El dirigente de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Carlos Aceves del Olmo, dijo que el triunfo de José Antonio Meade es seguro y no requieren de ningún milagro para ganar, como lo sugirió el viernes Andrés Manuel López Obrador.

Pues a lo mejor él, que es brujo, nos haga el milagro. Nosotros lo que hacemos es trabajar, presentar buenas propuestas con un liderazgo, un estadista que sabe lo que está diciendo y no como el que acusa a todos de rateros, señaló al término de una reunión con candidatas priístas.

Del Olmo tiene un lugar asegurado en el Senado porque es preferente en la lista plurinominal, al igual que Vanessa Rubio, jefa de la oficina de Meade, quien participó en el encuentro. Aseguró que su jefe es el mejor servidor público que ha dado este país.

Luego, en entrevista, sostuvo que van en segundo lugar.

En igual tono rechazó los comentarios de López Obrador: No necesitamos milagros. Los milagros son para la gente que los necesita para la salud, para la que tiene algún problema familiar. Para la Presidencia de la República se requiere capacidad, conocimiento, experiencia probada, y por eso Meade será el presidente de los mexicanos.

Beatriz Pagés, candidata al Senado por Ciudad de México, dijo que en el tercer y último debate entre candidatos se vio quién es quién.

“Supimos quién pondría en riesgo nuestras libertades… Sabemos lo que significaría que el 1º de julio llegara un hombre equivocado, un demagogo y un autoritario al poder.”

Agregó, sin nombrarlos, riesgos de los contendientes. Tenemos una opción de alguien sin experiencia que ya vimos que sabe tocar muy bien la guitarra, la batería y que sabe tocar la flauta, y que la hace de charro. Por el otro lado tenemos alguien que nos quiere llevar al pasado, que quiere a los criminales en la calle y que además quiere que se cierre la inversión privada tanto nacional como extranjera.

En la parte inferior del auditorio, se escuchaban aplausos y el ruido de matracas. Arriba, hileras de obreras, varias decenas de una fábrica de Bimbo, se entretenían con su teléfono y otras se despacharon una siesta.

Al acto acudieron dirigentes de otras organizaciones que integran el Congreso del Trabajo, sector obrero del PRI.

Ahí estaba, por ejemplo, Abel Domínguez, quien desde hace 40 años es líder –y presidente vitalicio– de la Central de Trabajadores y Campesinos. Apoyado para caminar por sus asistentes, se retiró con la confianza del triunfo del PRI.

Igualmente, antes de irse, Aceves del Olmo dijo a las trabajadoras que afuera del auditorio recibirían un obsequio del candidato.

Deprisa se formó la fila de quienes al llegar temprano al auditorio Fernando Amilpa recibieron gansitos y mantecadas.

Al mediodía les dieron, dentro de una bolsa de tela, un cilindro rojo para agua, una playera y seis folletos con la propaganda de Meade. El paquete incluyó unos calcetines blancos empacados hace dos años, para el aniversario 80 de la CTM.