Zacatecas, Zac.

Unos 300 habitantes de la cabecera municipal de Cañitas de Felipe Pescador bloquearon durante 24 horas las vías del tren que cruzan por esa población, en protesta porque la empresa Ferromex, filial de Grupo México, de Germán Larrea, cerró desde junio pasado la estación de servicio ferroviario y despidió a un centenar de trabajadores.

Asesorados por la organización social Frente Popular de Lucha de Zacatecas, un grupo de empleados cesantes, acompañados por sus familias y otros habitantes de Cañitas de Felipe Pescador –distante 130 kilómetros al norte de la capital del estado–, comenzaron la protesta la tarde del lunes y emitieron un pronunciamiento sobre las razones de su inconformidad dirigido a la opinión pública.

Ferromex anunció el cierre de esa estación, construida por la desaparecida paraestatal Ferrocarriles Nacionales de México como punto de intersección del eje ferroviario México-Ciudad Juárez, argumentando la inseguridad que prevalece en la región, según medios locales.

En esa zona han sido asaltados trenes y robados lotes de automóviles nuevos procedentes de plantas armadoras del Bajío con destino a Estados Unidos.

Los trabajadores en proceso de liquidación buscaron negociar con la filial de Grupo México que no se cerrara la única empresa que da vida económica a esta árida localidad, enclavada en el semidesierto norte de Zacatecas, con alrededor de 7 mil habitantes. La compañía no aceptó.

Los inconformes expusieron que decidieron iniciar el bloqueo ‘‘luego de no obtener respuestas por parte de Ferromex desde mayo, cuando se inició el diálogo, para que reanude actividades de maniobra, operación, traslado y cambio de turno de personal’’.

Por ello, se optó por ‘‘realizar una toma pacífica de las inmediaciones de las vías férreas, con la finalidad de exigir se instale de inmediato una mesa de diálogo en la cual participen el gobierno federal, el estatal y directivos de dicha empresa’’. Las autoridades aceptaron negociar.

Los manifestantes exigen la reinstalación de alrededor de 100 trabajadores, lo que reactivaría 500 empleos indirectos que se perdieron cuando dejó de operar la estación de servicio ferroviario.

Demandaron también ‘‘la realización de obras de carácter social en el municipio e indemnización por 100 años de derecho de paso por esta estación’’.

Pidieron la reapertura de itinerarios del ferrocarril en esta cabecera municipal, e hicieron énfasis en que ‘‘regrese el servicio de tren de pasajeros’’, que se perdió cuando el gobierno de Ernesto Zedillo (1994-2000) privatizó Ferronales.

En ese entonces se concesionó este ramal ferroviario a Ferromex, que decidió suprimir el servicio de pasajeros –el cual cientos de personas usaban diariamente para trasladarse a Torreón, Coahuila o a la capital de Zacatecas– porque no era rentable.

‘‘Hacemos un llamado a la sensibilidad de nuestro gobernador, Alejandro Tello Cristerna, para que abogue por cientos de familias que ahora estamos desamparadas por tan lamentable determinación’’, expusieron.