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Ť El objetivo bombardeado eran dirigentes talibanes
y de Al Qaeda: Pentágono
Ataque a caravana de líderes tribales provoca
la muerte de 65 afganos; EU niega la versión
Ť Suman unos 7 mil los combatientes fundamentalistas presos
en Afganistán: Washington
Ť Exige Amnistía Internacional que los detenidos
sean tratados según la ley humanitaria
AFP, DPA, PL Y REUTERS
Kabul, 21 de diciembre. La aviación estadunidense
provocó hoy la muerte de 65 personas al atacar una caravana de líderes
tribales an-cianos que se dirigían a Kabul para asistir a la toma
de posesión del nuevo gobierno interino afgano, que será
encabezado a partir de este sábado por el pashtún monárquico
Hamid Karzai.
El convoy de vehículos con jefes tribales, ancianos
y antiguos comandantes mujaidines, iba de Gardez a Khost, y el bombardeo
ocurrió en las cercanías de Sato Kandau, en la provincia
de Paktia, reportó la agencia Afghan Islamic Press (Aip), con sede
en Pakistán, e indicó que 14 vehículos fueron totalmente
destruidos.
El Pentágono afirmó "no tener conocimiento"
de los informes de Aip respecto de que el ataque lanzado por aviones artillados
AC-130 y de combate de la marina estadunidense provocó la
muerte de dirigentes que se iban a la ceremonia de inauguración
del nuevo gobierno, según la portavoz Victoria Clarke.
Clarke insistió en que sin duda "se trata de un
blanco militar... identificado por diferentes servicios de información",
ante la pregunta de la prensa de si no se trataba de "un error", mientras
otro portavoz estadunidense, el teniente coronel David Lapan, sostuvo que
"es falso" el reporte suministrado por la agencia Aip.
Previamente el Pentágono había asegurado
que el objetivo bombardeado eran líderes talibanes o de Al Qaeda,
pues el ataque ocurrió en las cercanías de las montañas
de Tora Bora, donde los estadunidenses concentran actualmente la búsqueda
de Osama Bin Laden y tratan de aniquilar allí a los seguidores de
la organización islámica.
El secretario de Defensa estadunidense, Donald Rumsfeld,
se había concretado a señalar que "hubo muertos y numerosos
vehículos dañados", y a su vez el jefe ad-junto del Estado
Mayor Conjunto, general Peter Pace, reiteró que el blanco eran enemigos
y que también fueron alcanzados varios edificios de los adversarios.
Pace se negó a proporcionar detalles so-bre el
origen de los informes de inteligencia para lanzar el ataque: "No quisiera
referirme a los indicadores específicos que nos llevaron a atacar
ese convoy en particular".
Notables de Paktia, las víctimas
Pero
Aip, agencia que se declara independiente y que al comienzo del conflicto
se le identificaba como cercana al talibán, citó entre sus
fuentes a un miembro de la shura o consejo provincial, quien dijo
que las víctimas eran parte de los notables de Paktia.
Entre los ancianos y jefes tribales víctimas también
figuran el comandante Mo-hammad Ibrahim, hermano de otro célebre
comandante identificado como Maulvi Ja-laluddin Haqqani. Sin embargo, no
hubo reacción del nuevo gobierno interino.
Poco antes Aip había informado de la muerte de
otros 15 civiles durante otro bombardeo de los aviones estadunidenses,
que esta semana habían suspendido los ataques ante la falta de objetivos.
Pero el nuevo ataque ocurrió casi en el mismo sitio
en que fue alcanzado el convoy de jefes tribales.
Por su parte el portavoz de la coalición
antiterrorista en Islamabad, el estadunidense Kenton Keith, afirmó
que a la fecha hay unos 7 mil combatientes talibanes y de Al Qaeda prisioneros
en Afganistán, ya sea en manos de los aliados afganos o de las tropas
estadunidenses asentadas en el país.
Señaló que el objetivo de Estados Unidos
es interrogar a todos esos soldados, con apoyo de la FBI, para determinar
los diferentes grados de "culpabilidad e implicación", en un proceso
largo y difícil que continuará el tiempo que sea necesario
para poner a disposición de la justicia a toda persona implicada
de lejos o cerca en los atentados del 11 de septiembre.
Amnistía Internacional demandó que los combatientes
detenidos sean tratados conforme a la ley humanitaria internacional, y
que en caso de juicio los tribunales civiles son preferibles a las cortes
de excepción.
El jefe del Pentágono, Donald Rumsfeld, insistió
en que las tropas estadunidenses ayudan a las fuerzas afganas a intensificar
el rastreo y búsqueda de cuevas y túneles en Tora Bora, y
que a esas tropas se han sumado otras fuerzas de la coalición occidental
porque se trata de una acción bajo reglas de combate agresivas y
no defensivas, por lo que la guerra seguirá sin tregua.
Pakistán también ha desplegado fuerzas militares
en la frontera afgana con Tora Bora, y se estima que ha detenido a unos
500 combatientes de Al Qaeda que huyeron hacia su territorio.
Fuentes oficiales en Islamabad dijeron que en las últimas
horas fueron arrestados otros tres combatientes y que además tiene
en su poder a cinco presuntos miembros franceses de Al Qaeda.
La emisora británica BBC difundió
un sondeo de opinión en el sentido de que los talibanes siguen gozando
de gran simpatía en Pakistán, con 43 por ciento.
Mientras, la televisión italiana Rai afirmó
que Bin Laden logró escapar a Cachemira con ayuda de los servicios
de inteligencia paquistaníes, y que unos 2 mil de sus seguidores
se diseminaron hacia esa provincia y también a Chechenia.
El que fuera el máximo dirigente talibán,
mullah Mohammad Omar, se encuentra a salvo en algún lugar
de Afganistán, así co-mo todos los demás líderes
del derrocado régimen islámico, señaló el mullah
Abdul Shakour, ex ministro de Comunicaciones y Reconstrucción,
pero de Bin Laden dijo no saber dónde se encuentra.
Durante la víspera de la investidura del primer
gobierno transitorio de la era postalibán en Afganistán,
una pequeña avanzada de la fuerza internacional autorizada por la
Organización de Naciones Unidas comenzó su misión
este viernes en Kabul.
Unos 30 marines británicos llegaron esta
noche a la capital afgana, y se estima que serán 75 hombres de la
infantería real de la marina británica los que desempeñarán
un papel de seguridad del nuevo gobierno interino afgano de 30 miembros
que encabezará Hamid Karzai, quien controlará el poder durante
seis meses.
La ceremonia tendrá lugar en el Ministerio del
Interior y empezará a las 11 de la mañana de este sábado,
cuando el presidente saliente, Burhanuddin Rabbani, le entregue el mando
a Karzai.
Rabbani, quien fue derrocado por los combatientes talibanes
en 1996, sólo ha detentado el poder en las últimas semanas
tras el desplome del régimen islámico gracias a los bombardeos
estadunidenses.
Si bien todavía no se define el número de
soldados extranjeros que serán desplegados a partir de este sábado,
Alemania resolvió unirse a Dinamarca y Holanda para enviar conjuntamente
mil 450 efectivos militares al país centroasiático.
Karzai ejercerá como primer ministro al mando de
un régimen de transición de seis meses, pero se estima que
no podrá actuar con total independencia porque tendrá que
consultar con los verdaderos poseedores del poder en todo el país,
y que son los líderes de las numerosas milicias tadjika, chiíta,
uzbeka, hazara y pashtún.
Estados Unidos se declaró listo para cooperar con
el nuevo gobierno afgano de cara a la apertura de su embajada, y el presidente
George W. Bush invitó de inmediato a Karzai a que una vez que asuma
el mando visite Washington.
Se tratará del "primer traspaso de poderes pacífico"
en Afganistán, "por primera vez en décadas y quizá
siglos", dijo el emisario estadunidense James Dobbins, quien agregó
que el representante de su país a la ceremonia será el responsable
de la campaña militar, general Tommy Franks.
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