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Las despedidas se presenta en corta temporada en el Centro Cultural del Bosque

Llevan a escena el camino emocional que recorren las pacientes de cáncer de mama

La obra es un viaje que traslada al espectador del dolor más profundo hasta las risas más sanadoras, considera la dramaturga Lucía Gómez-Robledo

Contó con apoyo de la Fucam

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Las despedidas está hecha para dejar ir y para recordar que la vida es valiosa, expresó la actriz y dramaturga Lucía Gómez-Robledo. Arriba, una foto tomada de la cuenta oficial de Twitter del Centro Cultural del Bosque @CCB_INBAFoto Sandra Perdomo
 
Periódico La Jornada
Martes 23 de enero de 2018, p. 6

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), cada año unas 6 mil mujeres en México pierden la batalla contra el cáncer de mama, enfermedad considerada una de las principales causas de fallecimiento entre las que tienen 20 años de edad en adelante, a escala nacional.

Como forma de concientizar sobre la importancia de la detección oportuna y ayudar a quienes viven esta realidad de cerca, se presenta en temporada la obra de teatro Las despedidas, con dramaturgia de Lucía Gómez-Robledo, dirigida por Bárbara Riquelme, en la sala CCB, del Centro Cultural del Bosque, los martes a las 20 horas.

La obra es un viaje que va del dolor más profundo hasta las risas más sanadoras.

Salpicada con cierto humor, Las despedidas cuenta la historia de Ana, joven de 32 años diagnosticada con cáncer de mama, quien además lucha contra una depresión crónica.

En un abrir y cerrar de ojos, con el resultado de los estudios médicos, Ana pasa de tener una vida tranquila e independiente a ser paciente.

La reacción de sus amigos y seres queridos que la rodean no se hace esperar, incluso la de un pretendiente que sabe decir las palabras correctas, pero que realmente se encuentra aterrado por la situación.

Detener por completo lo que ella pensaba que era una buena vida le provoca una serie de emociones que la atormentan. Sin embargo, muy pronto Ana descubre que con ayuda de su mejor amiga y de un amable tatuador, la vida puede continuar incluso mejor que antes.

Ana, con la serenidad recuperada, un poquito de mezcal y ciertas dosis de humor negro, se defiende ante la adversidad.

Es una obra que propone reflexionar de manera lúdica sobre el camino emocional que recorre la protagonista, que va del enojo, la frustración y la depresión, a la paz, la esperanza y el buen humor, lo cual se puede apreciar en la fiesta que Ana y su mejor amiga hacen para decir adiós a los senos de la protagonista.

De acuerdo con la actriz y dramaturga, es una situación sobre la que se debe hablar para atender la enfermedad a tiempo y con responsabilidad. Se trata de una comedia. Esta hecha para dejar ir y para recordar que la vida es valiosa. Al final hay un mensaje de mucha unión y apoyo.

La puesta en escena contó con el apoyo de la Fundación del Cáncer de Mama (Fucam), dedicada al diagnóstico, tratamiento y seguimiento especializado de cáncer de mama. Considerada líder en su ramo, en México y América Latina, durante 17 años ha ofrecido atención integral a los grupos más desprotegidos del país, 7 por ciento de los casos de cáncer de mama que se detectan a escala nacional.

Con música de Alejandro Preisser e iluminación de Lydia Margules, y con las actuaciones de Lucía Gómez-Robledo, Amayo Blas y Sébastian Torres, Las despedidas se presenta en corta temporada en la sala CCB, del Centro Cultural del Bosque (Reforma y Campo Marte, estación Auditorio del Metro) los martes a las 20 horas, hasta el 27 de febrero.