico que rechazamos en Nochixtlán, por sus malos tratos –tras los hechos violentos– nos los quisieron imponer otra vez aquí”. Frente el nuevo rechazo, la Ssa envió diferente personal, dijo el coordinador Ambrosio Hernández.

El ofrecimiento original de la Ssa era la instalación inmediata de varios consultorios y tres equipos multidisciplinarios para hacer la valoración médica. Algunos de ellos, dada la gravedad de estado de salud, ya fueron canalizados al Instituto Nacional de Rehabilitación y otros al servicio de cirugía del Hospital General Manuel Gea González.